274 muertos deja el peor accidente minero desde 1975
Turquía. La tragedia causó protestas en varias ciudades, mientras las autoridades perdían las esperanzas de hallar más sobrevivientes.
EFE/Tolga Bozoglu
Al menos 274 personas murieron por el accidente registrado en una mina de carbón en el oeste de Turquía, que se convirtió en la peor catástrofe de este tipo en el país y la más grave del mundo desde 1975, mientras miles salieron a las calles y pidieron la renuncia del Gobierno.
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, que visitó el lugar de la catástrofe, dijo que unos 120 mineros seguían desaparecidos y que 80 resultaron heridos en el incendio desatado en la mina de carbón. Según a agencia Anadolu, más de 350 personas fueron rescatadas tras la explosión registrada en el lugar.
El primer ministro turco suspendió un viaje al extranjero y visitó la mina de Soma, en la provincia de Manisa, donde amigos y familiares desesperados se reunieron en espera de noticias de sus seres queridos.
Erdogan aseguró que los accidentes son 'normales', pero recalcó que la dimensión de este accidente 'conmovió profundamente' a todos. Prometió que se darán 'todos los pasos necesarios' para investigar las causas de la tragedia. El ministro de Energía, Taner Yildiz, había cifrado en 787 los trabajadores que se encontraban en la mina en el momento del accidente. Yildiz dijo que hay cada vez menos esperanzas de encontrar a sobrevivientes. 'Es peor de lo que se creía en un principio', manifestó.
La última cifra de muertos superó a la registrada en el accidente minero de 1992, cuando perdieron la vida 263 personas, y que era considerado hasta ahora el más grave de la historia del país. El accidente se habría provocado por una falla eléctrica, que habría generado a su vez una explosión y un incendio, según aseguraron medios locales.
Los equipos de rescate continuaron ayer bombeando oxígeno a la mina, pero los esfuerzos se ven dificultados por la localización del incidente. Los mineros se encontraban a dos kilómetros bajo tierra y a cuatro de una salida cuando se produjo la explosión.
El suceso desató protestas en varias ciudades del país. En Estambul, miles de personas se manifestaron contra el Gobierno de Erdogan y demandaron su renuncia. 'Ningún accidente - asesinato', decían algunos de los carteles que portaban los manifestantes.