Unos 60 casos de clonación de tarjetas bancarias se detectó los primeros días de esta semana en el complejo comercial de El Belloto, en la comuna de Quilpué. Puntualmente, en uno de los cajeros automáticos de una tienda dedicada a la venta de productos para el hogar, se descubrió un dispositivo utilizado para duplicar bandas magnéticas, al tiempo que comenzaron a aumentar las denuncias por estos casos ante la policía.
Ante la detección del denominado Skimmer o dispositivo usado para delinquir en estos casos, el jefe de la Brigada del Cibercrimen de la PDI de la Región de Valparaíso, subprefecto Charlie Vignes, alertó a la población respecto de la creciente sofisticación de estos aparatos y de los métodos empleados por los delincuentes, que los usan para obtener información y robar el dinero desde las cuentas de sus víctimas.
"Desde hace un tiempo a la fecha hemos detectado que se han estado utilizando unos skimmer cada vez más sofisticados, que pasan más inadvertidos en el lector de tarjetas de los cajeros", dijo el especialista.
"A simple vista, la persona cuando ingresa a un cajero no lo detecta, pero como lo mencionaba recientemente el gobernador, para que se produzca una clonación tienen que ocurrir dos cosas: primero captar la información de la tarjeta en el lector del cajero y, segundo, la clave", apunto el subprefecto.
Agregó que "siempre, cuando existen clonaciones, hay un skimmer instalado y una cámara que es muy difícil de detectarla, que por lo general están sobre la parte superior del teclado".
Recomendaciones
Ayer, el gobernador provincial de Marga Marga, Gianni Rivera, se reunió en la Brigada del Cibercrimen y con Carabineros de Quilpué, en el mismo sitio donde se detectó el delito. En el lugar entregaron recomendaciones a los usuarios para evitar ser víctima de las estafas cibernéticas, y pidieron a las entidades bancarias redoblar los esfuerzos en materia de seguridad.
"La clonación es algo que llega a todos lados y la provincia no está exenta. Pero, en base a eso, nosotros queremos hacer un llamado a que la gente, primero, pueda cambiar sus tarjetas, pueda concurrir a sus bancos y que cambie sus tarjetas, sobre todo a tarjetas con chips. Segundo, que cambie periódica y constantemente las claves de sus tarjetas. Tercero, que la gente que sabe que cuando está haciendo una transacción pida que no haya nadie detrás y cuando alguien está mirando pida que se retire. Cuarto, la clave tiene que ser absolutamente secreta, para lo cual la persona tiene que tapar con su mano el digitador para poder ingresar su clave", dijo Rivera.
La primera autoridad provincial aprovechó de solicitar a las entidades bancarias mayores niveles de seguridad para que los usuarios se vean menos expuestos a estas situaciones. "No solo seguridad para que no se roben el cajero, sino también para que sus usuarios estén tranquilos y no sean víctimas de robos, como hemos visto en esta oportunidad acá en la provincia".
Al encuentro con las autoridades asistió Patricio Madariaga, usuario de cajeros automáticos del lugar y una de las víctimas del delito registrado en El Belloto. Relató que se percató del ilícito debido a que constantemente revisa los giros que realiza. En este caso, en su cuenta tenía cerca de 600 mil pesos, y al revisar la misma se percató que sólo le quedaban cerca de 3 mil pesos.
GIRO DOLOSO
Madariaga sostuvo que de inmediato se dio cuenta que había sido víctima de un giro doloso desde su cuenta, y tras dar aviso en la sucursal más cercana del banco del cual es cliente, acudió a Carabineros a estampar la denuncia.
El jefe de la Segunda Comisaría de Carabineros de Quilpué, mayor Fernando Fajardo, sostuvo que en su unidad se recibió unas 25 denuncias de duplicación de tarjeta y retiro de dinero, por lo que de inmediato se dispuso el refuerzo de la fiscalización a cajeros no sólo de Quilpué sino de toda la provincia de Marga Marga.
"Siempre, cuando existen clonaciones, hay un skimmer instalado y una cámara que es muy difícil de detectar"
El skimmer estático o de cajero, no es el único dispositivo utilizado para duplicar una tarjeta bancaria o plástico. Se encuentra también el skimmer portátil que cumple la misma función que el anterior y que funciona de la misma manera, pero que requiere que el propio delincuente accione el mecanismo pasando el plástico por la ranura. Si en el caso del dispositivo estático el principal consejo es siempre tapar con la mano el teclado cuando se digita la clave personal, en el caso del skimmer portátil lo importante es no perder de vista la operación con la tarjeta, por ejemplo, en un supermercado, restaurante o en una estación de servicio.