Fue una jornada larga y tediosa, pero que al final la mayoría terminó por calificar de histórica y positiva para Santiago Wanderers. La asamblea extraordinaria para votar la reforma de estatutos de la corporación caturra contó con una participación de 182 socios, de los cuales 121 se manifestaron por aprobar los cambios propuestos por una comisión que trabajó casi seis meses para actualizar un documento vigente desde 1973.
Aunque se intuía que la reforma contaba con un respaldo mayoritario, se sabía también que los opositores harían sentir con fuerza su voz especialmente en algunos puntos polémicos. Y eso fue exactamente lo que ocurrió en uno de los salones del Liceo N° 2 de Niñas, en una cita que debía iniciarse a las 10 de la mañana, pero que partió casi al mediodía, justo cuando terminaba el partido entre Wanderers y Unión Española por la final del campeonato nacional de Clausura Sub 19 (duelo que fue transmitido en pantalla gigante en el mismo recinto)
A grandes rasgos, los cambios que introduce el proyecto dicen relación con la imposibilidad de reelección inmediata para el directorio, que pasará a tener siete miembros (hoy son nueve) y cuyo ejercicio durará tres años (actualmente son dos). Se establece como requisito un año de antigüedad como socio para poder postular a un cargo. También se crea un Tribunal de Honor (punto que generó las discusiones más fuertes en la reunión) y se establecen condiciones más accesibles para convocar a asambleas extraordinarias (hoy se necesita el respaldo de un tercio de los socios activos).
SATISFACCIÓN
Finalizada la reunión, el presidente de la "comisión estatutos", Hernán Madariaga, se manifestó conforme con el resultado, sin dejar de reconocer que a pesar de tener un respaldo amplio en apariencia, se cumplió con lo justo para aprobar la reforma (se necesitaban dos tercios de los votos).
"Esto es un punto de inflexión en la historia de nuestra corporación, pero lo más difícil está por venir. Ahora hemos aprobado nuevos estatutos y el desafío es generar más socios que participen, que haya más gente para que tengamos la fuerza necesaria para ir a cambiar ese contrato de concesión y recuperar en algún momento nuestro club de manera completa. Ese es el objetivo final y no vamos a descansar hasta que lo cumplamos", señaló.
Respecto al desarrollo de la asamblea y los momentos en que la discusión subió de tono, Madariaga optó por rescatar lo positivo: "los debates se dieron en los puntos que nosotros visualizábamos como complejos, pero el tenor del debate fue constructivo. Es positivo que estos ejercicios de democracia en nuestra corporación sean una constante y no una excepción. El triunfo es amplio en números porque no es fácil llegar a dos tercios, pero fue ajustado porque cumplimos casi al límite con ese porcentaje".
En cuanto a la masiva participación de socios en la reunión, indicó que era un gran avance considerando que la asistencia fue muy superior a la del último encuentro. "El 20 de julio tuvimos poco más de 100 personas, ahora fue casi el doble. Eso habla bien del proceso, pero para los desafíos que vienen necesitamos seguir alertas, informados y necesitamos muchos más socios que los que tuvimos hoy aprobando la reforma de estatutos. Es un muy buen primer paso, pero lo más difícil está por venir", reflexionó.
las dudas de león
Por el lado de la directiva, fue el vicepresidente Osvaldo León el encargado de analizar la jornada. Y a pesar de no ser partidario de todos los cambios presentados, coincidió en que lo vivido fue una "jornada histórica".
"Me parece que los niveles de concurrencia son históricos para un día muy trascendente. Esta alta presencia le da un sustento bastante importante para el futuro a la corporación. Estoy contento, más allá de las diferencias que uno pueda tener, el que sale fortalecido aquí es Wanderers y tenemos que seguir luchando por mantener esta vida institucional", señaló.
Sobre su posición personal, dijo que "tengo algunas dudas sobre los cambios, especialmente en el tema de las elecciones, pero así como se aprueban estatutos, también se puede modificar alguna norma si no provoca el efecto esperado. Lo importante era echar a andar el proceso".
Polémica creación del Tribunal de Honor
La creación del Tribunal de Honor (organismo que velará por la conducta de los socios) provocó una de las grandes discusiones en la reunión, dado que algunos opositores argumentaron que es la asamblea en su totalidad la que debe tomar decisiones en este tema "y no un grupo reducido de personas (tres), que además estará seis años en ese cargo". Otro punto conflictivo fue la propuesta de un socio en relación a crear la "revocabilidad de mandato", que permitiría pedir la renuncia a los dirigentes que no cumplan el plan de trabajo.