El fútbol como fenómeno social y la crítica que subyace a Estadio Seguro
FÚTBOL. Carlos Vergara, coordinador del Núcleo de Sociología del Fútbol, cuenta la historia e intereses de este colectivo nacido en el Puerto.
Incentivados por mantener una relación estrecha con el fútbol -que sin duda es una de sus mayores pasiones- y abordarlo desde la perspectiva de su formación académica, un grupo de sociólogos porteños formó en 2010 el Núcleo de Sociología del Fútbol, colectivo que busca generar experiencias investigativas desde las ciencias sociales a un campo poco tradicional, difícil de legitimar y sumamente específico como lo es el fútbol.
Con el correr del tiempo, la organización ha adoptado un carácter más interdisciplinario, pero siempre entendiendo al balompié como un fenómeno social que traspasa los límites de la cancha o el estadio, y que a través de su estudio permite generar respuestas a diversas problemáticas de la sociedad.
Fue así como fueron encontrando que se trataba de un área establecida en países como Argentina, Brasil, México, Costa Rica y Colombia, pero todavía en pañales en Chile, donde los más ilustres investigadores del fútbol desde las ciencias sociales han sido Eduardo Santa Cruz y Bernardo Guerrero.
Desde su conformación, el Núcleo de Sociología del Fútbol ha desarrollado seminarios, coloquios y otro tipo de actividades para difundir las temáticas que han abordado o simplemente para generar un diálogo académico en torno al fútbol y sus diversas aristas.
Un rol más activo
Carlos Vergara Constela es sociólogo de la Universidad de Valparaíso y Máster en Estudios Territoriales y de la Población de la Universidad Autónoma de Barcelona. Es también uno de los coordinadores del Núcleo de Sociología del Fútbol, y reconoce que luego de unos años ahora la idea es dar un paso al siguiente escalón.
"Hemos tratado de ir implementando una dimensión más política al colectivo para poder proponer también. Queremos elaborar otro tipo de proyectos que no tengan que ver solamente con lo académico, sino que puedan tener algún fin público", explica el joven profesional.
En este sentido, y luego del seminario denominado "Impacto de los Mega Eventos Deportivos y sus Desafíos para las Políticas Públicas", realizado a principios de julio en Santiago y Valparaíso con destacados expertos en la materia, entre ellos el argentino Pablo Alabarces y el uruguayo Rafael Bayce, el núcleo pudo vincularse con autoridades del Ministerio del Deporte y del plan Estadio Seguro, lo que tiene muy expectantes a sus integrantes.
"Eso fue interesante porque nos empezaron a reconocer como actores válidos, aunque lo que no fue tan bueno es que quieren que les demos una receta sin haber investigado lo suficiente. Quieren que les solucionemos el problema del fútbol y para ellos solucionarlo es sentarse a discutir en una mesa y no pensar a largo plazo", afirma Vergara.
Y es que para el sociólogo, temas como los vinculados a la violencia en los estadios son mucho más profundos y complejos de abordar, y que por lo demás requiere la participación de todos los actores, en especial los hinchas. "Con el barra brava no hay presunción de inocencia, no está reconocido como actor democrático ni con opinión válida", enfatiza.
Vergara no esconde su visión con respecto a Estadio Seguro, institución que a su juicio no debe ser entendida dentro de la estrategia nacional de seguridad pública, y que ha seguido una política de restricciones y enjuiciamiento de la imagen del hincha. "El camino que se ha tomado ha sido por el lado del desplazamiento a sectores fuera del campo de juego y de los estadios para que no dañen la mercancía y el espectáculo del fútbol. De esa forma, el hincha se ve como el enemigo público del país, los que son los productores de la violencia y atentados contra el orden público", sostiene.
Desde la perspectiva de este sociólogo, también resulta clave entender que las barras chilenas son completamente distintas a las de otros países, por lo que nada se saca con copiar modelos como los empleados en Inglaterra contra los "Hooligans". Y es que la dinámica y desenvolvimiento de las hinchadas es influida por la realidad de cada nación, en gran medida con aspectos ajenos al fútbol en sí mismo.
"Hemos tenido un poco de cortocircuito con ellos porque quieren sentarse a una mesa a trabajar con propuestas de solución y les dijimos que no estamos capacitados para elaborarlas porque tenemos apenas una investigación respecto al tema, y eso no es material válido para generar propuestas", confiesa el académico, para luego agregar que "hay que solucionar cuestiones que están fuera del campo de fuerzas del fútbol, que pertenecen a la estructura de las ciudades, a la producción de masculinidades, a las desigualdades en educación y otros factores que en algo influyen".
Otras aristas de la institución futbolera
A partir de este año, el colectivo dio un paso más allá mediante la creación de una organización no gubernamental (ONG) llamada Centro de Estudios Sociales del Deporte (CESDE), donde el núcleo pasó a ser un departamento. Pero eso no es todo, ya que el 2014, Carlos Vergara, en conjunto con Eric Valenzuela, publicaron el libro "Todo es Cancha: análisis y perspectivas socioculturales del fútbol latinoamericano", el cual reúne artículos de expertos en la materia. Además, el núcleo está preparando un observatorio de la gestión de la sociedad anónima que maneja los hilos de Colo Colo.
"El camino tomado ha sido por el lado del desplazamiento (de las barras) a sectores fuera de los estadios para que no dañen la mercancía y el espectáculo del fútbol. De esa forma, el hincha se ve como el enemigo público del país "
Carlos Vergara Constela, Sociólogo