Pese a que en el país se ha registrado una ostensible baja en las exportaciones de productos hortofrutícolas, fundamentalmente de frutales, en la Quinta Región, contra todos los pronósticos, los envíos experimentaron cifras positivas, con un 4,4 por ciento respecto de la temporada anterior, rompiendo la tendencia nacional a la baja, con un 11,4 por ciento menos, de acuerdo al balance de la temporada 2013-2014, entregado por la Asociación de Exportadores de Frutas (Asoex).
La Quinta Región, que es la tercera productora de frutales de exportación a nivel del país, luego de las regiones Sexta y Séptima, exhibió un buen comportamiento, pese a los razonables temores originados en la prolongada sequía que impacta los sectores productivos. La obtención de estas cifras positivas habla bien de las medidas adoptadas, tanto gubernamentales como del ámbito privado, para afrontar la escasez hídrica, que ya se extiende por cuatro años consecutivos en nuestra zona. En todo caso, los registros positivos no deben ocasionar descuidos en los esfuerzos que se están cumpliendo para la construcción de nuevos embalses y obras de regadío en la región de Valparaíso, que son fundamentales e imprescindibles, tanto para el adecuado suministro de agua, como para incorporar nuevas hectáreas a la producción, que hasta hoy se mantienen estériles.
Nuestras cifras positivas se deben también, en un importante porcentaje, a las exportaciones de palta, que tras la uva de mesa, es el principal producto de la zona, con un total de 84.000 toneladas exportadas, cifra que representa el 62,45 por ciento de los envíos totales el país en este segmento.
La baja de las exportaciones registrada a nivel nacional se debe principalmente a problemas climáticos, como las heladas, y a las consecuencias de los paros portuarios en el terminal de San Antonio. En relación con estos últimos, motivados por mejoras salariales y de condiciones laborales y seguridad, cabe considerar que las temporada de exportaciones de productos hortofrutícolas son muy dinámicas y con tiempos estrechamente acotados, por lo que cualquier demoran en los puertos de salida, obliga a los consignatarios a buscar inmediatamente otros proveedores, con lo que se pierden cargas y mercados.