Cristián Rodríguez F.

Cerca de dos años y tres meses demoró la Policía de Investigaciones (PDI) en dar con el paradero de Natalia Guerra Jequier, la madre del lactante de sólo dos días de vida que en diciembre de 2012 fue incinerado como parte de un ritual llevado a cabo por la Secta de Colliguay, liderada en ese entonces por Ramón Castillo Gaete, autodenominado Antares de la Luz.

La búsqueda a cargo de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE) Metropolitana no fue fácil y requirió efectuar una serie de diligencias, como seguir desde el aeropuerto hasta su casa a la pareja de la mujer, hurgar en la basura que depositaban fuera del domicilio y someter a peritaje caligráfico distintas notas manuscritas para confirmar que correspondían a Natalia.

Una extensa investigación para dar con el paradero de solo una de las cerca de cuatro mil personas que actualmente se encuentran con una orden de detención en el país y que a diario son buscadas por la PDI, a veces con resultados exitosos y otras veces no tanto.

Justamente, la Región de Valparaíso no se escapa de mantener en su historial distintos casos de prófugos de la Justicia, algunos con un mayor impacto mediático -y también político- que otros.

Horas claves

El miércoles de la semana pasada, el Tribunal Oral en lo Penal de Quillota dictó una orden de aprehensión en contra de la exconcejala de Limache y exjefa de gabinete de la Gobernación porteña, Cynthia Marín (Ind. pro RN), luego que la Corte de Apelaciones la condenara a cumplir una pena efectiva de cinco años y un día por el delito reiterado de estafa.

Se trata de la segunda orden de detención que recibe la exedil -hermana del core Percy Marín y cuñada de la diputada Camila Flores, ambos de RN- durante el actual proceso. Sin embargo, y si bien la anterior acción sólo duró nueve días hasta que fue suspendida por la Corte Suprema, en ninguno de los casos ha sido detenida.

A cargo de su búsqueda está la Brigada de Delitos Económicos (Bridec) de la PDI, donde reconocieron que los primeros días desde que se dicta la orden son claves para dar con el paradero de la mujer.

"Nosotros estamos con una línea investigativa que le estamos dando celeridad en este minuto. Y es prioridad para nosotros, porque el primer tiempo es vital al comienzo de la búsqueda. Estamos muy enfocados en ella", comentó a este Diario el jefe de la Bridec de Valparaíso, subprefecto Claudio González, quien reconoció que las diligencias van desde ubicarla en su domicilio particular hasta contactar a los familiares para dar con su pista.

En esa línea, González descartó que las acciones judiciales que lleva adelante el abogado de Marín, Juan Carlos Manríquez (ver recuadro), impidan continuar con la actual búsqueda. "Nosotros tenemos una orden de detención que cumplir y en eso estamos. Mientras esté vigente, la estaremos buscando", advirtió el subprefecto, reconociendo que en la brigada todas las órdenes de aprehensión son importantes, pero que existen factores que hacen que por momentos se concentren en una causa.

Exjefe de gabinete

Según explicó el jefe de la Bridec, el caso de Cynthia Marín es "muy similar" al de uno de los prófugos más buscados del país y que también pertenece a la zona: Enrique Kittsteiner Yovanini, exjefe de gabinete de la Intendencia Regional durante el primer gobierno de Sebastián Piñera y quien fue condenado en octubre de 2014 a ocho años de presidio efectivo por fraude al Fisco y malversación de caudales públicos.

En ambos casos, sostuvo González, existió un desfase de tiempo desde que fueron condenados hasta que la sentencia comenzó a ejecutarse, "lo que les permitió darse a la fuga".

Desde esa fecha han pasado cuatro años y nueve meses, tiempo en que la Bridec se ha mantenido con diligencias puntuales para dar con el paradero de Kittsteiner. "Nosotros tenemos la obligación de ubicarlo y así lo hemos hecho todo este tiempo. Nunca hemos cesado la búsqueda ni de seguir monitoreando cualquier pista que vaya saliendo. Esto consiste en tomar la hebra y no soltarla hasta llegar a la otra punta", explicó.

Incluso, el subprefecto aseguró que existen equipos policiales que hasta la fecha se mantienen con procedimientos relacionados al caso. "Hay equipos que siempre están rastreando y persiguiendo a la persona. Hay diligencias puntuales, y a medida que se agota una línea investigativa tenemos otra que se inicia de inmediato. Nunca hemos descansado en buscarlo y en encontrarlo", sostuvo el funcionario de la PDI, quien además advirtió que alrededor de un 95% de las personas en calidad de prófuga son encontradas.

"Quizás hoy o mañana no son encontrados, pero siempre hay un pasado mañana para ubicar a las personas. Él (Kittsteiner) va a ser encontrado en algún minuto y va a tener que ser detenido", señaló.

Prescripción de la pena

Pero en medio de la búsqueda del exjefe de gabinete del exintendente Raúl Celis, existe otro antecedente sobre la mesa que en octubre de este año podría cambiar todo el escenario.

De acuerdo al Código Procesal Penal, y que fue ratificado a este Diario por el abogado del Consejo de Defensa del Estado (CDE) y quien dirigió la querella en el caso, Javier Rojas-Mery, la condena que recibió Kittsteiner debiese prescribir a los diez años si es que se mantiene prófugo, es decir, en octubre de 2024.

"Efectivamente, en Chile los delitos prescriben dependiendo de la cuantía de la condena. En el caso de los crímenes, que van desde los cinco años hacia arriba, el plazo de prescripción es de diez años. Y eso opera a favor de todos y puede ser declarada de oficio por el tribunal o a petición de partes. Dándose los requisitos, se declara la prescripción", dijo el abogado.

Sin embargo, agregó Rojas-Mery, en la legislación también existe lo que se conoce como "media prescripción" y que consiste en solicitar dicho beneficio una vez transcurrido la mitad del plazo definido, en este caso, a los cinco años de dictada la sentencia, que se cumplen en octubre próximo.

"Si hubiera transcurrido la mitad del tiempo necesario para la prescripción, la defensa puede solicitar que ese hecho se considere como una atenuante y así pedir la rebaja de la pena en un grado. En este caso, la condena es de presidio mayor en su grado mínimo y podría solicitarse un presidio menor en su grado máximo, es decir, una pena desde los tres hasta los cinco años", explicó el abogado del CDE, precisando que la "media prescripción" consiste más bien en un beneficio que debe ser autorizado por el tribunal.

El punto es que en la eventualidad de que se solicite dicha alternativa y sea concedida por la justicia, la defensa también podría pedir que Kittsteiner cumpla su condena en libertad al tratarse de una pena inferior a los cinco años.

Al respecto, Rojas-Mery reconoció que es una posibilidad, aunque dijo que el haber estado prófugo podría perjudicarle. "Para otorgar una pena sustitutiva tiene que haber un informe favorable de Gendarmería, que es difícil que esté. Además, se toma en consideración el tipo de delito, porque no es lo mismo huir de un hurto que de un delito de corrupción", advirtió el abogado.

"En Chile los delitos prescriben dependiendo de la cuantía de la condena"

Javier Rojas Mery, Abogado del, Consejo de Defensa del Estado