Avances en el rescate patrimonial
Estos trabajos no sólo requieren recursos económicos, sino que también conocimientos especializados ya que se trata de construcciones antiguas.
En recientes declaraciones a este Diario la concejal viñamarina Eugenia Garrido hizo un análisis de los avances en la tarea de recuperación de diversos edificios que son parte del patrimonio histórico y cultural de la Ciudad Jardín.
Estos trabajos no sólo requieren recursos económicos, sino que también conocimientos especializados ya que se trata de construcciones antiguas las cuales deben ser sometidas a la aplicación de técnicas de restauración que, junto con afrontar los daños causados por el reciente terremoto, también contemplen problemas propios del paso del tiempo, de los cambios climáticos y de la falta de una política de mantención acorde con el valor de esas edificaciones.
Informando sobre el Teatro Municipal la concejal destacó los avances registrados, especialmente en el reforzamiento de la infraestructura. Posteriormente se acometerán otras obras tanto en aposentadurías como en ornamentación, para culminar el rescate de ese importante patrimonio viñamarino en el año próximo a iniciarse. Esta tarea merece amplio apoyo, pues se trata de un centro de proyección cultural de alcance nacional.
Este avance, sin embargo, no puede hacer olvidar la ineludible recuperación de importantes edificaciones patrimoniales, como son los palacios Vergara, Rioja y Carrasco.
Se trata de edificaciones antiguas, felizmente adquiridas por la Municipalidad a través del tiempo, pero cuyo destino original era el de viviendas privadas. En consecuencia, sus estructuras y mantención requieren de una visión enfocada ahora a su uso público como museos o centro de actividades culturales o sociales. Ello implica un desgaste no considerado en los proyectos originales de esas construcciones, lo cual obliga a una metodología especial en su restauración.
Así, los avances en el rescate patrimonial viñamarino, exigen visiones especializadas y focalizadas a cada caso de acuerdo a los valores que se busca preservar, a su estado actual y a los usos futuros que se asigne a cada uno de esos espacios.