El gerente general de la Junta de Vigilancia de la tercera sección del río Aconcagua, Santiago Matta, calificó de dramática la situación que está viviendo la actividad agrícola de la zona debido a una baja estimada en 65% de los deshielos cordilleranos respecto de un año normal. Los escurrimientos no han alcanzado para irrigar los campos de las provincias de Quillota y Petorca que dependen del caudal del Aconcagua.

De hecho, el ejecutivo sostuvo que el recurso hídrico que proviene de la Cordillera de Los Andes ni siquiera alcanza a llegar a la segunda sección en la provincia de San Felipe.

Matta dijo que existen altas expectativas de paliar en parte la escasez una vez que hoy la Dirección General de Agua ponga en funcionamiento la batería de pozos profundos, tal como se comprometió semanas atrás. Con ello, debería entrar en vigencia el acuerdo entre las cuatro secciones de usuarios del Aconcagua para una repartición del recurso.

"El problema ha evolucionado mal. De los deshielos a nosotros no nos ha llegado nada. La semana pasada nosotros cuantificamos unos 600 litros por segundo, cosa que debería tener al menos 20 mil, por lo tanto la situación va a ser dramática", sostuvo el gerente de la 3ª sección.

De acuerdo al último informe de la Dirección General de Aguas, el embalse Los Aromos de Limache, con capacidad máxima de almacenamiento de 35 millones de metros cúbicos y con un acopio promedio histórico de 31 millones, a penas almacena al día de hoy 17 millones, es decir menos de la mitad de su capacidad. La situación se agrava aún más si se le compara con el año pasado, que fue igualmente malo para la actividad y donde había 2 millones más que a la fecha.

Matta recordó que el Gobierno se comprometió a tener los pozos funcionando desde hoy. "El seremi nos dijo que esta semana comenzarían a operar los de Panquehue, y si eso pasara nosotros podríamos tener ya este fin de semana el acuerdo funcionando".

Una leve mejoría presentó ayer la joven Macarena Verdejo, estudiante de Ingeniería en Prevención de Riesgos en la Universidad Técnica Federico Santa María y que a raíz de una complicación por hepatitis autoinmune debió ser trasladada desde el hospital Gustavo Fricke hasta el hospital Clínico de la Universidad Católica, en Santiago, donde se transformó en prioridad nacional para un trasplante de hígado.

Su madre, Marcela Contreras, detalló que Macarena "continúa grave y su estado sigue siendo crítico, pero por lo menos está un poquito más estable, está más despierta por lo que me han informado los médicos, pero de todas maneras sigue siendo prioridad uno a nivel nacional para el trasplante de hígado".

"Está consciente"

El facultativo puntualizó que la paciente "tiene una enfermedad crónica llamada Hepatitis autoinmune, una enfermedad que la paciente tiene hace más de 10 años. Actualmente tiene una insuficiencia hepática muy avanzada, y está experimentando una reactivación de su cuadro de base que la ha descompensado".

razones del traslado

Macarena, de 20 años y oriunda de Villa Alemana, fue internada de urgencia hace tres semanas en el hospital Gustavo Fricke, de Viña del Mar, donde estaba siendo tratada por su hepatitis autoinmune, que se agravó y cuyas complicaciones obligaron a trasladarla hasta el hospital Clínico de la Universidad Católica.

Al respecto, el subdirector médico hospital Gustavo Fricke, Diego Tobar Valdivia, expuso que la estudiante "estaba en controles desde hace un tiempo con el hepatólogo del hospital y a raíz de su cuadro en curso ingresó a la Unidad de Paciente Crítico (UPC) intermedio".

Una vez allí, agregó Tobar, "se definió entre el equipo tratante de la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Fricke, junto con su hepatólogo tratante, la necesidad de trasladar esta paciente a Santiago. Dado que los criterios clínicos que tenía ella hacían necesario la indicación de un trasplante hepático, se activó la red en estos casos, se coordinó con la red el traslado y en Santiago se definió como centro para esta prestación el hospital Clínico de la Universidad Católica, lugar donde fue trasladada".

pérdida de conciencia

El subdirector médico del hospital viñamarino explicó además que debido a "los antecedentes clínicos que ella tiene y esta enfermedad con afección al hígado, la condición de ella es de cuidado".

Agregó que "claramente la indicación de trasplante es una necesidad que tiene la paciente, razón por la cual se trasladó a Santiago por lo mismo que ella ingresó a la UPC del hospital Fricke. Acá estuvo estable, con compromiso de conciencia, que fue el motivo de consulta, y cursando con esta falla hepática".

En el hospital Clínico de la Universidad Católica se certificó que Macarena Verdejo, además de la hepatitis autoinmune por la que está recibiendo un tratamiento inmunosupresor, padece de una insuficiencia hepática grave crónica reagudizada y de una insuficiencia renal aguda, complejo cuadro originado a raíz de su enfermedad. La familia y amigos de Macarena han hecho hincapié en la importancia de no renunciar a ser donante de órganos, condición que en nuestra legislación se adquiere automáticamente al cumplir 18 años.

Cristián Rojas