La noticia no tomó por sorpresa a David Pizarro. El jueves la ANFP hizo pública la nómina de jugadores que Jorge Sampaoli utilizaría en el partido contra Alemania, pactado para el 5 de marzo en Stuttgart, y el porteño ya sabía que no estaba en la lista de 19 nombres elegidos por el técnico.

Ese día jueves el playanchino jugó quince minutos en la victoria 3-1 de Fiorentina ante el Esbjerg en Dinamarca, por la Europa League. Viajó con el plantel viola de regreso a Italia y ayer se enteró de las especulaciones que surgían en nuestro país sobre su situación. Distintos medios afirmaron que había renunciado a ser convocado nuevamente a la Selección Nacional, tal como en 2005.

La respuesta del mediocampista es tajante: "No he renunciado".

Según explica Pizarro desde Florencia, "no me llamaron y punto, la verdad es que no estoy en condiciones de volver y renunciar a la Selección cuando me dé la gana".

Enfatizando cada palabra, el jugador formado en Santiago Wanderers dice que "yo no soy así, me comprometí con este proceso y voy a cumplir con ese compromiso".

Tan tajante como cuando asegura que sigue a disposición de Jorge Sampaoli, el futbolista deja en claro que no tiene temas pendientes con el entrenador y sabe que la decisión de utilizarlo en la Roja es sólo del casildense.

"No tengo dudas respecto a las atribuciones del entrenador, es Sampaoli quien debe definir si quiere contar conmigo o no, espero ser lo suficientemente claro", asegura el porteño.

Ocho años

de ausencia

Después de ocho años fuera de la Roja por decisión propia, David Pizarro retornó a la Selección Nacional con Jorge Sampaoli en la banca. En mayo del año pasado el porteño fue convocado para los duelos de eliminatorias contra Paraguay y Bolivia, siendo titular frente a los altiplánicos en la victoria de la Roja por 3-1 en el estadio Nacional. Días después, el "Fantasista" confesó en estas páginas que había regresado porque "se volvieron a prender en mí esas ganas de jugar un Mundial".

David Pizarro

Volante de Fiorentina

Santiago Wanderers regresa oficialmente mañana a Playa Ancha. Tras meses siendo locales sobre el césped sintético de Quillota, los dirigidos por Ivo Basay recibirán a Unión La Calera en el nuevo estadio "Elías Figueroa Brander", un reducto que los verdes pretenden se convierta en una verdadera fortaleza y pilar fundamental para recuperar el protagonismo en la Primera División.

El recién inaugurado coloso de subida Carvallo es un recinto en el que definitivamente la presión de los hinchas se hará sentir con fuerza debido a la cercanía de sus tribunas con la cancha, condición que los jugadores deberán saber asimilar para que se convierta en un factor a favor y no en una situación perjudicial.

Para Ivo Basay lo más importante es "volver a casa". "Playa Ancha siempre ha sido un reducto complicadísimo para los visitantes y así tenemos que seguir haciéndolo sentir", sostuvo el entrenador del Decano, quien asume que el duelo ante los cementeros vuelve a ser clave para intentar recuperar el terreno perdido en el Clausura.

"Hay que ganar. Un triunfo nos permitirá mantenernos en una ubicación tranquila, pero sabemos que una derrota nos hará pasar un muy mal rato", explicó el "Hueso".

El estratega reconoce que el compromiso de mañana en el Puerto enfrentará a dos cuadros irregulares, y por ello no se confía. "Nosotros debemos saber solucionar todos los detalles que nos están costando puntos importantes", agregó, confiando en que el apoyo de los hinchas será un factor a favor de sus dirigidos: "No hay nada mejor que el fervor de la gente".

GANAR O GANAR

Para Ezequiel Luna el partido ante Unión La Calera "hay que ganarlo sí o sí". "Es un encuentro difícil, pero nosotros sabemos que Playa Ancha es nuestra casa y debemos hacerlo sentir de inmediato", sostuvo el zaguero argentino, siendo rápidamente respaldado por Juan Abarca, quien ante el Internacional de Porto Alegre volvió a la actividad competitiva tras una operación en su hombro: "Llegó el momento que todos esperábamos. Queríamos estar con nuestra gente y en la cancha que más nos acomoda".

"El apoyo de la gente siempre lo hemos sentido, pero para nosotros era importante retornar a Valparaíso, por la cancha y por la misma presión que mete la afición", añade el trasandino, mientras el exUniversidad de Chile y Cobreloa se ilusiona con recuperar la titularidad tras los meses alejado de la actividad.

"Ante Inter tuve la oportunidad de jugar los 90 minutos y más allá del cansancio normal me sentí muy bien. Quiero seguir sumando tiempo en cancha para volver a ser una alternativa válida para el cuerpo técnico", agregó Abarca, calificando a los cementeros como un equipo "complicado".

"Son un conjunto que ha sido irregular, al igual que nosotros. Que necesita de los puntos para sacarse de encima el fantasma del descenso… espero que tengamos una buena jornada", sentencia el zaguero verde.

Juan Abarca

Zaguero de Santiago Wanderers

Galerías a tres mil pesos

Durante todo el día de hoy en la sede de calle Independencia se venderán las entradas para el partido de mañana entre Santiago Wanderers y Unión La Calera en el estadio "Elías Figueroa Brander". Los valores de los boletos para el debut oficial de los verdes en su nueva casa son los siguientes: Galerías $3.000, Andes $6.500, Pacífico $11.000, Butaca Preferencial $22.000 y Tribuna Visita $5.000. Además, desde la dirigencia porteña se recordó que los hinchas que asistieron a los dos primeros partidos de local del campeonato, ante Huachipato y Palestino en Quillota, y que conservaron sus tickets, tendrán un descuento de $2.000 para este compromiso ante los cementeros (este beneficio no es otorgable mañana en las boleterías del estadio).