Viudo del expresidente Ricardo Lagos Escobar, a quien califica como uno de los pocos estadistas del país con la capacidad de poner los puntos sobre las ies en la crisis política nacional, el concejal (PPD) y empresario Tomás de Rementería, considera que Chile enfrenta la oportunidad de refundar lo malo porque "o salimos de ésta o estamos fritos". Crítico a la gestión de la alcaldesa Reginato, a quien se refiere como "la emperatriz", sostiene que el problema es que "ella reina pero no gobierna" y que su principal falencia es no saber escuchar.

-¿Qué es lo bueno y lo malo del periodo Reginato?

-El problema ha sido el "cosismo". Aquí no se ha hecho un plan de desarrollo. En un momento colaboré con la señora Virginia y su equipo. Había una administrador municipal que escuchaba, pero después todo cambió y llegó un manejo absoluto del poder. Si a esto le sumamos la falta de transparencia histórica de la administración de los gobiernos locales, la situación no es buena.

-¿Algo que rescatar?

-No es fácil poder decir algo bueno. Ha habido una entrada de dinero espectacular entre el Festival de la Canción, el casino, y los derechos de obras porque por llenar de hormigón la ciudad se pagan derechos…

-Se acaba de suspender la concesión en la población Vergara…

-Pero es transitorio, y se hace después que ese sector está fundido. Eso lo vemos todos, pero solo tuvo eco cuando el profesor Agustín Squella habló. Antes de que él hablara parece que nadie se había dado cuenta que esta es una ciudad sucia, con las veredas llenas de hoyos, llena de perros, rayada entera, no es caminable. Y con una administración que no escucha.

-¿Por qué?

-Porque no escuchan. El proyecto de la Avenida Perú es un desastre y el proyecto es una plaza de estacionamientos para el casino. Y eso de la Ciudad Bella es una estupidez, esta es la capital del turismo y hay que fomentarlo. Y de los proyectos que presentó Reginato en su primera campaña no ha hecho ninguno. Ni el parque acuático en Caleta Abarca, ni el Convention Center en el Hotel O'Higgins, ni el ensanche de la ruta costera; tampoco la construcción de un malecón en el muelle Vergara ni el acuario en la piscina de Recreo; ni el Teatro Ópera en Salinas. Ha tenido 12 años para hacerlo y no lo ha hecho. El mercado de Viña es un asco y el estero, que es la columna vertebral de la ciudad, está llena de estacionamientos. Más encima no hay ejecución porque nosotros no tenemos presupuesto, sino que "supuestos" y las sesiones del concejo son una broma.

-¿No valora la batalla que dio Reginato por mantener los ingresos del casino municipal?

-A ver, de batalla nada. Lo encuentro una chacota. Lo único que lograron es que se disgustara el expresidente Piñera y esto no saliera antes. Se lo cuento porque me lo dijo él personalmente cuando encontró la ciudad llena de crespones negros. Lo primero que hay que hacer es aceptar que la ley es pareja, y es justo que el 10% del juego sea para la comuna y el 10% para la región. Lo que sí hay que luchar es que los casinos queden radicados en las ciudades que hoy tienen casinos.

-Pero el argumento es que el municipio tendrá menos recursos...--Cuando la señora alcaldesa dice que nos vamos a quedar sin aseo, sin arreglos de los colegios pues que lea la ley. Y esta dice que, del ingreso, un 37% era para los servicios de Salud de Viña y el resto para la Corporación de Adelanto de Viña del Mar. O sea para inversión y de ahí se sacó para pagar el crédito con que se hicieron los hoteles, los puentes, no para gasto corriente.

- ¿Cuál es entonces su principal crítica? ¿La falta de diálogo?

- Viña del Mar tuvo un gran alcalde que fue Gustavo Lorca y su gran virtud era que escuchaba y cuando tienes esa capacidad tú convocas. Porque si hoy hay una crisis política en el país, después de haber tenido la credibilidad que tenía la Presidenta Bachelet, es porque se escuchó poco.

chacota política

- ¿Qué le parece la ley que pone límite a la reelección?

- O sea, hay que tener sentido del humor porque pone limitación a las reelecciones desde el 2026 y exceptúa a los que se cambian de distrito y comuna. Lamentablemente nuestros señores parlamentarios no han entendido nada del mensaje espontáneo que produce la ciudadanía. ¿A qué quieren llegar? ¡¿A qué pase lo que ocurrió con De la Rua, en Argentina cuando la gente pedía "que se vayan todos"?! Es una chacota. Esto es muy simple: todos los cargos de elección popular no pueden tener reelección como pasa con el Presidente de la República. El famoso dedo de Lagos dijo "Pinochet, usted quiere estar 25 años en el poder!". Bueno hay parlamentarios que ya llevan 25 años.

