"Si pagara 800 millones deberían devolverme el estadio Playa Ancha y el velódromo. Es la línea que pienso seguir"
"Chile avanza con todos en Valparaíso". Así se denomina un documento oficial, emitido por el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera, donde se da cuenta -entre otros aspectos- de lo que sería la profunda transformación a la que someterían los estadios Sausalito de Viña del Mar y Municipal de Valparaíso. Y es ese texto una suerte de "Biblia" con la cual el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, descarga toda su indignación hacia las autoridades del Gobierno Central.
¿Los motivos? Como explica, pese a que inicialmente se trataba de proyectos de mejoramiento similares que partieron con unos pocos meses de diferencia, el hoy estadio "Elías Figueroa", inexplicablemente, se construyó con 23 mil 64 butacas y no las 25 mil prometidas, como aparece en el documento y como sí lo tendrá Sausalito. A ello se suma, como acota, que Viña del Mar consiguió mil 600 millones de pesos adicionales a las partidas iniciales, de parte del Ministerio del Deporte, para derrumbar la galería Laguna que quedó en malas condiciones tras el terremoto de febrero de 2010 y que, en un primer momento, iba a ser reparada y no construida nuevamente.
Por ello, para "equiparar" las cosas, el alcalde de la ciudad que acaba de recibir eventos deportivos masivos como el Rally Dakar, Valparaíso Cerro Abajo o el Red Bull Flugtag, plantea una "fórmula". Esta considera que el municipio pague 800 millones de pesos, a fin de que el estadio, el velódromo -hoy "Polideportivo Renato Raggio"- y el Parque Alejo Barrios, todos bajo administración del Instituto Nacional de Deportes (IND), vuelvan a propiedad del municipio, ya que la casa consistorial debió vendérselos al Estado por 2 mil 400 millones de pesos. Los mil 600 millones restantes equivalen a lo que el Estado le entregó a Viña del Mar.
-¿Qué aparece en el documento, además de entregar el detalle de los dos proyectos para Viña del Mar y Valparaíso?
- Sale todo lo que tiene directa relación, primero, con una situación pedida por este alcalde. Para mí la inauguración (ocurrida el pasado miércoles 19) no era sólo del polideportivo Renato Raggio (anteriormente el velódromo Roberto Parra), del estadio Elías Figueroa o del cierre perimetral de las canchas Alejo Barrios. Lo que teníamos es el hecho de poder decir que toda esta infraestructura fue vendida por el municipio de Valparaíso al Estado de Chile por 2 mil 400 millones de pesos, según tasación fiscal, para dar cuenta del déficit de miles de millones de pesos que venía trayendo la Corporación Municipal para el Desarrollo Social, o sea, educación y salud.
- ¿Y qué debería haber hecho el Gobierno?
- Conjuntamente con la infraestructura, debería haber habido un plan para procurar una negociación que nos permitiera, a nosotros como municipio, recuperar esos bienes.
estadios similares
-La idea inicial era que Viña del Mar y Valparaíso tuvieran estadios similares, ambos de estandar FIFA.
- Ambos estadios tenían la misma postura de dineros de la parte regional... y tenían estándares similares, vale decir, 25 mil personas, museos, vip, butacas, césped, iluminación, pantalla led, todo eso era similar para ambos estadios. Entonces, ¿de donde viene la base del alcalde de Valparaíso para decir lo que está diciendo? A poco andar, lo primero que aparece es que la galería Laguna estaba no de acuerdo a lo que decía el informe (técnico) sino que estaba en malas condiciones y había que sacarla, lo que hacía subir el presupuesto, Y aparece toda una contienda entre la Municipalidad de Viña y el IND: mientras el IND decía que esto era de responsabilidad del presupuesto municipal, el municipio indicaba que había habido un compromiso del ministro del Deporte en términos de poner estos recursos, los que, de acuerdo a la polémica que se armó, eran de alrededor de mil 600 millones de pesos. Hoy nadie del gobierno, ni el propio ministro, han dado una señal clara, y según se entiende, esos dineros van a ser puestos por el Ministerio del Deporte y no van a salir del presupuesto de Viña del Mar. De hecho, el propio ministro, al callar, otorgó que, efectivamente, va a haber una asignación más de fondos para poder hacer el Sausalito en estas nuevas condiciones.
