Distinción a psiquiatra que pesquisa anorexia y bulimia desde los 90
INVESTIGACIÓN. Médico y docente Rosa Behar recibe el reconocimiento de la Sociedad Chilena de la especialidad.
Así como en los años 90 sus investigaciones determinaron que un 18% de las alumnas de enseñanza media, un 15% de las universitarias y un 41% de las adolescentes con sobrepeso en la Región presentaban peligro de padecer trastornos de la conducta alimentaria, desde 2002 se ha abocado a detectar otros grupos en riesgo de desarrollar un desorden alimentario, caracterizado por pérdida intensa y deliberada de peso, inducida o mantenida por el propio enfermo, y asociada a una imagen corporal distorsionada, pudiendo también existir, en algunos casos, episodios de "atracones" y purgas.
Así, la psiquiatra y docente de la Universidad de Valparaíso, Rosa Behar, pudo establecer que también son vulnerables 18% de quienes practican acondicionamiento físico en gimnasios; 23,4% de las embarazadas que asisten a controles en atención primaria; 15% de las alumnas de nutrición y dietética; 12% de los alumnos de enseñanza media de colegios particulares y que las niñas con estado nutricional normal, sobrepeso y obesidad presentaron porcentajes de riesgo similares (23%, 26% y 25%, respectivamente).
Otros constataciones recientes corresponden al cuadro denominado alcohorexia, que algunos autores consideran un trastorno alimentario y que se observa con mayor frecuencia en mujeres jóvenes, cuyo objetivo es mantenerse delgadas y que casi no consumen alimentos durante el día, ahorrando calorías para beber alcohol.
IMPORTANTE DISTINCIÓN
Por su aporte al conocimiento de los trastornos de la conducta alimentaria, la Sociedad Chilena de Neurología, Psiquiatría y Neurocirugía le entregará la Medalla Dr. Augusto Orrego Luco, que distingue al psiquiatra que logra transmitir y despertar el desarrollo crítico de la especialidad influyendo en la formación continua de sus pares.
Coautora del libro "Anorexia Nerviosa y Bulimia Clínica y Terapeútica" y -junto al psiquiatra Gustavo Figueroa- de "Trastornos de la conducta alimentaria. Segunda Edición", que contiene guías prácticas dedicadas a los médicos de atención primaria, familiares, educadores y pacientes para ayudarlos a manejar estos trastornos, la doctora Behar es la primera mujer en obtener este galardón, por lo cual el anuncio de su otorgamiento "ha sido muy emocionante y un verdadero honor para mí, ya que, además, creo que representa un tributo al género femenino".
ANORÉXICOS EN AUMENTO
- ¿Cómo ha evolucionado la prevalencia de anorexia masculina?
La frecuencia de los desórdenes alimentarios en forma global ha ido en paulatino aumento. Las manifestaciones clínicas son similares al sexo femenino, pero en los varones existe generalmente un trastorno de su identidad y orientación sexual (homosexualidad, bisexualidad o asexualidad). Los trastornos de la conducta alimentaria afectan principalmente a las mujeres, entre 90% a 95% de los casos.
Entre los factores que facilitan el desarrollo de este trastorno menciona el estereotipo de rol de género en la sociedad occidental, que condiciona en forma importante las actitudes y comportamientos hacia la silueta corporal, el peso y los hábitos alimentarios, "generando fuertes y permanentes presiones sociales sobre las mujeres, ya que los mensajes, principalmente difundidos a través de los medios de comunicación, homologan la figura delgada a cualidades positivas como belleza, éxito, inteligencia, atractivo sexual, autosuficiencia e independencia".
LA BULIMIA
- ¿Qué se puede decir de la bulimia? En una época hubo colegios que cerraban los baños a la hora de recreo o tenían otras estrategias para evitar que las niñas los utilizaran para vomitar.
Las formas clínicas de los trastornos de la conducta alimentaria se caracterizan por ser muy variables, entrecruzarse y virar, habitualmente desde el polo anoréctico restrictivo hasta el polo bulímico purgativo y viceversa. Las conductas bulímicas que incluyen principalmente episodios de atracones y purgas -como inducción de vómitos, uso y abuso de laxantes y diuréticos- pueden observarse tanto en la anorexia nerviosa del subtipo compulsivo-purgativo, como en la bulimia nerviosa e incluso en los trastornos de la conducta alimentaria no especificados.
CASO FATAL
- En 2007 se produjo el dramático caso de la estudiante viñamarina Andrea Carrió, quien murió a causa de la anorexia, cuando sólo tenía 17 años. ¿Llega un momento en que las pacientes no pueden comer aunque comprendan que es necesario para sobrevivir?
La malnutrición y el caos dietético llevan en diversos grados a un enflaquecimiento que puede llegar a ser extremo, con riesgo vital, produciéndose una alteración global del funcionamiento del organismo y que abarca todos los sistemas. Al comienzo de la afección no está alterada la sensación de hambre; no obstante, a medida que se va agravando el estado nutricional, ésta desaparece, configurándose un circulo vicioso, en el cual, la desnutrición favorece los pensamientos distorsionados en torno a la percepción de la imagen corporal, ingesta de ciertos alimentos y el peso.
"Asimismo -agrega la especialista-, con la desnutrición se genera un retardo en el vaciamiento gástrico, estitiquez, atrofia de las vellosidades intestinales, que inciden en la absorción de los nutrientes y en la aparición de una sensación de saciedad precoz, hinchazón abdominal, etc.", factores que a su vez dificultan la ingestión normal de las comidas.
PORFIADA DISTORSIÓN
PORFIADA DISTORSIÓN
- ¿Estos trastornos acompañan en forma latente a la persona durante toda su existencia?
Muchas veces, una paciente puede compensarse en la mayoría de los parámetros, como por ejemplo, regreso de las menstruaciones, recuperación del peso corporal, reestructuración de sus hábitos alimentarios o restablecimiento de su estabilidad emocional, pero la distorsión de la imagen corporal, es decir, la creencia de estar más gordas de lo que realmente son, puede permanecer a través del tiempo y ser muy difícil de revertir.
"Las personas cercanas a la paciente deben promocionar una alimentación saludable, balanceada, sin restricciones ni excesos, deben estar conscientes de sus propias actitudes y conductas personales hacia los alimentos, el comer y la imagen corporal", expone la especialista. "Los padres deben estar conscientes de los mensajes que envían a sus hijos/as, demostrarles a través de actos y de palabras cariño y respeto, buscar apoyo en su pareja, familiar o amistad en el proceso de tratamiento y recuperación de la paciente, mostrarse unidos y aceptar que la superación de este problema toma su tiempo".
PRONÓSTICOS
¿En materia de anorexia, cuáles son los casos de buen pronóstico? - Se consideran factores de buen pronóstico, entre otros: aceptación de la existencia de la patología por parte de la paciente, buena cooperación de los padres, una buena inserción social previa, mejoría en la percepción de la imagen corporal, efectuar el diagnóstico y tratamiento precozmente.
- ¿Y en cuáles se puede esperar un peor desenlace? - Factores de mal pronóstico fundamentalmente son: tendencia a la cronicidad, con fracasos en tratamientos previos, hospitalizaciones repetidas, persistencia de la alteración de la imagen corporal, de la inmadurez psicológica y sexual, disfunción familiar, escasa o nula motivación para el tratamiento, rechazo del trastorno por parte de los padres, entre otros.