Un desesperado llamado de atención sobre la grave situación en que se encontraba debido a su adicción a las drogas hizo el actor Philip Seymour Hoffman, nada menos que a su dealer. Así al menos lo aseguró ayer una versión publicada por el sitio norteamericano TMZ, especializado en informaciones de espectáculos.
La página atribuyó la información a un "informante que ha estado trabajando con policías de Nueva York" tras el deceso del actor el pasado domingo, quien aseguró haber accedido a conversaciones entre Seymour Hoffman y un hombre identificado como Robert Vineberg. Este último es una de las cuatro personas que ayer fueron detenidas en la ciudad estadounidense en el marco de la investigación por el deceso del actor, quien murió producto de una presunta sobredosis de heroína.
De acuerdo con la versión de ese informante, Vineberg le vendía heroina a Hoffman. Según TMZ, en un mensaje de texto al dealer el actor le dijo que estaba luchando por dejar su adicción y que no quería otra cosa que limpiar su vida.
El sitio web especializado aseguró que la ayuda de este informante fue clave para que la policía llevara a cabo las detenciones. Incluso, según esta persona, el actor se lamentó de que la peor parte de estar "limpio" fueran los problemas intestinales asociados a dejar la droga.
Además, en el portal TMZ, aseguró que había visto a Hoffman en el departamento de Vineberg: según su relato, el actor se veía como "un hombre en una misión" y dijo que no pudo apreciar un diálogo social con el dealer, sino "sólo negocios", al tiempo que recalcó que el actor se veía "infeliz".
Las detenciones
La policía de Nueva York detuvo ayer a cuatro personas sospechosas de haber vendido a Seymour Hoffman la heroína que le causó la muerte el pasado fin de semana, según indicaron fuentes policiales citadas por los medios estadounidenses.
Los policías encontraron 350 papelillos de esta droga en tres departamentos de un edificio del Bajo Manhattan, donde tuvieron lugar las detenciones, según las fuentes.
Los cuatro sospechosos, tres hombres y una mujer, eran interrogados ayer sobre la muerte del actor en las dependencias policiales.
Según medios estadounidenses, los sospechosos podrían haberle vendido la droga a Hoffman horas antes de su fallecimiento. No obstante, un portavoz policial no confirmó el dato: "Aún tenemos que investigar esa vinculación", señaló.
Hoffman murió de una supuesta sobredosis de heroína en su departamento del West Village, a casi un kilómetro y medio del edificio donde la Policía detuvo ayer a las cuatro personas que presuntamente le vendieron la droga.
Junto al cuerpo del intérprete, de 46 años, se encontraron 50 papelillos de heroína marcados con la leyenda "As de espadas" y con el símbolo del as de corazones, que se utiliza para indicar el origen de la droga.
Según fuentes policiales citadas por el diario "New York Times", estos mensajes no coinciden con los de los papelillos de heroína encontrados en los departamentos de los presuntos traficantes.
El mismo diario señaló que sobres de heroína como los hallados en la vivienda de Hoffman pueden comprarse en la calle por unos seis dólares (poco más de $ 3.300). En los últimos cuatro años, las incautaciones de heroína en el estado de Nueva York se incrementaron un 67 por ciento, agregó el diario, citando datos de la agencia antidrogas DEA.
Poco antes de las detenciones, la policía descartó que la heroína que le causó la muerte al actor estuviera adulterada con Fentanyl, como se barajaba, un fármaco derivado del opio que se usa para la anestesia general.
La combinación de estas dos sustancias es letal y provocó la muerte de al menos 22 personas en la región occidental de Pensilvania a finales de enero.
Aunque las autoridades confirmaron que la autopsia del actor concluyó el lunes, todavía no ha trascendido el informe oficial sobre la causa de su muerte.
Una droga que está de vuelta
El número de muertes registradas en EE.UU. por sobredosis de heroína prácticamente se duplicó de 1.842, en el 2000, a 3.036 en el 2010, según las estadísticas más recientes de los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades. Las muertes por heroína todavía representan un porcentaje relativamente reducido del total de muertes por sobredosis: menos de 10% en 2010, según cifras oficiales.