"La carrera docente es garantía de que los alumnos van a tener buenos profesores"
mabel.gonzalez@mediosregionales.cl
Después de tres días en Valparaíso, la ministra de Educación, Adriana Delpiano, está de vuelta en su oficina en Santiago. Viajó para seguir de cerca los pasos finales de la Carrera Docente en el Congreso luego de nueve meses de tramitación.
Fue el último paso de su cartera en el Parlamento antes del receso legislativo. Ahora se centra en lo que viene: desmunicipalización y educación superior.
Mirando hacia atrás, considera que "no hay ninguna reforma que no genere incertidumbre, dudas e intereses encontrados", pero dice que eso no quita la necesidad de "hacerse cargo" de las falencias que tienen los sistemas educativos, en especial el universitario.
En este aspecto asegura que se garantizará la autonomía y la libertad de enseñanza de las instituciones, pero cree que si hay algo que no está en discusión es el lucro y la calidad académica.
No quiere dar plazos para los próximos proyectos porque dice que "después me los cobran", pero señala que si hay uno que está más o menos claro en el cronograma, es el de fortalecimiento de la educación pública, que se espera tramitar antes de las elecciones municipales.
al corazón de la calidad
- En la oposición dijeron que la carrera docente ha sido el único proyecto que apunta verdaderamente a la calidad de la educación. ¿Qué opina?
- Este es un proyecto que va al corazón de la calidad de la educación, tiene un efecto en los profesores, pero lo más importante es el impacto de tener profesores mejor formados y más apoyo. Esto es el corazón de la reforma, esto se lleva, en términos de recursos, incluso la mitad de lo que fue la reforma tributaria. Estamos hablando de $ 2.300 millones y la reforma total eran cerca de $ 5 mil millones. Esta es la apuesta que Chile hace al corazón de tener mejores profesores, con más exigencias y mejor evaluados. Esto es garantía de que los alumnos van a tener buenos profesores.
- En la oposición destacaron que el proyecto se tramitó con acuerdos, un diálogo amplio y que finalmente tuvo un apoyo transversal. ¿Cree que este proyecto sienta un estilo de trabajo de aquí en adelante con la oposición?
- En la Carrera Docente hubo dos cosas interesantes: el trabajo con la Cámara y con el Colegio de Profesores para llegar a ciertos puntos de acuerdo que eran como un piso básico de trabajo, y el hecho de que el Senado respetó ese acuerdo. El Senado podría no haberlo respetado, y lo respetó. Este es un proyecto que no tiene una división ideológica, todos querían que a los profesores les fuera bien, estén mejor remunerados, que tengan más exigencias.
- La carrera docente pone más exigencias a los profesores. ¿Qué va a pasar con un docente con un desempeño deficiente? ¿Cómo se van a manejar estas situaciones?
- La ley establece mecanismos con mucho apoyo: mejores universidades con mayores exigencias para ellas, con dos pruebas nacionales; un año entero de acompañamiento del nuevo profesor, y un apoyo especial del Centro de Perfeccionamiento para los profesionales jóvenes o para los que tengan problemas en sus evaluaciones. Aquí lo que se está señalando es un equilibrio entre un profesor mejor pagado y formado, y la calidad de su enseñanza expresada en los niños. Un mal profesor hoy puede influir entre tres mil y cuatro mil niños a lo largo de su carrera. Eso es lo que se está buscando que no pase.
- Según el desempeño que se ha observado hoy en los profesores, ¿van a ser muchos los que van a tener que abandonar el sistema?
- No, creo que no son tantos, porque hay dos cosas: una es la evaluación que va para la carrera y otra es la evaluación académica del profesor. Los que hoy están en nivel Insuficiente son un porcentaje bastante menor, un 4%. Esto equilibra el peso de la responsabilidad formativa de la institución con la situación del propio profesor y la necesidades y apoyos que requiere para seguir avanzando en la carrera. Lo más probable es que con todos los filtros que se están estableciendo no lleguemos, más que excepcionalmente, a situaciones de profesores que tienen que salir.
- En la oposición critican que la carrera docente "discrimina" a los profesores de colegios particulares subvencionados porque su ingreso se hará después que el de los docentes de colegios municipales. ¿Hay un trato desigual?
- Hoy tenemos dos subsistemas de profesores, eso es una realidad, no es que la estemos inventando con la ley. Unos tienen estatutos docentes, los otros tienen Código del Trabajo. Eso tiene ventajas y desventajas según como se mire. Además, no es tanta la diferencia de tiempo, unos entran el 2017 y ese mismo año empiezan a establecerse los cupos para los particulares subvencionados, en 2018 se evalúa al profesor, en 2019 está en pleno régimen y se termina el 2026 de ingresar todo. Hay que mirarlo con perspectiva histórica, no hemos tenido carrera docente en muchos años.
