El censo, tema en el año electoral
Las cifras, tanto del año 2002 como de 2012, reiteran la anormal concentración poblacional en la Región Metropolitana que tiene múltiples proyecciones.
Se han dado a conocer las principales informaciones logradas en el censo realizado el año pasado, destinado a recoger datos demográficos, económicos, sociales y culturales en general de la población residente en el país. El total de los habitantes de Chile, de acuerdo a ese trabajo, llega a 16.634.603, en tanto que la cantidad registrada en el censo de 2002 era de 15.051.136.
En el caso de la Quinta Región los habitantes totalizaban el año pasado 1.734.917. En 2002 la cantidad ascendía a 1.530.841. Sin embargo, el dato grueso, que reitera el censo del año pasado en relación a mediciones anteriores, es el número de habitantes de la Región Metropolitana, que totalizaba conforme al estudio indicado 6.685.685 personas. En la medición de 2002 la población metropolitana sumaba 6.045.532.
Las cifras, tanto del año 2002 como de 2012, revelan con fuerza una anormal concentración poblacional en la capital que tiene múltiples proyecciones y que arroja como resultado un centralismo que frena el desarrollo nacional y que no logra ser controlado, pese a diversas iniciativas que, apreciando las cifras, los grandes números, revelan que no han tenido la fuerza suficiente ni siquiera para frenar el problema y menos para revertirlo.
Y esta desmedida concentración poblacional tiene variados alcances. Por un lado demandas, justas todas, que suponen un elevado gasto público y, por otro, la concentración de centros de decisión, de centros de poder políticos y económicos, públicos y privados. La gran ciudad, por su propio peso, genera las mejores oportunidades, con lo cual se constituye en un centro de atracción, estableciéndose un círculo vicioso que tiende a agravar el problema.
El censo ofrece además indicadores de salud, de ingresos y culturales que al ser analizados demuestran que las mejores condiciones, al menos aparentes, se dan en la gran capital. Por otra parte, apreciando solo las cifras de población observamos que el crecimiento en zona alejadas del centro del país es reducido.
El censo 2012, con todos sus indicadores, es un tema que debería estar presente en el debate electoral de este año como una voz de alerta que genere un compromiso serio, de verdad, con una efectiva descentralización del país.