Italia se plantea reconstruir su patrimonio dañado por sismo
PLAN. Foco estará en los burgos, los cascos antiguos de localidades con valiosos monumentos que quedaron reducidos a escombros.
Italia se plantea ya reconstruir su patrimonio histórico dañado por el terremoto del miércoles en el centro del país, cataclismo que dejó, al menos, 293 edificios de valor cultural seriamente afectados, según el primer balance oficial.
El ministro de Cultura, Dario Franceschini, dio esa cifra en una rueda de prensa en la que aseguró que, aunque la prioridad ahora es salvar vidas, con el tiempo pretenden "reconstruir los burgos para mantener una imagen fiel a la que tenían". Los burgos son los cascos antiguos de las localidades que albergaban importantes monumentos y que ahora quedaron reducidas a escombros por el terremoto de 6 grados en la escala de Richter, que por el momento ha causado 250 muertos.
Los edificios destruidos
Tal es el caso de la localidad de Amatrice, en su día considerado uno de los pueblos más bonitos de Italia, donde había catalogadas unas tres mil obras de valor artístico.
Algunos de los edificios que allí quedaron destruidos son el Museo Cívico, la basílica de San Francisco, la iglesia de San Agustín y tres puertas, como pudieron confirmar las autoridades. Para ello, cuerpos especializados en el patrimonio realizaron una primera evaluación de los daños en una zona limitada.
Hasta el lugar se desplazó medio centenar de carabineros, 30 de los cuales pertenecen al cuerpo de los llamados "cascos azules de la cultura", disponibles para este tipo de emergencias.
El general del comando de los carabineros para la tutela del patrimonio cultural, Fabrizio Parrulli, apuntó a la agencia de noticias EFE que ese personal opera normalmente en Italia y también adiestra a los cuerpos de otros países.
En febrero pasado, Italia y la Unesco, organismo bajo el paraguas de la ONU, acordaron cooperar con el objetivo de preservar el patrimonio artístico perjudicado por los conflictos o los desastres naturales a nivel mundial. Ahora, esos efectivos están accediendo a algunas zonas afectadas del centro de Italia, si bien muchas otras siguen estando inaccesibles. El ministro subrayó la necesidad de que no se retiren los escombros que puedan pertenecer a los edificios históricos. "Si se los llevan, no se podrá reconstruir una fachada del siglo XIII que se haya desplomado", dijo.
La mayor parte de los bienes dañados son eclesiásticos, en especial iglesias, y también se intentará rescatar frescos, cuadros y objetos litúrgicos. El sismo abrió el debate sobre la existencia de normas que serían ineficientes para hacer frente a este tipo de emergencias.
Investigan posibles irregularidades
Pero no sólo edificios históricos resultaron afectados por el terremoto. También hubo derrumbes de construcciones que habían sido remodeladas hace poco tiempo. Es el caso de la escuela de Amatrice, que había sido reestructurada en 2012 para que cumpliera con las normas sísmicas. También está el caso del campanario de Accumoli, que pese a haber sido sometido a intervenciones antisísmicas, se derrumbó completamente. Por ello, la Fiscalía abrió una investigación por presunto desastre doloso.