Las contradicciones del informe policial con la versión de Omar Jara tras polémico partido
VALPARAÍSO. Documento da cuenta que Carabineros tardó 11 minutos en actuar y que no se consideraron advertencias.
El informe final presentado por la V Zona de Carabineros de Valparaíso al Ministerio del Interior da cuenta de una serie de contradicciones en relación a la versión que públicamente ha manifestado el gobernador provincial, Omar Jara, tras los violentos incidentes registrados en el estadio Elías Figueroa en el marco del partido entre Wanderers y Colo Colo, por la última fecha del torneo de fútbol profesional, el pasado domingo 6 de diciembre.
En contraste a las declaraciones vertidas por Jara, quien explica que las Fuerzas Especiales de Carabineros habían tardado alrededor de 22 minutos en ingresar al recinto deportivo y actuar, el documento reservado que la policía uniformada envió al Ministerio del Interior da cuenta que transcurrieron solo 11 minutos desde que el comandante de las Fuerzas Especiales ingresó al recinto y dio la orden para actuar.
Ello luego que se cumplieran todos los protocolos establecidos por Estadio Seguro, entre ellos la primera contención que deben realizar los guardias a los barristas, la advertencia al público asistente a través de altoparlantes y la suspensión del partido por parte del árbitro del partido, Enrique Osses, que se confirmó a las 17.12 horas, tras determinar que no estaban las garantías para disputar el encuentro deportivo.
El documento también da cuenta de una serie de advertencias que hace Carabineros a la autoridad política respecto a la inviabilidad de efectuar el partido. El más relevante, un informe técnico de seguridad negativo emitido por el OS-5 de abril pasado, el cual redujo de un 92 a un 52 % la certificación de las condiciones del estadio, pese a lo cual igualmente se autorizó el evento.
Tampoco se respetó aforo máximo establecido en el recinto para un partido calificado de alto riesgo, permitiendo una venta de 17.500 entradas, factor que habría influido en la desatada violencia que protagonizaron dos de las barras más agresivas del fútbol profesional en el gramado del Estadio Elías Figueroa.
Otro punto relevante y que deberán aclarar los informes solicitados a Estadio Seguro, Carabineros y Gobernación de Valparaíso, tiene relación con el fuerte intercambio de opinión protagonizado por las autoridades políticas y policiales con respecto al lugar por donde debían ingresar los carabineros a la cancha para disuadir a los barristas, intervalo en que se produjeron los incidentes más graves.
Si bien en un primer momento las fuerzas policiales se desplazaron hasta los accesos de Tribuna Andes (Alejo Barrios), las vallas instaladas hacia a la pista de recortán impedían que los efectivos pudiesen acceder hacia la cancha, con el peligro de ser emboscados por los barristas. Ante esta situación, finalmente se dispuso que ingresaran por la Tribuna Pacífico, perdiéndose importantes minutos en intervenir y evitar los desmanes y agresiones entro los asistentes.
Otro aspecto que contemplaría el informe policial tiene relación con que no se tomaron en cuenta las advertencias previas realizadas por un equipo técnico policial (OS-10) sobre las falencias en el servicio prestado por el grupo de guardias dispuesto por la empresa de seguridad al interior del recinto. Luego que Estadio Seguro concluyera que hubo una tardía reacción para contener a los hinchas que desbordaron las galerías, la gobernación cursó una multa a la empresa de seguridad ante los errores en el procedimiento.
Jara aclara versión
Ante estas versiones y tras evacuar un informe al ministerio del Interior, en el que se entrega un detalle pormenorizado y cronológico de lo ocurrido en los días previos al partido, el gobernador Jara dijo desconocer el documento policial.
La autoridad salió al paso de las especulaciones respecto a una discusión con el alto mando de Carabineros, respecto al lugar por donde debía actuar la policía para enfrentar a los barristas. "Yo pedí el ingreso de Carabineros una vez que la gente invadió la cancha, no estoy seguro si fueron 2 o 3 minutos después de iniciados los incidentes, pero en ningún momento hubo una discusión respecto a por dónde debían entrar. Yo solo pedí que ingresaran a dispersar los desórdenes".
Respecto al informe negativo que emitió en abril pasado el OS-5 sobre las condiciones de seguridad del estadio, bajando la calificación de 92 a 52 %, Jara dijo "no entender" el resultado de esa evaluación, dado que "los temas de seguridad eran los mismos e incluso habían aspectos que se habían mejorado desde octubre del año pasado a la fecha de la nueva evaluación. No tenemos claro todavía cómo está ponderando OS-5 algunos ítems de ese informe de seguridad. Eso se lo hicimos saber, pero aún no tenemos una explicación de cuáles son los aspectos que bajan tanto la ponderación".
El gobernador descartó que, previo al partido entre Wanderers y Colo Colo, existiera algún informe indicando que el estadio no estaba apto para un partido clase A. "Nosotros nos guiamos por el informe de seguridad que emite Carabineros partido a partido y ese informe decía que el partido era factible y se cumplían los requisitos y requerimientos que establecía la gobernación".
Dichos requisitos están contemplados en la resolución que autorizó el partido, tales como número de guardias, vallas y otros aspectos técnicos.
En relación a que se habría permitido un aforo mayor al recomendado para un encuentro de alta convocatoria, la autoridad provincial descartó la apreciación, recordando que el anterior partido entre Colo Colo-Wanderers se jugó con 19 mil personas, para un estadio cuya capacidad máxima es 21.800. La salvedad de ese encuentro fue que solo se vendieron mil entradas para la barra visitante, en esta ocasión la cifra fue de 7 mil.
Sobre el informe evacuado Jara reiteró que "hicimos una cronología desde la primera reunión que tuvimos con el club en adelante y anexamos los documentos correspondientes para que sean revisados por el ministro del Interior".
Sesión especial
Durante la jornada de ayer se realizó una sesión especial en la Cámara de Diputados donde se analizaron los incidentes sobre el polémico partido y el funcionamiento del plan "Estadio Seguro".
Durante su exposición, el ministro del Interior, Jorge Burgos, manifestó que había realizado una "lectura preliminar" de los informes solicitados a los distintos estamentos sobre el partido, sin embargo reconoció "inconvenientes en los actos preparativos" del partido, así como también dio cuenta que "hubo hechos que debieron ser prevenidos por los organizadores". Por tal motivo, Burgos adelantó que dispondrá la "intervención preventiva de Carabineros" al interior de los estadios en todos los partidos de clase A y B.
Durante la sesión especial los diputados de oposición de la zona, Osvaldo Urrutia (UDI) y Joaquín Godoy (Amplitud), reiteraron sus críticas a los responsables políticos de la seguridad pública, apuntando sus dardos al gobernador Omar Jara y al encargado de Estadio Seguro, José Roa. En ambos casos solicitaron la renuncia de los personeros. A las críticas se sumó el diputado PPD, Ramón Farías, mientras que el diputado DC, Víctor Torres, apuntó a la tardanza en la intervención de Carabineros, lo cual deberá ser aclarado.
Cambian a los jefes policiales
La V Zona de Carabineros adelantó el cambio de los dos principales jefes policiales a cargo del operativo de seguridad del polémico partido. Mientras el prefecto de Valparaíso, coronel Fernando Bywaters, asumió ayer como jefe del Departamento Administrativo de la V Zona, luego de 3 años en la prefectura; el comandante de Fuerzas Especiales de Valparaíso, Carlos González, fue destinado como nuevo prefecto de Marga Marga.