Mabel González
El equipo de la precandidata demócrata a la Casa Blanca Hillary Clinton se estaría tomando cada vez más en serio las posibilidades de que el polémico magnate Donald Trump consiga la nominación del Partido Republicano para las elecciones generales de noviembre próximo.
Mientras EE.UU. vivía ayer un día clave en el proceso electoral con el llamado "Súper martes", la prensa local reportaba la serie de reuniones que activaron los principales colaboradores de la ex primera dama para afrontar una pregunta que muchos nunca pensaron que se iban a hacer: ¿cómo derrotar a Trump en una elección general?
La idea de que el controvertido aspirante se imponga en las primarias a los otros precandidatos republicanos tomó fuerza en los demócratas que apoyan a la ex secretaria de Estado luego que Trump venciera a sus oponentes en tres primarias consecutivas, un éxito que también ha inquietado a algunos sectores del partido conservador.
El diario The New York Times señala que, en un principio, varios demócratas se mostraron confiados en que Clinton le ganaría fácilmente a Trump y estaban seguros de que "sus comentarios incendiarios sobre los inmigrantes, las mujeres y los musulmanes lo harían inaceptable para muchos estadounidenses". Además, tenían fe en que el creciente poder electoral de los electores negros, latinos y el de las mujeres ayudaría a dejar en el camino la carrera del multimillonario. Pero habían otros que no subestimaron a Trump, entre ellos el ex Presidente y esposo de la precandidata, Bill Clinton.
La estrategia que estaría tomando forma es la de retratar a Trump como un misógino y enemigo de los trabajadores cuyo temperamento impetuoso podría tener efectos adversos para el país.
Demócratas citados por el mencionado rotativo advierten que se corre el riesgo de perder la Presidencia si no toman en serio la candidatura de Trump, tal como han hecho los republicanos en las primarias.
El gobernador de Connecticut, el demócrata Dannel P. Malloy, llegó a plantear que el magnate es una figura "formidable, que entiende la ansiedad de los votantes" y que "será implacable con Hillary Clinton" en los comicios generales del 8 de noviembre próximo, de lograr ambos la nominación de sus partidos.
Electores acuden a votar en jornada clave
Cientos de miles de personas votaron ayer en el "Súper martes", la gran cita electoral interna de los partidos Republicano y Demócrata para elegir a los candidatos de cada partido para las elecciones presidenciales de noviembre. Ayer se celebraban elecciones internas en 11 estados (12 en el caso de los republicanos) y en el archipiélago de Samoa Americana (solo demócratas). Una contundente victoria en el "Súper martes" podía allanar el terreno para Trump y Clinton hacia la nominación de sus respectivos partidos.