"Que por ley no se permita lucrar, para algunos se volvió un grave problema"
Con tan solo 31 años de edad, Javiera Serrano debió asumir una de las seremis regionales más complicadas: la de Educación, donde últimamente, y a raíz de la implementación de la reforma educacional, ha debido enfrentar polémicas y descargos desde diversos sectores ligados a esta reestructuración en materia educacional.
"Actualmente se está haciendo un trabajo con los sostenedores de colegios particulares subvencionados con y sin fines de lucro, donde nosotros como Ministerio hemos tenido reuniones específicas con ellos para ir desmitificando la reforma y para acompañarlos en este proceso", declaró la profesora de Lenguaje de la Universidad Católica de Valparaíso (PUCV).
- En los últimos meses, variadas han sido las polémicas que se han levantado en torno a la reforma educacional, ¿considera que han afectado al desarrollo de esta?
- Obviamente en una sociedad cualquier tipo de cambio de esta envergadura va a provocar inquietud, ansiedad e incertidumbre, es natural y en ese sentido el Ministerio de Educación, desde marzo a la fecha, ha desarrollado varias instancias de participación a nivel nacional. Es más, en la región hemos realizado veinticinco diálogos ciudadanos, donde se ha comunicado en qué consiste la reforma, porque se ha generado mucho mito en torno a ella, y en definitiva lo que busca es resguardar la inversión que hace el Estado en los establecimientos educacionales, cambiar la institucionalidad desde el nivel preescolar y ampliar la cobertura del servicio para las familias, entre otros puntos.
- ¿Cree que el Ministerio de Educación ha quedado más vulnerable con estas polémicas?
- Desgraciadamente la reforma educacional no es algo en que todos los chilenos estemos de acuerdo, porque una reforma que busca garantizar el acceso y la calidad de la educación para todos los niños y jóvenes, donde el Estado se haga cargo de poder financiar las escuelas sin que las familias deban aportar un monto, y donde además se resguarde que los fondos efectivamente sean invertidos en la educación y que quien se instale con un colegio, por ley, no se le permita lucrar, para un grupo de personas se volvió un grave problema.
"Lamentamos el pánico"
- Uno de los principales miedos de los apoderados y alumnos del país es el cierre de colegios que arrastraría la reforma, ¿cuál es la realidad en torno a este punto?
- Lamentamos profundamente el pánico que se ha dado a la ciudadanía en torno a cerrar establecimientos educacionales, porque el Ministerio nunca ha pensado en cerrar ningún colegio; muy por el contrario, queremos seguir trabajando de manera coordinada con los sostenedores de colegios particulares subvencionados y con los municipios con el fin de lograr un diseño de trabajo que en los próximos años pueda permitir iniciar un proceso de desmunicipalización, pero por ahora nuestro principal foco y preocupación es poder seguir fortaleciendo los establecimientos con una mayor inversión.