"Queremos instalar el debate ciudadano en los proyectos portuarios"
Fue en el año 2008 cuando el técnico en restauración Tomás Elizalde pisó por primera vez Valparaíso, con el objetivo de rescatar algún inmueble patrimonial abandonado para convertirlo en un punto de encuentro para los porteños.
Junto a los arquitectos Roberto Fantuzzi y Jaime Rodillo, creó el hotel Fauna, ubicado en el corazón del cerro Alegre. Luego de tres años de intensa restauración y construcción, el recinto recién pudo abrir sus puertas a inicios del 2011.
Hoy, transcurridos más de seis años desde que Elizalde sintió esa primera brisa marina, este santiaguino de nacimiento, pero porteño de corazón, está encantado con la cultura, personalidad e identidad de Valparaíso, ciudad donde además ha levantado una bandera de lucha para defender el uso del borde costero, creando Mar para Valparaíso, organización que tiene como principal función difundir e instalar el debate en la ciudadanía sobre los planes portuarios que se están desarrollando actualmente en la ciudad.
"Valparaíso ha sido el motivo y la inspiración para mis emprendimientos, esta es una ciudad con una riqueza y un potencial increíble, y eso como organización nos impulsa a aportar con lo que sabemos para hacer de la ciudad un mejor lugar para vivir y desarrollarse", precisó Elizalde.
- ¿Qué es Mar para Valparaíso?
- Mar para Valparaíso es una asociación ciudadana independiente, sin fines de lucro, sin partido político ni marco legal, constituida de manera espontánea ante la inminente construcción del T2, y también para reivindicar el uso y proyección del borde costero. En este aspecto, nuestro principal objetivo es poder difundir e instalar el debate en la ciudadanía sobre los planes portuarios que TCVAL ha planificado a puertas cerradas, dando la espalda a Valparaíso, sin consultar a la ciudadanía y con grandes perjuicios para las comunidades de Laguna Verde y Placilla.
- ¿Cuáles son las principales críticas que la organización tiene respecto a los proyectos de TCVAL?
-Mira, como organización creemos que para nuestro desarrollo como ciudad es fundamental poder ponderar proyectos de calidad, pero con participación ciudadana. En ese punto, TCVAL es justo lo contrario, pues ha creado un proyecto con muchas deficiencias técnicas y externalidades negativas para la ciudad, el cual además niega para siempre la posibilidad de acceder al borde costero, siendo que ese es el gran potencial que tiene Valparaíso. Entonces, Mar para Valparaíso quiere formar parte de ésta reinvención, pero primero debemos aunar todas nuestras fuerzas en que el gobierno y EPV recapacite esta decisión para luego pensar, idear y proyectar qué hacer para mejorar el proyecto.
- Según su perspectiva, ¿qué está haciendo mal Valparaíso?
- Valparaíso está haciendo mal en no considerar a quienes habitan en ella para la toma de decisiones, le ha faltado reinventarse desde el eje central que es el municipio y valorar lo que tiene, lo que se está haciendo y lo puede llegar a ser en temas como el turismo, el patrimonio y la cultura. Personalmente me atrevería a decir que Valparaíso es la capital cultural de Chile, pero me parece que las autoridades están lejos de pensar eso, entonces, como Mar para Valparaíso pensamos que hay que creerse el cuento, qué podemos llegar muy lejos, que capacidades sobran, pero todo depende de nosotros, de nuestra integración y organización, y para eso tenemos que conversar nuestras diferencias para enfocarlas hacia una misma perspectiva, es muy importante que valoremos lo que tenemos potenciando nuestra economía a escala local, ese es un punto neurálgico dentro de lo antes mencionado.
"TCVAL ha creado un proyecto con muchas deficiencias técnicas, el cual además niega para siempre el acceso al borde costero"