Bruno Bernal, entre el temor y las ganas de volver a correr en las calles del Puerto
deportes. Atleta de 85 años, y Patrimonio Viviente de Valparaíso, habla de su enfermedad, sus poemas y de lo que espera para el 2015.
Bruno Bernal reconoce que el pasado 19 de febrero vivió una de las emociones más fuertes de su vida al recorrer la pista de rekortán del nuevo estadio Elías Figueroa ante la ovación de casi 20 mil porteños. 'Desde la cancha no se podía ver mucho pero se sentía una fuerza enorme que bajaba desde las graderías', recuerda.
Desde esa jornada, y hasta hoy, muchas cosas han pasado para este atleta, Patrimonio Viviente de Valparaíso.
'Me ha tocado de todo. Bailar con la bonita, pero también estar cerca de la muerte', asume.
Su figura no es la misma de aquella noche en Playa Ancha, sus ojos parecen quebrarse durante la conversación, admitiendo que la enfermedad que lo tuvo internado durante más de un mes en el hospital Eduardo Pereira no sólo le hizo replantear los objetivos deportivos que tenía para el 2014, sino también valorar y añorar una serie de hechos y lazos afectivos que había dejado de lado.
No han sido pocos los porteños que han extrañado al corredor de barba blanca, cintillo en la frente y zapatillas gastadas, protagonista en las calles del Puerto.
'Estoy mejor. La recuperación quizás ha sido más lenta de lo esperado, pero estoy saliendo adelante', sostiene, recordando que lo suyo fueron dos situaciones que como nunca antes le hicieron pensar en la muerte: Lo primero fue un derrame pleural, pero quizás lo más grave, fue una infección intestinal que le hizo perder más de 20 kilos en pocas semanas.
Lo que vino después son meses de dietas estrictas, mientras casi como un secreto, Bernal advierte que no deja de pensar en su vuelta al 'atletismo callejero', aunque para ello reconoce que conversará con el mismo doctor que lo operó en el pulmón para saber si existe una contraindicación en caso de retomar la actividad física.
Bruno Bernal muestra cinco carillas en que asegura haber resumido sus 50 años como atleta. 'Pero de ahora en adelante me queda otro medio siglo que contar', advierte con una sonrisa en el rostro y dejando en claro un optimismo a toda prueba.
'Estoy como para volver, pero debo reconocer que a veces siento algo de temor por lo que me puede volver a pasar', asume, mientras es evidente que sus pasos son más lentos, ante lo cual vuelve a sonreír antes de encarar la situación: 'Acabo de cumplir los 85 años… no soy todo lo joven que me gustaría, pero sí feliz de mi vida'.
Hablar de su posible vuelta al atletismo es como abrir una llave de la cual sólo surgen emociones. Es evidente que Bruno Bernal quiere volver a correr, pero también que debe tener cuidado porque su enfermedad no fue un juego. Pero el hombre es ordenado, metódico, y de inmediato aclara que 'voy a preparar un plan de trabajo'.
'Estoy como para volver', reitera, explicando que 'seguramente los primeros entrenamientos van a ser trotes cortos… no tengo fecha para ello, porque me tomaré las cosas con calma, pero voy a regresar... ese es mi proyecto para el 2015'.