Mabel González
El té, la segunda bebida más consumida del mundo después del agua, ha aumentado su popularidad en Chile en los últimos años. Así, en el país ya se ingieren alrededor de 387 tazas per cápita al año, explica Carlos Marinetti, gerente de Adagio Teas.
El resultado es que Chile se ubica en el top 15 de las naciones que más consumen este producto, que en diciembre celebra su mes internacional. "El consumo de té en Chile es transversal", agrega Marinetti, quien detalla que "el mayor consumo ronda entre los 25 a 50 años".
Las mujeres son las mayores consumidoras (un 73% versus un 23% de hombres), "siendo el té negro y verde, en sus versiones puras o saborizadas, las más demandadas", agrega el experto en té.
Fin de la hora del té
Como consecuencia de este creciente consumo, es cada vez más evidente que el té dejó de estar reservado sólo para la "hora del té" y ahora es ingerido por la mayoría de los chilenos, en distintas ocasiones del día. Según la firma Adagio Teas, ello se debe a las diferentes variedades que existen de esta bebida y al mayor conocimiento de los chilenos con respecto a sus beneficios.
Según cifras manejadas por esta empresa especializada en té, la tendencia del crecimiento de esta bebida en el mundo, desde principios de los años 2000, es de dos dígitos en los tés de valor agregado o de calidad, es decir, generalmente tés en hebras, frescos y con buenos tratamientos que conservan sus propiedades.
En 2013, la revista Industria Alimenticia realizó un estudio que estimó que el consumo de té en Chile creció un 46% en un lustro, con ventas que se acercan a los US$ 200 millones. Mientras, según cifras de la industria nacional, el mercado del té en Chile en 2015 creció un 149% en relación a 2012.
Propiedades
El té, que se obtiene de la infusión de las hojas de la planta Camellia Sinensis, es conocido por una serie de beneficios para la salud, los que, a su vez, varían de acuerdo a la variedad del producto. De esta forma, el té blanco es alto en antioxidantes, antiviral y antibacterial, además de contener vitamina A.
El té verde también es alto en antioxidantes, pero además tiene un efecto diurético, es decir, reduce la retención de líquidos. Esta variedad es alta en clorofila y vitamina B, además de poseer la capacidad de ser un regenerador celular.
Mientras que el té "azul" u "Oolong" (que quiere decir "Dragón Oscuro") es rico en antioxidantes, es desintoxicante, contiene vitamina C y mejora la capacidad de atención.
El té negro
El té negro, que se caracteriza por su sabor intenso, también tiene propiedades antioxidantes y es, además, un antihistamínico natural. Por otro lado, el té rojo estimula el metabolismo, ayuda a quemar grasas, posee un efecto diurético, contiene lovastatina y es energizante.
Té "rooibos"
Finalmente, el té "Rooibos" es alto en antioxidantes, es un antihistamínico natural, alto en vitaminas y minerales y libre de cafeína, por lo que pueden tomarlo niños y embarazadas y, en general, se puede ingerir por la noche.
Recomendaciones
En opinión de los expertos en la materia, para preparar una buena taza de té es importante que el agua sea purificada o filtrada, pues el contenido mineral afecta el aroma, el sabor y la extracción de los compuestos beneficiosos. También es fundamental la temperatura: mientras los tés delicados, como los verdes y blancos, requieren temperaturas más bajas, los más resistentes, como el negro y el rojo, necesitan mayores temperaturas para extraer todos los componentes.
tazas de té per cápita se consumen, aproximadamente, al año en nuestro país. 387
de los consumidores de té en Chile son mujeres, versus un 23% que representan los hombres. 73%