Las señales gravitatorias pueden ayudar a predecir terremotos
La detección de señales gravitatorias generadas por movimientos tectónicos podrían mejorar los sistemas de alerta temprana de terremotos, según un estudio publicado en la revista Nature. Científicos del Instituto de Física del Globo de París (IPGP) señalan, sin embargo, que es necesario desarrollar nuevos instrumentos antes de que su técnica se pueda poner en práctica.
Los mecanismos de alerta actuales se basan en la detección de ondas sísmicas, pero esas vibraciones sólo se pueden percibir después de una ruptura en la tierra.
Los científicos saben desde hace tiempo que los terremotos generan cambios en el campo gravitatorio del planeta, pero hasta ahora esas variaciones sólo han podido detectarse una vez producida la ruptura tectónica.
Estudios teóricos habían apuntado ya a la posibilidad de percibir variaciones gravitacionales en el mismo momento de una ruptura, unos cambios que podrían ser medidos en todo el globo antes de que se produzcan ondas sísmicas.
"La redistribución de la masa terrestre que provoca un terremoto ocasiona cambios observables en el campo gravitatorio", señala el trabajo publicado en Nature, que detalla cómo la teoría predecía la existencia de señales "muy pequeñas comparadas con el ruido sísmico" capaces de anticiparse a las vibraciones de la Tierra.
Jean-Paul Montagner y su grupo de investigación analizaron específicamente los datos recogidos durante el gran terremoto de Japón en 2011, causante del tsunami que provocó el desastre en la central nuclear de Fukushima.
Científicos franceses detectaron una señal gravitatoria que se observó antes de la llegada de las ondas sísmicas, un descubrimiento que, en su opinión, puede servir para desarrollar nuevos sistemas de alerta rápida.
"Durante la ruptura, una señal que se sobreponía al ruido de fondo se observó con una relevancia estadística por encima del 99%", detalla el trabajo.