-La alcaldesa lleva tres periodos ¿es indestronable?

-Con esa señora ha habido una cosa de marketing porque es reina, pero no gobierna. Y todos los saben. ¿Quién gobierna Viña del Mar? La primera ministro María Angélica Maldonado quien, la artífice de que Reginato llegara a ser alcaldesa.

-¿Por qué su conglomerado no ha recuperado la alcaldía?

- En los 60 la izquierda y la centroizquierda eran una suma de utopías, y la derecha una suma de individualidades. El problema hoy es que la Concertación y la Nueva Mayoría también es una suma de individualidades. La tendencias en los partidos no son por ideas son por hegemonías. Y aquí impera el dividir para gobernar y eso es miel sobre hojuelas. Lo que pasa es que la autoridad se ha transformado en un producto y, por eso, no debiera haber campañas, ni previas, ni durante. Se le debiera dar poder al Servicio Electoral y ser éste el que informa a la ciudadanía quienes están dispuestos a conducir el país en las plazas ciudadanas, multando a los que ensucian la ciudad.

-Y usted con tres periodos como concejal ¿seguirá siéndolo?

- Ser concejal fue mi aporte a la ciudad. Bastante menos de lo que yo hubiera querido. Tengo 10 años de concejal. ¿Seguir? Depende de las circunstancias. De repente se van todos porque se dan cuenta que la están embarrando, entonces sigo porque creo que aún puedo hacer un aporte.

-¿Se ve como alcalde?

- No, pasó la vieja. Estoy dispuesto a colaborar, pero no es mi tema. Sí creo que la reforma municipal es fundamental para refundar el país porque el gobierno local es el más cercano a la gente y debe ser convocante. Hoy los alcaldes son pequeños tiranos que hacen, deshacen y deciden.

la salida

-¿Cómo se sale de la crisis?

- Creo que la solución es la convocatoria de los ciudadanos.

-¿A través de una asamblea constituyente?

- Puede ser. Lo que se necesita es una refundación de la instituciones y como la Comisión de Verdad y Reconciliación se necesita una Comisión de Verdad y Transparencia en la que entren todos: los Peñailillos, los Jovino Novoa, todos. Después de la verdad viene la justicia y luego el perdón.

- Una crisis de confianza que también afecta a la Presidenta…

- Es que todo ha perdido la credibilidad, pero ella sigue teniendo la mayor credibilidad. Me hubiese gustado sí una Presidenta tomando el helicóptero para regresar a La Moneda y pidiéndole la renuncia al hijo de inmediato, y que hubiera hecho un decreto y destituido al ministro del Interior. Una señal de que en La Moneda 'soy la Presidenta de todos los chilenos y en la casa la mamá que le pedirá las explicaciones al hijo'. Lamentablemente no lo hizo, estuvo mal asesorada. Pero en ella no hay ningún acto de corrupción, no tengo dudas.

-¿Cómo ve el futuro político del país?

- Me gustaría que la Comisión Engel tuviera más fuerza y más apoyo del que ha tenido para transparentar lo que falta. Se ha hecho mucha chimuchina y si no resurgimos de esta crisis estamos fritos. La obligación de las autoridades, empezando por la Presidenta, es hacer transparencia.

-Y entre los presidenciables ¿cuál le tinca?

- De MEO tengo una buena impresió, pero creo que podemos correr el mismo riesgo que con Peñailillo, que es honesto e inteligente, pero inmaduro para el puesto que tuvo que ocupar. Hubiera sido un muy buen vocero. Y MEO anda en los empeines y eso me empieza a preocupar. Y con Lagos Escobar creo que fue un craso error que no haya sido candidato porque no tendríamos gran parte de los problemas que tenemos hoy día. Nos habríamos ahorrado a Piñera, que no es un tema menor porque destapar lo de Piñera no será fácil, pero es lo que se viene y por eso está calladito.

"Al municipio de Viña del Mar le falta escuchar y convocar. Y si hoy hay una crisis política en el país, después de haber tenido la credibilidad que tenía la Presidenta Bachelet, es justamente porque se escuchó poco"