"Este cónclave oficialista no debiera ser excepcional, sino que tener mayor periodicidad porque nos ha faltado coordinación y no solo respecto al Gobierno, sino que respecto de los parlamentarios de la Nueva Mayoría que hace mucho tiempo no se juntan y es cada partido el que organiza por separado su relación con el Gobierno". Esa es la queja del diputado Pepe Auth (PPD) y también el principal objetivo que, a su juicio, debiera concretarse en la cita que se realizará el próximo lunes 3 de agosto en Santiago. El segundo objetivo es que La Moneda entregue un itinerario claro de las reformas "tanto en sus tiempos como en sus contenidos de aquí al fin del Gobierno".

- ¿Esto del realismo político sin renuncia lo convence?

- No veo en el horizonte renuncia alguna. Estamos hablando de realismo porque de alguna manera hubo un desapego de las restricciones de la realidad porque el realismo sin renuncia es un principio que debe estar operando siempre; y uno, dependiendo de los objetivos, empuja la realidad lo más allá posible, pero no puede olvidarse o cegarse a ella.

- Pero el presidente de su partido cuestionó la decisión señalando que se estaban poniendo en jaque las reformas.

- Yo no soy de los que le tienen miedo ni al reformismo ni al realismo exagerado. Siempre la voluntad debe conversar con la realidad; de lo contrario, se vuelve voluntarismo y la realidad debe conversar con los objetivos ya que de lo contrario de convierte en conservadurismo chato. No creo que el rol de un partido de Gobierno sea ponerse en una de las puntas, sino que articular los deseos con la realidad.

- ¿La realidad puede ser tan compleja al punto de poner en duda los objetivos?

- Es una realidad compleja, pero no paralizante. No estoy con aquellos que dicen sigamos haciendo las cosas que nos propusimos en completa independencia de si tenemos o no recursos para hacerlo porque a la larga es un pésimo negocio; crees que con eso vas a mantener a tus electores, pero lo que se crea es una situación económica que termina impactando sobre tus mismos electores. ¿Alguien se preocupa de la política cuando hay alto desempleo, o cuando no hay crecimiento en perspectiva? Tener una economía mínimamente sana es lo que permite emprender reformas y por eso hay que cuidarla.

- Hubo cuestionamientos al inicio del debate de que la reforma tributaria no iba a alcanzar. ¿Quedó corta o es solo culpa del bajo crecimiento?

-La reforma va a recaudar lo que tiene que recaudar y que son tres puntos del PIB; y cuando recaude menos de eso, del 3%, estaríamos hablando de la ineficacia de la reforma. Lo que pasa es que tres años de sostenido bajo crecimiento nos mata los recursos y nadie está diciendo que la reforma no genere tres puntos del PIB, pero si hay menos crecimiento, esos tres puntos son menos plata. Cuando se hacen estos cálculos son a mediano plazo, no pensando en la coyuntura.

- ¿En el bajo crecimiento hubo o no una profecía autocumplida del mundo empresarial?

- Yo creo que hubo una subvaloración del impacto que iban a tener las reformas en la economía, pero es obvio que es difícil pensar que tú vas a reformar un país sin que se produzca un impacto. El punto es que luego de adaptarse a las nuevas circunstancias, el país recupere la senda de crecimiento. Yo jamás pensé que no iba a haber un impacto inicial, me preocupa más la lentitud de la recuperación, porque además coincide con un cambio de ciclo de inversión minera, una perspectiva de mediano plazo de bajo precio de los commodities y del bajo precio del cobre, y por lo tanto, la economía requiere de transformaciones más estructurales si queremos recuperar niveles de crecimiento como los que tuvimos.

- La oposición también se está reuniendo en búsqueda de una mejor coordinación. ¿Qué le parece?

- Bien, pero extemporáneo; lo hicieron hace unos meses y apareció Penta y se lo destruyeron porque no tienen una posición común. Mientras la UDI no resuelva la defensa corporativa va a arrastrar al conjunto de la oposición a ese descrédito. Por eso, si estuviera en sus zapatos, primero me preocuparía de despejar eso porque el día que formalicen a Jovino Novoa y RN pida distanciamiento, y la UDI parta a solidarizar con él, se acabó la vocería común.

- ¿Qué le parece que el exministro Peñailillo refutara los dichos de Giorgio Martelli en orden a que no fue el gestor de A y N?

- Hay una inconsistencia entre la declaración que hace Rodrigo Peñailillo en el sentido de que él definió su trabajo, sus ingresos y sugirió el contrato de un conjunto de personas, pero a la vez hay una contradicción con Martelli quien dijo que él sí participó en la creación de esa empresa. Porque, si no, es bien impensado el rol protagónico y conductor que tuvo en las decisiones. Si no participó en su diseño, difícilmente podría haber tenido un rol tan decisivo en su funcionamiento.

- Tampoco quiso contestar las preguntas sobre Bachelet...

- Leí que había sido una sugerencia del abogado, pero no me da ni frío ni calor porque no veo yo que la Presidenta hubiera estado preocupada de generar recursos y contratar personas en 2012 cuando no había decidido ser candidata.

- ¿Le duele aún la salida?

- Yo ya hice la pérdida y di vuelta la página. Políticamente, esto está resuelto.

"No veo en el horizonte renuncia alguna. Estamos hablando de realismo porque hubo un desapego de las restricciones de la realidad; el realismo sin renuncia es un principio que debe estar operando siempre"

"Es bien impensado el rol protagónico y conductor que tuvo (Peñailillo) en las decisiones, porque si no participó en su diseño, difícilmente podría haber tenido un rol tan decisivo en su funcionamiento"