-¿Ese mismo atraso le permite a Viña mejorar su estadio, teniendo como base lo que ocurrió en Valparaíso?
- Nosotros acabamos de inaugurar un estadio que no cuenta con 25 mil localidades y se mandó a hacer un estadio para 25 mil personas. No es menor y nadie explica cuál fue la razón. Esa es una decisión que toma el IND o el Ministerio del Deporte, sin siquiera informar una situación de esta naturaleza.
-¿Por qué es tan importante esa diferencia?
- Por el famoso tema del aforo, que a mi entender, ni el Gobierno, ni el propio Ministerio del Deporte, pudieron dar respuesta a esta situación, porque tenemos hoy el Plan Estadio Seguro y la potestad de los gobernador provinciales de poder limitar la capacidad del recinto en los partidos de más alta convocatoria en menos de la mitad de la capacidad... Acá ocurre una incongruencia que es monstruosa: mandamos a hacer estadios en que en ninguna de las convocatorias del campeonato nacional van a tener aposentadurías completas. Se mandaron a hacer estadios FIFA y ocurre esta incongruencia en que no se avanzó en que lo que hay que hacer es eliminar el tema de los aforos.
-¿Entonces, sigue con la idea de recuperar el estadio?
- Sigo con la idea de recuperarlo al mismo valor que vendimos porque el Presidente no le dijo lo mismo a Antofagasta, Calama, Quillota o Viña del Mar. Después de todo lo que puso el gobierno en el programa "Chile Estadios", nunca fue después el Presidente a decirles "ahora su estadio si costaba en tasación fiscal 4 mil millones, hoy queda en tasación comercial de 12 mil millones y ustedes tienen que devolverme todo lo que pusimos en cómodas cuotas mensuales". Nunca se dijo eso, por lo tanto, porque yo debo tener un trato distinto. Lo único que estoy diciendo es que si pasado el proceso concluimos que dos que partieron iguales, uno ya está listo con 23 mil butacas y el otro puede corregirlo -porque va a ser de 25 mil-, y además logra recursos del propio Gobierno, entonces mi lógica es que estoy a menos plata de hacerme de los recintos que nosotros perdimos.
-¿Qué significa eso?
- En una simple lógica podría decir que estoy más cerca de poder hacerme de los bienes, debo estar a 800 millones de pesos. O sea, si pagara 800 millones de pesos, deberían devolverme los bienes. Y es la línea que yo pienso seguir.... Yo esperaba del Gobierno una actitud de inauguración no solamente respecto a cortar la cinta, sino a decir "mire, ha llegado el momento en que Valparaíso pueda recuperar sus bienes..." Yo quería un gesto distinto. ¿Qué tiene que ver en la administración del estadio el director del IND? Hoy, poco menos que para ocupar la piscina temperada del polideportivo Renato Raggio, tenemos que ir a La Moneda.
-Este Gobierno ya llega a su fin. ¿Pretende lograr mejores resultados con las nuevas autoridades?
- Con este Gobierno no hubo nada especial hacia Valparaíso, como sí fue con los gobiernos de la Concertación. Yo no quería que me hiciera un regalo, sino que me hubieran hecho firmar las cuotas por los 800 millones, como le gusta al Presidente... (Pero) yo voy a luchar por la recuperación de los bienes de la ciudad de Valparaíso y no voy a descansar hasta recuperarlos... Esto va a ser materia que lo vamos a hablar con el nuevo intendente y también la nueva ministra del Deporte, ya que esta comuna, desde el traspaso del sistema de educación a la ciudad, que si bien es cierto es una buena inversión, ya van 37 mil millones de pesos que hemos puesto para una responsabilidad que es del Estado. Y seguimos poniendo dinero".