En el conjunto de acciones que están adoptando las autoridades nacionales, sectoriales y regionales para la reconstrucción en los cerros afectados por el incendio de abril del año pasado en Valparaíso, se ha puesto el acento en aspectos fundamentales, como el urgente problema de la vivienda, ya sea radicando algunas en los mismos lugares que sean viables, o trasladándolas a otros sectores de la ciudad, o incluso, de la región, agregándose a esta labor el mejoramiento de las vías de acceso, la recuperación de servicios, sedes comunitarias, comercio barrial, y muy en especialmente, el amplio plan de recuperación y reconversión de las quebradas no solo del sector amagado, sino de toda la parte alta de la ciudad.
Un importante porcentaje de los recursos asignados a la reconstrucción de Valparaíso, unos 290 mil millones de pesos, serán destinados a trabajos de largo aliento para obras urbanas de distinta escala, de los cuales 90 mil serán para financiar la intervención a fondo de las 30 quebradas importantes de la Ciudad Puerto para transformarlas, en su mayoría, en parques o áreas verdes, y en general con prohibición de construir, para lo cual se están dictando normativas especiales para evitar que se levanten, como igualmente impedir las tomas de terrenos y evacuarlas, si ello haya ocurrido. Y también es previniendo la formación de microbasurales tanto en las quebradas como en el entorno de las viviendas, aparte de que dentro de un programa en desarrollo se está procediendo al retiro de los vertederos clandestinos que ya existen y en lo cual trabaja mancomunadamente la Municipalidad de Valparaíso con Conaf, y en coordinación con la Delegación Presidencial y los organismos de Vivienda, considerando que tradicionalmente las quebradas han sido foco de desperdicios, generando estos microbasurales, por la propia desidia e inconsciencia de los mismos habitantes de dichos sectores.
A todo ello se agregan los proyectos de nuevas vías de comunicación, como la prolongación de la avenida Alemania, para lograr una conexión efectiva por la parte alta de la ciudad, hasta donde puedan desplazarse sin problemas vehículos de emergencia, lugares que hoy son prácticamente inaccesibles. Dentro del Plan de Reconversión de Quebradas, el año pasado se iniciaron los trabajos en la quebrada Los Chonos y se seguirá en Kayser y Villagra y el próximo año con las primeras incluidas en el Estudio Integral de Quebradas, que está contratando el Ministerio de la Vivienda.