Mauricio Mondaca
Al menos 51 personas murieron la noche del sábado cuando un niño de entre 12 y 14 años perpetró un atentado suicida contra los invitados a una boda que bailaban en la calle en la ciudad turca de Gaziantep, junto a la frontera siria, informó el Presidente turco.
El ataque fue el más letal en lo que va de año en Turquía y el Presidente Tayyip Erdogan dijo ayer que fue perpetrado probablemente por militantes locales y procedentes de Siria.
"Las evidencias iniciales indican que fue un ataque del Daesh (Estado Islámico, por su acrónimo árabe)", comentó Erdogan, durante una visita a Gaziantep tras el ataque.
El Mandatario agregó que al menos 69 personas estaban siendo atendidas por lesiones de distinto tipo, de las cuales 17 estaban graves.
"Se realizaron, se están realizando muchas operaciones intensas. Desde luego, nuestras fuerzas de seguridad realizarán estas operaciones con intensidad aún mayor", agregó el Jefe de Estado citado por AP, sobre las indagaciones del hecho.
La fiesta de matrimonio del sábado era en honor de un miembro del Partido Democrático Popular -cercano al movimiento kurdo- y el novio fue uno de los heridos. La novia resultó ilesa, según funcionario locales de seguridad.
Las celebraciones estaban terminando con la tradicional noche de fiesta de la "henna", en la que los invitados reciben una pintura decorativa en sus manos y pies. Algunas familias se habían ido ya cuando explotó la bomba, pero entre los muertos había mujeres y niños, según los testigos.
Turquía ha sufrido una serie de atentados este año, algunos reivindicados por milicianos kurdos vinculados con el proscrito Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), otros atribuidos al Estado Islámico. En junio, presuntos milicianos del grupo islámico mataron a 44 personas en un ataque con armas y bombas al aeropuerto de Estambul. Un doble ataque suicida a un acto por la paz en Ankara, atribuido al Estado Islámico, dejó 103 víctimas fatales en octubre.
El país aún se repone de un intento fallido de golpe de Estado en julio, que el Gobierno atribuyó al clérigo musulmán Fethullah Gulen -radicado en Estados Unidos- y sus seguidores.
El primer ministro Binali Yildirim condenó el ataque y prometió vencer los ataques "demoníacos", mientras los partidos opositores anunciaron reuniones de emergencia y jornadas de protesta.
Los Gobiernos de Estados Unidos, Suecia, Grecia, Francia, Bahrein, Qatar y Jordania condenaron el ataque.
Los hechos
Atentado Un menor de edad se hizo estallar en medio del festejo de una boda en la ciudad turca de Gaziantep.
Responsables El Gobierno turco comenzó una ofensiva investigativa y apuntó al Estado Islámico como presunto autor.
Objetivos A través de ataques a grandes concentraciones de kurdos, el EI intenta atizar las tensiones étnicas en el país.