Amargo reestreno de Everton en su retorno a la Primera División
FÚTBOL. Los oro y cielo perdieron con justicia por 3-1 ante Iquique en su debut en el Torneo de Apertura.
El debut de Everton en su retorno a Primera División estaba cargado de expectación. No era sólo por los dos años que estuvo disputando el ascenso, ni tampoco por la compra mayoritaria del club por parte de inversores extranjeros. Era principalmente por el juego y el nivel mostrado por los viñamarinos en los partidos de Copa Chile y amistosos previos al arranque del Torneo de Apertura.
Sin embargo, el primer apretón dejó muchas dudas y un resultado adverso, pero a la vez justo. Una derrota por 3-1 ante un ordenado y dinámico equipo de Deportes Iquique en el Norte Grande del país, que siembra dudas respecto a la buena etapa preparatoria que realizó el club oro y cielo.
Ahora, los dirigidos por Héctor Tapia se enfocarán en retomar la confianza que hasta antes del inicio del campeonato estaba a tope en el equipo, pues en la próxima fecha reciben a San Luis en el estadio Sausalito.
Incómodos
En Everton todos sabían de la dificultad que suponía tener que jugar en cancha sintética y bajo un fuerte sol en la comuna de Alto Hospicio.
En la semana se prepararon con entrenamientos en canchas de similares características, pero lo cierto es que desde el inicio del partido, a los viñamarinos se les vio incómodos.
El rápido trajín y los altos botes que cogía el balón, más una cancha pequeña y un equipo presionador, hicieron que a Everton le costara entrar en el partido.
Y es que la incomodidad era evidente. Balones perdidos en las salidas y en el mediocampo generaron varios dolores de cabeza para una defensa que en no pocas ocasiones fue superada con relativa facilidad.
Así, por ejemplo, ocurrió a los 6' de juego. Ahí, Gustavo Bustamante, que terminó siendo una de las figuras del partido, casi anota al lograr sacar un remate desde la banda que debía resguardar Gino Alucema.
Y aunque las llegadas no eran constantes de los locales, si lo era la presión sobre Everton. Por ello, el juego colectivo de los de "Tito" Tapia fue uno de los puntos más bajos en el partido.
A los 15' los viñamarinos tuvieron su primera llegada con un fuerte remate de Sebastián Leyton, pero se fue desviado. Luego de eso, no mucho más.
Iquique, por su parte, abrió la cuenta a los 22' minutos. Una jugada que comenzó desde la banda izquierda del ataque, terminó con un centro desde la derecha de Riquero y Gonzalo Bustamante cabeceó entremedio de los dos centrales en plena área chica.
Luego de eso, los "dragones" se envalentonaron. Álvaro Ramos reclamó un penal por falta del golero Pérez -en las repeticiones se vio que sí hubo falta- pero el juez lo desestimó. Lo que sí cobró fue el penal para Everton a los 42' por una mano -muy discutible- de Zenteno en el área.
Braian Rodríguez lo cambió por gol. Parecía un respiro para los de Viña justo antes del descanso. Sin embargo, las marcas volverían a fallar, esta vez en un balón parado, y en la última jugada de la primera fracción, Enzo Guerrero puso el 2-1 para Iquique en un córner.
Sin reacción
En el complemento, se esperaba un Everton encarador y de juego claro, sin embargo el equipo no tuvo reacción al esquema dispuesto por Jaime Vera en los locales.
Así, mientras Rodríguez, Cerato o Romo desperdiciaron las pocas llegadas auriazules, Mathías Riquero estableció el 3-1 final con un certero cabezazo a los 68' de juego.
Al final, dura derrota para un cuadro que bajó sus expectativas, pero que mantiene la ilusión intacta de hacer un buen papel en el Apertura.