Rector insiste en exculpar a la PUCV del incendio en la iglesia San Francisco
causas. Esto, pese a que peritajes confirmaron que el fuego partió tras una peña en su sede de Barón.
El rector de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), Claudio Elórtegui, desestimó las conclusiones emanadas de los peritajes de Bomberos y Carabineros que determinaron que el último incendio que destruyó la iglesia San Francisco del cerro Barón se originó por una parrilla mal apagada tras una peña realizada en el vecino edificio del instituto de Matemática de la misma casa de estudios. "La universidad declara disponer de otros antecedentes que llevarían a conclusiones diferentes respecto a lo planteado en dicho informe", aseguró el rector.
De esta forma, Elórtegui mantuvo la posición del plantel que ha negado responsabilidad de los estudiantes en el origen del fuego.
Según la autoridad, la postura se basa en que existiría una investigación paralela en la Fiscalía, que no ha considerado la solicitud de otras diligencias que, a su juicio, comprobarían una tesis diferente, aunque declinó entregar detalles en los que basarían la hipótesis. Sin embargo, esta versión fue desmentida por el Ministerio Público, donde confirmaron que la única indagatoria existente es la que lleva adelante el fiscal Ulises Meneses.
acumulación de causas
En horas de la tarde, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso solicitó la acumulación de la causa que ellos habían iniciado con la presentación de la querella -caratulada con el RUC 13100 24361-4 por parte de la Fiscalía y el RIT 6538- 2013-, en el tribunal de Garantía.
Así, mientras el persecutor pretende determinar lo antes posible las eventuales responsabilidades de estudiantes y autoridades que autorizaron el evento -según señaló a El Mercurio-, el abogado de la PUCV, Hugo Muñoz, insistió en que todavía no está todo dicho sobre el origen y causa del incendio.
"(Estamos pidiendo) peritajes para que se determine cuáles fueron las causas del incendio. Como ha señalado el señor rector, nosotros tenemos una versión distinta y diferente de los hechos como han ocurrido y estamos pidiendo la mayor cantidad de diligencias para que, en definitiva, impere la versión de los hechos que corresponde a nuestro concepto", señaló Muñoz.
Dichas diligencias corresponden a la realización de nuevos peritajes y se tome declaraciones a otros testigos.
LA PARRILLA DE LA PEÑA
Según la información publicada por El Mercurio, los peritajes realizados por el Laboratorio de Criminalística Carabineros (Labocar), en conjunto con Bomberos, determinaron que el sobrecalentamiento de una parrilla utilizada para asar alimentos durante una peña en dependencias del centro de alumnos del instituto de Matemática provocó el incendio. El fiscal Meneses relató que en el lugar había papeles y ropa, y que tras la caída de material incandescente, se produjo la propagación.
"La sala cerrada actuó con un efecto chimenea y se quemó por dentro hasta que no dio abasto, y explotó. El fuego tomó la iglesia también", dijo al citado periódico.
Los mismos peritajes descartaron la presencia de líquidos combustibles que hayan servido de acelerantes, así como también la posibilidad de un cortocircuito derivada de una falla eléctrica.
APOYO A LOS ESTUDIANTES
Consultado respecto a la entrega de defensa jurídica a los estudiantes que podrían ser perseguidos por la Fiscalía, el rector Elórtegui, evitando especular, dijo que "la universidad siempre se preocupa de sus estudiantes, en las distintas dimensiones, pero son materias que habrá que ir evaluando. (...) Hasta ahora no hay hechos que ameriten sanciones".
Por otra parte, aunque los terrenos en los que se ubica la sede de la PUCV en Barón fueron cedidos por la orden franciscana que reside en la iglesia, la autoridad universitaria no mostró intención en que el plantel cubra los gastos originados por las pérdidas del incendio.
"La reparación de la iglesia significa un costo altísimo que excede totalmente las posibilidades de la universidad", dijo Elórtegui.
REACCIONES
Aunque los más afectados en la universidad fueron los alumnos de Matemática, ellos mismos se han encargado de aclarar que la peña de ese fatídico 2 de agosto de 2013, fue realizada por estudiantes de Historia que consiguieron autorización de las autoridades del plantel.
Nicolás Álamos es alumno de Matemática y desde entonces ha debido asistir a clases en otros edificios que la universidad tiene en la ciudad.
"La peña fue organizada por otra facultad, por Historia (...). Yo creo que haber prestado el instituto para otras carreras, me parece más o menos feo, porque nosotros siempre hemos hecho peñas como instituto de Matemáticas y nunca hemos tenido algún problema. A lo mejor no fue intencional, pero igual fue provocado", señaló.
Más cauto respondió el presidente de la federación de estudiantes de la misma carrera, Miguel Hernández.
HECHO FORTUITO
"El incendio fue un hecho fortuito que afectó a todos. Nosotros no tenemos clases en el instituto hace mucho tiempo. No voy a ser yo quien va a culpar a compañeros de otras carreras. Entendemos que no fueron ellos los que quisieron provocar el incendio", señaló.
Por su parte los vecinos del tradicional barrio en que se emplaza la iglesia, lamentaron la reparación al templo, que estaba en su etapa final, no haya logrado concretarse.
Adelaida Rojas, dijo que "me parece malo, porque fue un daño tan grande. Ya estaba casi lista la iglesia y volver de nuevo a que se volviera a quemar es una pena, porque esta iglesia es muy antigua".
En tanto, Catalina Menares, agregó que, "mi marido fue en bata y entró a la universidad. El incendio estaba partiendo por la universidad y no por la iglesia. (...) Lo ideal sería que la (universidad) Católica pagara todo eso. Obvio, si ellos lo empezaron. ¡Cómo tanto, si ya estaba todo listo!"
"La peña fue organizada por otra facultad, por Historia. (...) A lo mejor no fue intencional, pero igual fue provocado"
Nicolás Álamos
Estudiante de Matemática PUCV
"Lo ideal sería que la (universidad) Católica pagara todo eso. Obvio, si ellos lo empezaron"
Catalina Menares
Vecina de la iglesia
"La universidad (...) mantiene su posición referente a que no tiene responsabilidad en estos hechos"
Claudio Elórtegui
Rector de la PUCV