A. Paredes / P.Navia

En la recta final de las elecciones municipales, donde busca su tercer periodo como jefe comunal de Valparaíso, el alcalde Jorge Castro descartó cualquier intento de aprovechamiento político producto del lanzamiento de fuegos artificiales que se realizará mañana en la bahía, en el marco de las celebraciones de Fiestas Patrias.

La autoridad enfatizó que es el Concejo Municipal el que aprueba el programa oficial de Fiestas Patrias, por lo tanto "el hecho de venir a criticar en vísperas del espectáculo pirotécnico, a lo menos tiene su suspicacia. La actividad estaba incluida dentro del calendario oficial. Además, tenemos una cantidad importante de disparos que estaban en el proceso de compra del pasado Año Nuevo, que debían ser instalados en el sitio de mayor cantidad de disparos, que es TPS, pero que no se pudieron lanzar porque había faenas de ampliación en dicho recinto".

Castro insistió que en años anteriores también se han realizado fuegos artificiales en la bahía, por lo tanto son parte de una tradición, transformándose en un atractivo más para promover el turismo asociado a estas fiestas.

"Una parte importante de nuestro servicios, hotelería, hostales y visitas vienen porque esto forma parte del panorama de las festividades en fin de semana, lo cual se está promoviendo desde agosto pasado", puntualizó.

El jefe comunal acotó que "no tenemos un mayor volumen de gasto porque tenemos el material y es parte de lo que hemos venido haciendo en los últimos años, con un buen nivel de reservas cuando tenemos espectáculos que son un verdadero ícono para la ciudad, donde también destaca la Fogata del Pescador".

La actividad está programada para las 22.30 horas de mañana y la plataforma de lanzamiento de alrededor de 3 mil disparos se realizará desde el Molo de Abrigo, para lo cual se realizaron las coordinaciones con la Armada.

"una tradición"

El director de Bienes Municipales, Pedro Pablo Chadwick, descartando un afán electoral del evento y cualquier gasto extraordinario en que haya incurrido el municipio para solventar el lanzamiento.

Enfatizó que se ha convertido en una tradición el uso de fuegos artificiales en septiembre, ocurrió para el Bicentenario y el 2013, entonces "si eso se considera como un tema electoral, creo que es porque hay demasiada sensibilidad en la gente. Los fuegos artificiales son de Valparaíso, son una tradición, a la gente le gusta, teníamos el material y la mejor decisión fue dispararlo y que la gente lo disfrute".

El disparo de los fuegos no implica ninguna otra actividad aparejada por parte del municipio, puesto que "no hay un punto oficial, ni siquiera sé dónde el alcalde los va a ver, pero no habrá ninguna ceremonia para ello".

Respecto al costo que tendrá la actividad, el personero precisó que la empresa pirotécnica Igualt es la que hará el lanzamiento y el municipio utilizará alrededor de ocho funcionarios para labores de preparar el punto y realizar el posterior aseo, para devolver las instalaciones a la Armada. "Hay un costo de horas extraordinarias que se debe cancelar al personal, ya que vamos a trabajar los días festivos, pero la empresa pirotécnica no cobra nada por esto", apuntó, junto con resaltar que el comercio en reiteradas ocasiones ha solicitado contar con fuegos artificiales en esta fecha, pero por costos no se ha podido concretar.

La Caja de Compensación Los Andes inauguró ayer en Valparaíso una oficina de 1.400 metros cuadrados como parte de un proceso de expansión en la región, que también incluyó la apertura de una sucursal en Concón. "Estamos constantemente buscando mejorar la atención, cercanía y experiencia de nuestros afiliados cuando acuden a nuestras sucursales", comentó el gerente general de la entidad, Nelson Rojas, en la ceremonia realizada ayer en la nuevas dependencias de la entidad, ubicada en Condell 1227, en la que se espera atender a más de 70 mil afiliados.

"Queremos estar más cerca de ellos para que accedan a los múltiples beneficios sociales disponibles y que esto se realice en un lugar seguro, agradable y de manera expedita, por lo que estas dos nuevas sucursales que estamos inaugurando van en esa línea", dijo el ejecutivo.

En el Te Deum ecuménico realizado ayer en la Iglesia Catedral, el obispo de Valparaíso, monseñor Gonzalo Duarte, reflexionó sobre la realidad que estamos viviendo en nuestro país y sobre el anhelo de todos los chilenos y chilenas: tener una vida de gran calidad espiritual y material.

En su homilía, la autoridad eclesiástica recorrió cada uno de los aspectos de la vida que los chilenos y chilenas viven en la actualidad. "Percibimos los chilenos y chilenas que estamos en momentos de crisis... Pero los más lúcidos de nuestros conciudadanos y conciudadanas han destacado que toda crisis: sea ésta personal, familiar, eclesial o institucional, conlleva una gran oportunidad. Y eso es lo que queremos para todos los chilenos y chilenas: una vida de gran calidad espiritual y material", resaltó el prelado.

En la ceremonia religiosa participaron autoridades civiles y militares, sacerdotes, pastores, pastoras, representantes de diversas iglesias y comunidades cristianas. Se trata del décimo tercer Te Deum Ecuménico, con el que se dio comienzo oficial a las celebraciones Patrias de este año en Valparaíso.

"Cultura de la queja"

Duarte reflexionó respecto a que estamos inmersos en la "cultura de la queja" y de la "indiferencia". Sin embargo, añadió que tenemos muchos testimonios de chilenos y chilenas que, cada uno en lo suyo, se jugaron por los demás, como Gabriela Mistral, doña Juana Ross de Edwards, los doctores Enrique Deformes Villegas, Eduardo Pereira Ramírez, Gustavo Fricke Shencke o el Padre Hurtado. "Pienso en las mamás de Chile, en tantos voluntarios y voluntariados, en tantos políticos y estadistas que han sido cruciales en nuestras coyunturas históricas. En tantos artistas que nos descubren la belleza que hay por doquier en nuestra tierra. Tenemos, en verdad, una multitud de testigos en nuestra historia y en nuestro hoy como nación que nos pueden inspirar y revitalizar moral y espiritualmente. Y sin embargo, pareciera que no es así. ¿Qué nos está pasando?", reflexionó el religioso.

Respecto a los índices de pobreza, el obispo señaló que "los observadores más lúcidos afirman que "ha disminuido "la pobreza, pero no la desigualdad".