David Reyes reconoce que cuando le comentaron sobre la posibilidad de ser el nuevo portero de Coquimbo Unido, el primer recuerdo que se le vino a la mente fue "una de mis mayores alegrías". A fines del 2008, sobre el césped del estadio Francisco Sánchez Rumoroso y con Jorge Aravena en el banco, el sanantonino se puso por primera vez la jineta que lo identificaba como capitán de Santiago Wanderers.
"Esa cancha significa mucho para mí", insiste el guardavallas, quien luego de 14 años en el Decano buscará nuevos horizontes en la Cuarta Región como jugador del conjunto Pirata.
"Uno nunca quiere dejar su casa. Para mí, Santiago Wanderers lo es todo, irme no es sencillo, pero también tengo que velar por mi familia y por mi futuro como profesional", sostiene Reyes, confirmando que su préstamo se extenderá hasta junio y que su relación contractual con los verdes culmina en diciembre: "No quiero ilusionarme, y la verdad es que no sé si algún día voy a volver a vestir la camiseta de Santiago Wanderers, pero me la voy a jugar porque así sea".
El sanantonino repasa en pocos segundos lo que fue su vida junto a los caturros, admitiendo que "tras mi lesión en la rodilla derecha (2011) la cosa se puso muy cuesta arriba".
"En ese momento Mauricio (Viana) tomó la titularidad y hasta hoy demuestra que se trata de uno de los mejores arqueros de Chile, por lo que era muy difícil que yo recuperara el terreno", sostuvo, recordando que no es la primera vez que tuvo la oportunidad de dejar Valparaíso, aunque en ocasiones anteriores el club no estuvo dispuesto a cederlo. "Si me iba tendrían que haber traído otro arquero y era complejo, pero hoy están Gabriel (Castellón) y el "Pepo" (José Lafrentz), quienes tienen un enorme futuro y están en condiciones de resguardar bien el puesto en caso que les toque jugar".
Sobre su relación con Ivo Basay, el guardavallas aseguró que "él fue un buen tipo conmigo. Me dio la oportunidad de jugar y quizás en su momento, por diferentes razones, no la aproveché o simplemente no era de su total gusto como jugador... de todas formas, me despedí como corresponde a dos profesionales que quieren a Wanderers".
POR EL ASCENSO
David Reyes advierte que los objetivos en Coquimbo Unido son grandes. "Es un equipo parecido a Wanderers. Tiene una hinchada muy exigente y que quiere triunfos inmediatos", sostiene, añadiendo que "acá no hay dos metas... es ascender o ascender".
Y en lo personal la tarea tampoco es menor. "No sólo quiero ser un aporte, voy a luchar por un lugar en la titularidad y obtener la regularidad que necesito para retomar la confianza", añade el portero.
"Esto es fútbol y sé que en cualquier momento las cosas pueden cambiar para bien o para mal. Imagínate que de la noche a la mañana pasé de ser el capitán de Santiago Wanderers, a estar lesionado y no recuperar nunca más la titulartidad. Por ello sé que en Coquimbo el trabajo será inmenso, pero estoy preparado para ello", insiste, mientras se traslada a la Cuarta Región para ponerse a disposición de Carlos Rojas, con quien ya tuvo la oportunidad de trabajar cuando "Chifi" fue ayudante técnico de Jorge Garcés en el segundo semestre de la temporada 2010.
"Este desafío en Coquimbo me llena mucho. Tuve otras oportunidades en equipos de Ascenso, pero mi objetivo no sólo era ir por un tema de regularidad personal, sino que quería desafíos colectivos y Coquimbo es un conjunto que sí o sí va a estar en la pelea por el ascenso", concluyó.
David Reyes
Exarquero de Wanderers
En cancha sintética
El plantel de Santiago Wanderers hará fútbol hoy en el estadio Municipal de Concón. Los verdes practicarán sobre el césped sintético, buscando acomodarse a las mismas condiciones con que el jueves se encontrarán en el estadio Municipal de La Florida, cuando desde las 20 horas enfrenten a Audax Italiano por la segunda fecha del torneo de Clausura. Para el duelo ante los de colonia se espera que el Decano ya cuente con Marco Sebastián Pol y Agustín Parra, quienes quedaron marginados del triunfal debut ante Huachipato.