Mujer de 76 años relata cómo llegó a invertir $ 13 mil dólares con Marín Orrego
VIÑA DEL MAR. Una de las presuntas víctimas de estafa dice: "Confié en él por su posición, pero es un delincuente".
Cecilia - quien prefirió no dar su apellido y no ser identificada a través de fotos, tampoco quería dar esta entrevista. Como una de las supuestas decenas de víctimas de presunta estafa de parte de la corredora Marín Orrego, tenía vergüenza y, a ratos, mientras contaba lo que le pasó con los 13 mil dólares que alcanzó a invertir en el negocio personal del expresidente de la Bolsa de Valparaíso, Carlos Marín Orrego, pausaba su relato.
Era evidente que intentaba aguantar las lágrimas que querían salir cuando recordaba la impotencia y el dolor que le causó - y que le causa - el saber que fue engañada con dinero que ni siquiera es suyo.
Y no es suyo, porque la historia de Cecilia es así: ella llegó a la corredora ubicada en calle Libertad, en Viña del Mar, por recomendación de amistades en el Rotary Club de la ciudad. Específicamente, su cuñado pertenecía a la orden y en el club se comentaba lo conveniente que era invertir allí, tomando en cuenta el prestigio de Marín. Ella puso su dinero, el que - afortunadamente - sacó una vez que falleció su marido hace unos años, pero también ingresó fondos de su hermana.
"Llegué a la oficina del señor Marín Orrego en el año 94, 95. Hice primero unos depósitos míos y después mi hermana, que está fuera del país, en Suiza, empezó a decirme que yo tratara de ahorrar el dinero y lo llevé ahí. Me parecía de mucha confianza, porque se suponía que este señor era rotario, con todo lo que implica ser rotario: una persona honorable, que se sacrifica por los demás, y por eso lo hice, porque tengo gente de mucha confianza que es rotario, como mi cuñado, y otras personas conocidas. Creí que era confiable, pero la verdad es que yo no tenía información, a lo mejor el error mío fue no ir a buscarla, porque ellos no enviaban nada. Yo retiré mis fondos porque quedé sola, pero mi hermana siguió enviando y enviando y esos fueron los dineros que se perdieron".
- ¿Para qué los quería su hermana?
- Ella enviaba un dinero y me pidió que los depositara acá, porque ella quería venirse a vivir a Chile definitivamente cuando jubilara y pasar su vejez acá, tranquila. Ella tiene 65 años. Yo tendría que responderle a ella por ese dinero, pero... espero que esa persona que se quedó con el dinero se haga responsable.
- ¿Quién le dijo o le recomendó que invirtiera en la corredora?
- Yo tenía algunos depósitos en el banco, pero veía que no generaba mucho la cosa en cuanto a los intereses mensuales que daba. Y en la corredora no era una cosa que uno dijera que en un 5, 10, o 15 por ciento, era un 0,1 o 0,2 más de lo que me podía pagar el banco, no eran porcentajes altos, pero era algo más. Yo sabía que él era rotario, que era una persona honorable ante el mundo financiero, por su participación en la bolsa, porque uno lee, se informa un poco, y todo daba a entender que esta persona era respetable. Además, gente del Rotary estaba haciendo lo mismo, porque como él seguramente hacía sus gestiones de convencer para captar más clientes... o incautos.
- ¿Así se siente usted ahora? ¿Incauta?
- No sé qué pensar en realidad, porque he estado muy mal al respecto. Este tipo de personas, uno no se atreve a decir palabras, por ejemplo, como él está delinquiendo, este es un delito, y por lo tanto es un delincuente. Nadie dice eso porque la palabra es fuerte y se usa más para la gente pobre que para la gente que usa corbata. Por eso uno dice para qué reclamo, si no tengo ninguna certeza de que voy a obtener algo, además de que yo tengo que pagar para que alguien haga algo por mí. Cómo es posible.
- Cuando hizo los depósitos a plazo en la corredora, ¿habló con él? - No, no. Él tenía un funcionario que siempre me atendía que era Mario Zúñiga. Me dijeron que el porcentaje se subía o se bajaba en relación al mercado del mes, cómo se movía la bolsa. Eran depósitos a plazo y él lo hacía, ahí está el negocio, él lo hacía a nombre de él y no de cada uno de los clientes. Y los recibos que daba decía tal cantidad de dinero en depósito a plazo, pero hice las averiguaciones y no estaban registrados a nombre mío o de mi hermana.
- ¿Le dijo a su hermana?
- No. No me atrevo, porque para ella va a ser muy fuerte saber que le pase esto. Yo voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para solucionarlo. Fui a la Fiscalía, tuve abogado, envié carta a Marín Orrego, fui a la bolsa... además quiero estar bien emocionalmente, porque estoy muy mal. Me siento defraudada, estafada, engañada. Además, este señor en la prensa dice que no tiene nada... y entonces eso significa que yo soy tontita, porque no puedo creer que no tenga nada. Yo creo que él tiene mucho más de lo que cualquiera piensa.
- El abogado de Marín Orrego dijo que él dejó de lado sus negocios en la corredora por su labor en la Bolsa, y que esto no se trataba de estafa.
- No, no, no, no... no lo creo. ¿Qué tipo de inconsistencia? ¿Qué tipo de irregularidades? Si él no puede tener a una persona trabajando tantos años en una oficina si no es una persona de confianza de él.
- También aseguró que Marín va a pagarles.
- Yo no creo que vaya a pagar, pero soy cristiana, católica, y espero en Dios que él pague. Y si me paga, yo le pido perdón públicamente. Pero él para mí es una persona cero confianza, cero honestidad, una mala persona porque jugó con la confianza no solo mía, de muchas personas.
- ¿Qué siente usted cuando ve que cuando se destapa todo esto, Marín Orrego no aparece?
- Tratar los problemas de dinero con cárcel aquí no se usa... para ese tipo de gente. Porque aquí la palabra delincuencia no es lo mismo para todas las personas. Si fuera de otra manera, él se habría presentado ante la PDI y hubiese dicho, yo estoy viendo mis asuntos, voy a pagar, pónganme ante la prensa y me hago cargo de esto. Pero esto de esconderse, no es la primera persona que lo hace y ¿qué devuelven? Están una semana en la cárcel y luego salen y siguen haciendo lo mismo.
"Gente del Rotary estaba haciendo lo mismo, porque como él seguramente hacía sus gestiones de convencer para captar más clientes... o incautos""