ARQUITECTURA DEL SISTEMA
-¿Le preocupa que la oposición recurra al TC, como lo ha hecho con otros proyectos?
- Me preocupa más bien que cada vez que algo no te guste en un proyecto que se discute en el Parlamento por meses, tu tema sea recurrir al TC. Eso no hace bien. Es válido, existe como una opción, pero no me parece que en todas las leyes, si algo no te parece, amenaces con el TC. El proyecto lo discutimos juntos y el tema de la inconstitucionalidad lo escuché recién esta semana. Antes nunca hubo reparos.
-¿Qué prioridades se fijarán de aquí en adelante?
- Educación pública y educación superior. La gente piensa que la reforma es la gratuidad, pero ese es solo uno de los elementos de educación superior. Lo más importante es tener una arquitectura del sistema de educación superior, que en Chile es profundamente heterogéneo. No estamos dibujando un sistema de educación superior en una hoja en blanco, sino que nos estamos haciendo cargo de lo que ya tenemos y a eso le queremos dar racionalidad. Para eso necesitamos una Superintendencia con dientes y uñas que nos ayude a supervisar el sistema, además de mejorar la Agencia de Acreditación. También tenemos la rareza que viene de la dictadura de que las universidades son sin fines de lucro, pero los IP y CFT pueden lucrar.
- ¿Prevé una tramitación compleja de esta reforma, tomando en cuenta que el año pasado solo se habló de gratuidad, pero este año se discutirán temas como regulación y acreditación?
- No hay reformas que no generen incertidumbre, dudas e intereses encontrados. Sin dudas va a ser muy debatida, no va a ser fácil. Hay miradas que son bien distintas, lo que no quita que tenemos que hacer una propuesta, tramitarla y tratar de sacarla lo mejor posible. Lo que es muy importante es que teniendo una regulación clara, todos los temas de autonomía, de libertad de enseñanza, están totalmente garantizados, nadie se va a meter en esos aspectos. Pero lo que no puede ser es que una institución lucre, saque las platas por el lado y la calidad académica no esté garantizada. Son aspectos que yo creo que hay consenso de que se requieren.
- ¿Un año electoral puede complejizar la agenda legislativa?
- Las elecciones municipales se ven más afectadas con el tema de nueva educación pública. Es un proyecto que queremos sacarlo ojalá antes de que empiece el tema de las elecciones, porque podría pasar, por ejemplo, que un candidato diga 'por qué van a entregar la educación, yo me la juego por la educación', pero creo que hay bastante consenso con las agrupaciones de municipios de que es una necesidad ir terminando el proceso municipal porque hoy, dada la variedad del territorio y las inequidades de origen, no tienes manera de garantizar bien que la educación en manos de los municipios pueda garantizarle a los niños y a los jóvenes una educación de igual calidad. Hay municipios que tienen muchos recursos, pero hay otros que tienen menos.
INCLUSIÓN Y SELECCIÓN
-Respecto de la ley de inclusión, solo tres de los 15 reglamentos están listos, lo que estaría poniendo en una situación incómoda a los colegios particulares subvencionados. ¿Ha habido retraso en ello?
-Hay reglamentos que no son necesarios que estén en marzo, tienen que estar durante el año, regulan materias que son obligatorias a partir del 2017. Estamos apurando algunos que estaban en Contraloría. Todo lo que dependía del Ministerio ya salió del Ministerio, pero estamos en eso y vamos a tener en marzo todos los que se requieren, y ya los que se necesitaban más urgente, lo tienen los propios sostenedores.
- Los sostenedores dicen que uno de los reglamentos más urgentes es el de selección...
- Pero ese no lo necesitan en marzo para nada, va a partir solo en Punta Arenas el tema de la selección el próximo año, y eso se ha trabajado con esa zona directamente. El resto de los colegios no necesita hacer ningún sorteo en marzo.
- Las últimas cifras entregadas por el Mineduc indican que la gratuidad finalmente beneficiará a unos 110 mil estudiantes (80 mil alumnos antiguos y 30 mil de primer año de universidad), una cifra menor a la proyectada inicialmente. ¿Qué ocurrió ahí?
- Lo que pasa es que todavía tenemos 67 mil pendientes. Estos son alumnos que no completaron el Formulario Unico de Acceso a la Educación Superior (FUAS). Eso vence el 9 de febrero, y de esa fecha hasta marzo se da un plazo excepcional para reclamos y para alumnos que, estando en el sistema, nunca completaron bien los trámites. Entonces, con los que puedan entrar, yo creo que vamos a llegar a 150 mil, 160 mil alumnos.
