A solo dos meses de que concluya la temporada de mayor ocurrencia de incendios forestales, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) dispuso la compra de 32 mil litros de líquido retardante que permitirá mejorar el combate aéreo ante los incendios forestales que afectan al país.

Del total, 22 mil litros fueron enviados hacia la Región de La Araucanía y los restantes 10 mil recalaron en el aeropuerto Concón (Torquemada), donde operan los aviones AirTractor (AT), que serán los encargados de transportar el líquido ante futuros siniestros que ocurran en la región.

El director ejecutivo de Conaf, Aarón Cavieres, explicó que la compra de este tipo de producto genera un incremento sustantivo en los costos de combate, cuyos recursos son limitados, y que 'no habíamos tenido situaciones tan complejas que ameritaran la compra de (líquidos) retardantes, pero con los niveles que hoy vive La Araucanía, se decidió realizar la compra'.

En esa línea, para Michel De L'Herbe, experto en emergencias, la utilización de líquidos retardantes es esencial para el combate aéreo y que haciendo una lógica 'las herramientas son al combatiente terrestre, como el líquido retardante al combate aéreo'.

'Me llama profundamente la atención que este sistema no ha estado disponible en tanto tiempo. Tiene que ser parte de un stock básico que se debe tener al momento de enfrentar una etapa forestal. Dentro de la lógica se debe disponer siempre de este elemento, más allá de que se use o no, pero un país como el nuestro, no puede darse el lujo de no tenerlo', precisó.

Agregó que 'la tendencia en los últimos treinta años va aumentando. El promedio histórico de hectáreas quemadas es de 9,8 por incendio, y el año pasado, que fue la peor temporada desde 1963-64, fueron cerca de 17 hectáreas, casi el doble. Este año, ya estamos cerca de las 21. Y para eso el líquido es fundamental, sobre todo en los incendios de interfaz urbano-forestales, que se mezclan con los sectores habitacionales, como ha venido ocurriendo en Valparaíso los últimos tres años'.

Además, refutó lo dicho por el director de Conaf, al afirmar que 'si hablamos de situaciones complejas, Chile es un país que históricamente ha sufrido con los incendios forestales. Más aún, el que ocurrió en Torres del Paine (2012) es un claro ejemplo, cuando en el parque se consumieron cerca de 10 mil hectáreas en menos de 72 horas'.

En otra materia a la que se refirió el director ejecutivo de Conaf, fue la de la falta de aviones con mayor capacidad de traslado de aguas para el combate forestando, al señalar que 'esos aviones -más grandes- no funcionan por la geografía del país, ya lo hemos probado. Tiran el agua en un lugar equivocado o llega como llovizna, porque están obligados a volar a una altura muy alta'.

Sobre ello, Michel De L'Herbe culpó a que 'esas son las resistencias al cambio que ha presentado históricamente Conaf. En los últimos cinco años se ha discutido: no resiste ningún análisis técnico que por la geografía no puedan operar esos aviones'. Añadiendo que 'hoy existen los multipropósitos, que son anfibios y que son los que requiere nuestro país. Pueden ser utilizados en incendios forestales, en rescates marítimos y como transporte de carga y de personas. Por tanto, se puede usar los 365 días del año, a diferencia de los que tiene el país, que operan solo en incendios forestales'.

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