Es una operación entre privados, claro está; sin embargo, es de interés público, concretamente de Viña del Mar. Eso es lo básico en la operación financiera mediante la cual la empresa Enjoy, actual operadora del Casino Municipal, se abre a una negociación con el importante fondo de inversiones norteamericano, Advent International, que pasará a tener gran parte de las acciones del grupo que desde hace más de 40 años explota el recinto de juegos local.
Enjoy, como empresa privada, aprobó un aumento de capital por $ 106.969 millones, con lo cual sus acciones, que ayer se cotizaban a $ 54, totalizarán 4.700 millones de unidades, de las cuales Advent suscribiría al menos 1.241 millones. De cualquier modo, la familia Martínez, creadora del Grupo Enjoy mantendrá parte importante de la propiedad, estimándose alcance entre un 25 y un 28% del total.
La familia Martínez, que ha logrado proyección nacional e internacional con Enjoy, ha basado su éxito a partir de la operación del Casino Municipal de Viña del Mar. Ahora, el cambio accionario supone una nueva gestión en todo el patrimonio del grupo y, en particular, en el casino viñamarino.
La inversión extranjera es bienvenida, pese a las reservas más que nada ideológicas de algunos sectores, pero hay que tener una mirada optimista, como la del senador Francisco Chahuán (RN), quien espera que "se afiance y que la marca Casino de Viña del Mar, como marca de ciudad, se mantenga. Lo que nos interesa a nosotros es la ciudad". Y es lo que importa más allá de un buen negocio entre privados.
Por su lado, el senador Ricardo Lagos Weber espera "que se resguarden primero los derechos de los trabajadores y luego se resguarden en buena forma los ingresos del municipio".
Pero los tiempos han cambiado y, en virtud de la Ley 19.995, la Municipalidad ya no tiene la titularidad absoluta del Casino, creado en 1928, pues está bajo el control de la Superintendencia de Casinos de Juego, que asume la licitación de las siete casas de juego municipales que hay en el país. Y sobre esa licitación hay incertidumbre por recursos pendientes en la Corte Suprema contra las bases de la convocatoria, sobre las cuales, una vez clarificadas judicialmente, se debe definir el futuro de la concesión viñamarina.
La operación accionaria concretada por Enjoy y la participación del fondo de inversión internacional Advent, uno de los más importantes del mundo, sumado a la exitosa gestión y experiencia de la familia Martínez, deben asegurar estabilidad y continuidad al Casino de Viña del Mar como importante pilar del desarrollo de la comuna, con una mirada global de futuro que se espera del nuevo controlador.