- Pero se hablaba de 180 mil...
- Es que siempre fue un misterio cuántos eran los del quinto decil que podían entrar a primer año, es imposible saberlo, entonces tú te pones siempre una cuota mayor. ¿Cuántos de los alumnos pendientes van a entrar en gratuidad? No lo sé, porque depende de si califican.
- Es decir, ¿esto tiene que ver más con un tema formal, burocrático, que con que, por ejemplo, algunos potenciales beneficiarios no hayan cumplido con los requisitos para acceder a la gratuidad?
- Hay rechazados también, hay un número importante de ellos. Esto es porque no cumplían con el requisito de estar hasta el quinto decil, esa es la razón fundamental.
- En comparación con años anteriores, ¿han visto un aumento de las postulaciones a universidades que cumplen con los requisitos para la gratuidad, versus otras que tienen fines de lucro o no tienen los años de acreditación?
- Vamos a tener esos datos más adelante. Lo interesante es que a los alumnos de primer año la gratuidad les ha permitido entrar a carreras de primera opción que eran más caras. Me impresionó mucho que en Arica un alumno decía 'yo voy a estudiar Derecho en la Chile. Si no tuviera la gratuidad, habría tenido que optar por un IP o CFT'. Se les abrió la posibilidad a chicos que tenían los puntajes a postular a carreras que son más caras. Ese va a ser un elemento interesante de ver.
- A pesar de que hasta ahora los estudiantes más vulnerables contaban con becas y créditos...
- Claro, pero lo que más me impresionó fue la valoración para los alumnos de la matrícula. El valor de la matrícula era un freno enorme para muchos alumnos. Por otro lado, el 37% del total de postulantes seleccionados con derecho a gratuidad egresó de colegios municipales y un 57% egresó de particulares subvencionados. O sea, es una proporción casi uno a uno respecto de la cantidad de alumnos que tiene el particular subvencionado y el municipal. Es totalmente proporcional, no hay ninguna diferencia, se comporta igual.
por regiones
- ¿Y según regiones?
- El 25,5% del total de postulantes seleccionados con gratuidad proviene de la RM. En general la RM en todos los indicadores es como el 40%. Un 17,17% son del Biobío y un 12,1% de Valparaíso, lo que es alto. Hay algo ahí interesante de estudiar. Y las universidades que más alumnos con gratuidad tienen son la Católica del Maule (52,7% de sus alumnos de primer año), la Católica de Temuco (54,7%) y la Universidad de la Frontera (47,1%). En La Araucanía hay una incidencia alta de alumnos en gratuidad.
- El sistema de becas se mantuvo en los institutos profesionales y CFT, pese a que este mecanismo iba en contra de las pretensiones de la Presidenta Bachelet. ¿Le decepciona esa situación?
- No, es una realidad no más, no es una decepción. Queremos seguir creciendo hacia el lado antes que arriba, o sea, si tú me dices, pasar a un decil más o ampliarse hacia el lado a los alumnos que no pudieron ingresar, es hacia el lado. Tomamos el compromiso con los CFT e IP de mandar un proyecto para que instituciones que quieren pasar a ser sin fines de lucro -un requisito para la gratuidad- lo puedan hacer manteniendo todas las condiciones (años de acreditación y reconocimiento oficial) que tienen hoy. Cumplido ese trámite, ellos y sus alumnos pueden postular a la gratuidad. Esperamos este año se transformen en sin fines de lucro y puedan postular, y si no postularon, ya no es un tema de discriminación, porque la posibilidad la tuvieron.
- ¿Va a establecerse la gratuidad nuevamente a través de una ley corta este año, como advierten algunos?
- Estamos partiendo el año, no hay ninguna razón para pensar que este proyecto de ley no pueda estar terminado a fin de año, así que yo no me plantearía siquiera esa posibilidad. El proyecto de educación superior esperamos que ingrese lo antes posible y, por lo tanto, creo que tenemos los suficientes meses para garantizar que saquemos un proyecto de ley como tal y en ese marco vaya la gratuidad.
"Un mal profesor hoy puede influir entre tres mil y cuatro mil niños a lo largo de su carrera. Eso es lo que se está buscando que no pase" "Lo más probable es que con todos los filtros que se están estableciendo no lleguemos, más que excepcionalmente, a situaciones de profesores que tienen que salir"
"Las elecciones municipales se ven más afectadas con el tema de nueva educación pública. Es un proyecto que queremos sacarlo ojalá antes de que empiece el tema de las elecciones" "No estamos dibujando un sistema de educación superior en una hoja en blanco, sino que nos estamos haciendo cargo de lo que ya tenemos y a eso le queremos dar racionalidad"
La secretaria de Estado desestimó las críticas por los reglamentos para los colegios.