Tomás Moggia C.

Hace poco más de un mes, Cristián Álvarez y Joel Soto, el exdelantero de Santiago Wanderers, tomaron el enorme desafío de hacerse cargo del departamento de deportes de la Municipalidad de Valparaíso.

Desde el 2014 que ambos venían trabajando juntos, siempre ligados al fútbol amateur, formando una escuela e incluso la primera liga femenina en Playa Ancha.

Si bien primero recibieron un ofrecimiento de parte del equipo del exedil Jorge Castro, al poco tiempo Jorge Sharp se reunió también con ellos, y optaron por trabajar con quien se convertiría en el futuro alcalde porteño.

"Nos fuimos con Sharp básicamente por las ideas... nosotros en ningún caso somos políticos, en este tema de por medio está Valparaíso. Nosotros nos identificamos con Valparaíso. Toda mi familia es de acá y no les podemos fallar", confiesa Álvarez.

Por diversos factores, su llegada formal al municipio se dilató, pero a principios de febrero de este año asumieron el cargo adoptando una figura especial para mantener la dupla: con Cristián como director del departamento de deportes, y Joel su asesor. Sin embargo, para ellos se trata de simples títulos, ya que las decisiones las toman en conjunto, como un equipo.

"Acá no venimos a hacernos millonarios y tampoco tenemos un fin de escalar en la política. Vinimos por el deporte en Valparaíso, que es un desafío que si antes lo encontrábamos difícil, ahora mucho más, porque estamos viendo las cosas desde adentro", complementa Soto.

Y es que según cuentan, se toparon con un departamento sin estructura, ni direccionamientos claros. A eso se sumó la salida del anterior director de la Corporación de Deportes de la Municipalidad de Valparaíso, entidad que está siendo investigada por los movimientos anómalos que se habrían realizado en la administración saliente.

Es por ello que dicha organización se encuentra paralizada hoy en día, pero la idea es reactivarla en el corto plazo, aunque haciendo que trabaje en forma conjunta con el departamento de deportes, lo que no sucedía antes.

"Es nuestro financiamiento directo y lo necesitamos a mitad de año", comenta Álvarez, agregando que "dentro de nuestro programa, hemos analizado que estos primeros seis meses son de normalización antes de poder ejecutar cualquier proyecto. Una vez que normalicemos podemos apuntar más arriba, pero hay un desorden tremendo. Si dejaste de hacer tareas durante ocho años, es imposible creer que está todo bien".

Primeros pasos

Una de las primeras medidas adoptadas por Cristián Álvarez y Joel Soto se relaciona directamente con los auditorios municipales, donde abundaba la desprolijidad.

"Generamos un manual de usos y procedimientos, para saber a quién le estamos destinando la cancha, cuánto se está cobrando, en qué horario, qué organización, si es con fines de lucro o no, como para determinar si es que debe pagar, porque los auditorios también tienen que ser sustentables. Antes no había ningún tipo de control, entonces cómo ibas a exigir algo. Y los administradores no tienen la culpa, porque ellos hacían lo que creían correcto. Hoy unificamos criterios con ese manual", explica Álvarez.

De todas formas, ambos son conscientes del estado de abandono en que se encuentran los auditorios debido a las malas gestiones, salvo quizá por el recientemente reinaugurado Osmán Pérez Freire.

Frente a las críticas que surgieron hacia esa nueva cancha de pasto sintético, tanto Álvarez como Soto despejan los cuestionamientos.

"Mucho se habló de ese tema, pero había intereses creados. Pedimos los antecedentes y todo estaba de acuerdo a lo proyectado, no hay ninguna irregularidad", asegura el expuntero wanderino, añadiendo que "tuvimos una reunión con personas de la asociación, donde había grandes críticos, no todos, eran dos personas, y porque tenían el contacto con otro proveedor de pasto, y él fue el que estaba asesorándolos y generando todo el ruido... Ahora todos dicen que la cancha está buena".

Otro aspecto en el que ya trabajan es en hacer que Valparaíso obtenga réditos de las actividades deportivas que las productoras realizan en la ciudad.

"Esas actividades tienen que dejar algo monetario en Valparaíso. Pero eso no está regulado, entonces no podemos exigir nada", reconoce Álvarez. Pese a ello han tenido avances, logrando ciertos tipos de canjes para que las empresas donen implementos deportivos a la Municipalidad, y que los eventos también tengan cupos abiertos -en lo posible gratuitos- para un porcentaje importante de porteños que quieran participar.

"Creen que la municipalidad es mero trámite y eso tiene que cambiar. Hay que mejorar la fórmula", añade Soto.

Otra prioridad en su gestión será que Esval mantenga el comodato que existía en el tranque La Luz para el desarrollo de deportes náuticos como el remo y el canotaje. Al respecto, Álvarez es claro. "No lo podemos perder. Es de suma importancia contar con ese recurso, tenemos que luchar por eso", cerró el nuevo director de deportes porteño.

"Hay un desorden tremendo. Si dejaste de hacer tareas por ocho años, es imposible creer que está todo bien".

Cristián Álvarez, Director del departamento de deportes del municipio porteño"

"(Las productoras) creen que la municipalidad es mero trámite y eso tiene que cambiar. Hay que mejorar la fórmula".

Joel Soto, Asesor de deportes"

años tiene el porteño Cristián Álvarez, mientras que el exwanderino Joel Soto tiene 34 años. 27

mes en el cargo llevan ambos, ya que recién asumieron a principios de febrero de este año. 1