Wanderers gana en una noche llena de emociones y vuelve a ilusionarse
fútbol. El Decano venció por 2-0 a Cobresal, reunió más de 58 millones de pesos para los damnificados, se entusiasma con la liguilla y despide a Moisés Villarroel, su gran capitán.
La jornada estaba cargada de emociones. Era el primer partido de Santiago Wanderers tras la tragedia en los cerros de Valparaíso, también el momento de despedir en Playa Ancha a uno de los grandes referentes en la historia del Decano: Moisés Villarroel defendía a los verdes por última vez de manera oficial ante su gente. Y para concluir, los caturros tenían la oportunidad ante Cobresal de asegurar su permanencia en Primera División y volver a entusiasmarse con la posibilidad de meterse en la liguilla que entrega pasajes para la próxima Copa Sudamericana.
Y se cumplió. No fue una tarea fácil, especialmente por la irregularidad de los dirigidos por Héctor Robles, pero tras noventa minutos lo que queda es el apoyo de los porteños a quienes tanto sufrieron en la última semana, mientras que dentro de la cancha, el triunfo por 2-0 conseguido en los diez minutos finales del compromiso sirve para descomprimir un ambiente lleno de nerviosismo y ansiedad.
Quizás lo único que dejó gusto a poco fue que Villarroel no ingresara para ser parte del encuentro, situación que más tarde el propio oriundo de Forestal se encargaría de minimizar, respaldando las determinaciones del cuerpo técnico teniendo en cuenta la relevancia del compromiso.
Para las estadísticas, decir que los verdes sumaron 18 puntos en el Clausura y que de vencer el sábado a Deportes Antofagasta deberá esperar que dos de sus tres rivales directos (Cobreloa, Unión La Calera o Audax) no sumen de a tres para meterse en la liguilla.
ENCUENTRO DIFÍCIL
Durante 80 minutos lo vivido anoche en Playa Ancha fue una buena radiografía de los problemas futbolísticos evidenciados por Santiago Wanderers durante este torneo. El fútbol colectivo sigue siendo el gran ausente entre los dirigidos por Héctor Robles, apostando solo a la entrega física en el medioterreno y alguna jugada personal de Sebastian Pol y Gastón Cellerino para llegar a la portería rival.
Nota aparte para Gabriel Castellón. El golero porteño volvió a ser prenda de garantía en el Decano.
Los goles llegaron por intermedio de jugadores de la cantera: Sebastián Méndez a los 82 minutos; y a los 87" el joven Roberto Saldías, quien aprovechó una mala salida del guardavallas nortino.
Más allá de la nueva oportunidad que tiene el Decano de meterse en la liguilla, no puede esconder los enormes problemas que tiene el equipo para cerrar encuentros que si bien parecen favorables en un abrir y cerrar de ojos, se complican por errores colectivos.
El orgullo de Moisés Villarroel
No pudo jugar en lo que fue muy probablemente su último partido oficial en Playa Ancha. Sin embargo, el rostro de Moisés Villarroel denotaba una enorme tranquilidad. Sin mayor espacio para la emoción, el volante caturro arrancó señalando que "mi gran orgullo es haber vestido la camiseta de Santiago Wanderers", reconociendo también que por estas horas son muchos los recuerdos relacionados con Playa Ancha y el Decano. Desde su primer entrenamiento en el Alejo Barrios, pasando por sus tiempos de pasapelotas, el largo camino por el túnel hacia la cancha y los primeros partidos encuentros como profesional. "Solo tengo palabras de agradecimiento para todos en la institución", insistió, adelantando que "seguiré ligado al club... ya veremos cómo, pero ahí estaré".
58 millones para la reconstrucción
Fueron 11.304 los hinchas que llegaron anoche hasta Playa Ancha, obteniéndose una recaudación de 19 millones 513 mil pesos. Tal como se había anticipado, la sociedad anónima que administra a Santiago Wanderers entregará dicha cantidad a las autoridades regionales para apoyar a los damnificados por los incendios que afectaron a Valparaíso. Un dinero que será replicado por la empresa TPS y por David Pizarro a manera personal desde Italia, con lo que el monto definitivo que irá en favor de la reconstrucción de los afectados en el Puerto será de 58 millones 539 mil pesos. Cobra así sentido la canción que entonaron anoche Los Panzers: "Puerto, Puerto querido, todos juntos te vamos a levantar".