A 15 días de la segunda vuelta que definirá quién será el próximo Presidente de Argentina, y un día después de que la actual Mandataria, Cristina Fernández, apareciera por primera vez públicamente junto al candidato oficialista, Daniel Scioli, ayer comenzó a regir la veda que prohíbe al Gobierno difundir actos propios que puedan ser interpretados como una promoción para captar el voto.

Según establece el Código Electoral de Argentina, la veda para actos de gobierno comienza dos días antes del inicio formal de la campaña de los candidatos en medios de difusión audiovisual, que partirá mañana, de cara a las votaciones que se llevarán a cabo el próximo 22 de noviembre.

El viernes, último día para hacer actos, Fernández, encabezó junto a Scioli, la inauguración de un polo tecnológico, con un discurso de fuerte contenido electoralista, en el que arremetió contra la oposición.

En la primera vuelta del 25 de octubre, Scioli obtuvo el 37% de los votos, por debajo de los que vaticinaban las encuestas e insuficiente para consagrarse Presidente en esa jornada electoral; y el opositor del frente conservador Cambiemos, Mauricio Macri, resultó segundo, con un 34,1%, más de lo que pronosticaban los sondeos.

La campaña de los candidatos se extenderá hasta las 8 horas del viernes 20, momento desde el cual tampoco podrán publicarse sondeos electorales.

Unos 32 millones de argentinos están convocados a votar en la segunda vuelta para definir quién sucederá a Fernández a partir del 10 de diciembre.

La jornada de ayer estuvo marcada por la discusión entre Scioli y Macri por el valor del dólar. El candidato oficialista prometió que si gana la segunda vuelta, el precio del dólar en enero estará "por debajo de 10 pesos", cerca del actual valor, mientras que Macri, tachó de "mentira" a esa promesa.

La divisa estadounidense cotiza actualmente en casas de cambio y bancos a 9,58 pesos por unidad. Pero como el acceso a divisas en el mercado oficial está fuertemente restringido, el valor ilegal está en torno a los 15,40 pesos.

Expertos vaticinan que con el próximo Gobierno habrá cambios en el mercado cambiario, sea con un fin abrupto del denominado "cepo cambiario" o mediante una flexibilización gradual de las restricciones.

Ello derivaría en una mayor depreciación del peso, aunque su magnitud dependería de varios factores, entre ellos el nivel de reservas del Banco Central, que viene en caída y el viernes cerró en US$26.700 millones.

Scioli dijo a la radio Rock and Pop que, de ganar los comicios, para marzo el nivel de reservas se incrementará en US$ 20.000 millones, ya que planea sellar acuerdos monetarios "con China y con Brasil".

Scioli dijo que él, como su rival Macri, postulante del frente Cambiemos, también habla de "cambio", pero de un cambio que no sea "devaluar y dejar todo librado al mercado".

Consultado por otra emisora sobre la promesa de Scioli de un dólar por debajo de los 10 pesos para enero, Macri dijo que ese valor "no lo consigue nadie" y afirmó que se trata de "otra mentira más del Gobierno".

En declaraciones a radio Mitre, Macri aseguró que, si llega a la Casa Rosada, habrá "un único tipo de cambio, que lo van a poder comprar y vender todos".

Señaló que, para mejorar la economía de "un país que está parado hace cuatro años", hay que "bajar la inflación y parar con las devaluaciones".

22 de noviembre se realizará la segunda vuelta entre Scioli y Macri para definir al Presidente argentino.

9,58 pesos es el valor actual del dólar, que Scioli dijo que en enero estará bajo los 10 pesos "sin problema".