Arabia Saudita defiende ejecuciones y arrecian críticas por muerte de clérigo
DECISIÓN. La monarquía de Riad calificó como "justos" los procedimientos que acabaron con la vida de 47 personas. Irán y Hizbulá rechazaron el ajusticiamiento de un destacado jeque chiita.
Las autoridades saudíes defendieron ayer su decisión de ejecutar a 47 personas, en su mayoría condenados por terrorismo ligados a Al Qaeda, pero también a un prominente clérigo chií, y alegaron que todos fueron sometidos a "juicios justos".
Con la medida, Riad dio una muestra de que no tolerará los ataques yihadistas suníes ni de la minoría chií que demanda igualdad, aunque provocó molestia en la región.
Entre las víctimas está el jeque Nimr Al Nimr, clérigo que fue una pieza clave de las protestas de 2011 inspiradas en la Primavera Árabe.
El vocero del Ministerio del Interior, Mansur al Turki, afirmó en una conferencia de prensa que "las autoridades se aseguraron de la identidad de todos los condenados antes de ejecutar las sentencias legales", ratificadas por los tribunales de ese país.
Al Turki explicó que las ejecuciones se llevaron a cabo por separado en 12 zonas del país, en ocho de ellas mediante la decapitación por sable y en cuatro por fusilamiento.
El representante pidió comprensión con el sistema legal saudí, que juzga según "la ley islámica, cuya autoridad judicial está sujeta al Corán y a los dichos de Mahoma".
El comunicado de Interior anunciando las ejecuciones estaba precedido por versículos coránicos que justifican el uso de este castigo, como también hizo el mufti del país, Abdulaziz al Sheij, que las calificó de "justas".
Por su parte, el jeque Mansur al Qafari, vocero del Ministerio de Justicia, dijo que todos los acusados de terrorismo gozan de derechos y garantías judiciales, como la defensa de un abogado, la posibilidad de presentar recursos y la presencia de familiares en las sesiones.
"Aplicamos los juicios legales contra los que perpetran crímenes y después de agotar todas las fases judiciales", argumentó Al Qafari.
La decisión de la monarquía de la familia Al Saud fue rechazada por amplios sectores de Oriente.
Irán condenó la ejecución del clérigo chií Nimr Baqir Al Nimr, y dijo que ese país "pagará un alto precio" por ello.
Teherán consideró la ejecución "muestra de la profunda imprudencia e irresponsabilidad" de Arabia Saudita.
Según el vocero del Ministerio iraní de Asuntos Exteriores, Hosein Yaber Ansarí, "la ejecución de un personaje como el jeque Nimr, que no tenía ninguna herramienta más que hablar para el seguimiento de sus objetivos políticos y religiosos, lo único que muestra es la profundidad de la imprudencia e irresponsabilidad".
En Bahrein, los chiíes se tomaron las calles en varias localidades después del rezo del mediodía, lo que derivó en choques con las fuerzas de seguridad, según constó la agencia EFE.
En el Líbano, el grupo chií Hizbulá responsabilizó a Estados Unidos por la ejecución e instó a la comunidad internacional a condenar ese "crimen odioso" y a incluir a las autoridades saudíes en la lista de grupos terroristas.
15 % de población en Arabia Saudita pertenece a la minoría chiita, de la que era parte el clérigo Al Nimr.
151 personas fueron ejecutadas entre enero y noviembre de 2015 en Arabia Saudita. En 2014 fueron 90.