Cristián Rodríguez F.

Luego de años de incertidumbre y dificultades presupuestarias, que incluso llevaron a la instalación de banderas y globos negros en la zona, el Ministerio de Obras Públicas hizo entrega del terreno a la empresa -Sacyr-Somague- que construirá el Hospital Biprovincial Quillota-Petorca, que estará emplazado en la comuna quillotana y cuya inversión alcanza los 114 mil millones de pesos.

Hasta el lugar llegó el ministro Alberto Undurraga, quien precisó que el recinto estará terminado en mayo de 2020, para quedar totalmente operativo en 2021. La actividad también contó con la presencia de la subsecretaria de Redes Asistenciales del Ministerio de Salud (Minsal), Gisela Alarcón, quien ratificó que, además de este hospital, el de Marga Marga y San Antonio quedarán en construcción al término de Gobierno, mientras que la primera etapa del Gustavo Fricke, de Viña del Mar, concluirá en diciembre próximo.

- El Biprovincial debió ser reevaluado por el Ministerio de Desarrollo Social (Mideso), la licitación del de Marga Marga se declaró desierta y la Contraloría no tomó razón de la adjudicación del de San Antonio. ¿Qué cambios se adoptaron para que queden en construcción antes de 2018?

- Para lograr eso se modificaron las bases de licitación, lo que permite que haya una mayor gestión y control desde los servicios de salud hacia las empresas oferentes. También hemos instalado en la División de Inversiones una unidad especializada para que acompañe, guíe y se preocupe de todos los temas de las licitaciones, de modo que no sólo el Hospital de Marga Marga, sino que todos los hospitales que hemos comprometido con una relicitación, si es que no ocurre nada distinto a lo que está programado, queden licitados, adjudicados y en construcción al término de este Gobierno.

- El de Marga Marga pareciera ser el más complejo, con una segunda licitación que recién se inició.

- Tenemos previsto abrir las ofertas el 9 de mayo. Esperamos que ese proceso sea bastante más rápido que el anterior, más expedito, y esperamos no tener dificultades.

- ¿Qué ocurre con los que la Contraloría no tomó razón, como el de San Antonio?

- Las mismas estrategias que le acabo de señalar, que están beneficiando al de Marga Marga, fueron inicialmente desarrolladas para los hospitales que sufrieron el revés en la Contraloría. Además, se ha hecho un trabajo en conjunto con la Contraloría, porque ellos mismos han generado espacios de capacitación con los equipos de los servicios de salud. Pero también es necesario hacer un llamado a las empresas que hoy se presentan en las licitaciones.

- ¿En qué sentido?

- Nosotros requerimos que esas empresas también presenten toda la documentación que se requiere, dificultad que hubo en los procesos anteriores. Ahora, es cierto que con estas nuevas bases los servicios de salud están teniendo mayores herramientas de gestión para poder obligar a que eso ocurra.

- Algunos parlamentarios, sobre todo de oposición, han planteado que los únicos hospitales que han tenido problemas son los que tramita el Minsal, no así los del MOP.

- Nosotros con el MOP hemos trabajado en forma muy fluida. Los sistemas de licitación y adjudicación tienen algunas diferencias respecto de los nuestros. Pero más allá de eso, yo diría que cuando miramos los procesos de uno y otro ministerio, hay ventajas y beneficios en ambos. Y para eso estamos trabajando en una nueva institucionalidad.

- ¿Qué es lo que se busca?

- Vamos a dejar propuestas para construir una institucionalidad distinta como Estado, para que la preocupación por la infraestructura sanitaria de Chile en el ámbito público, por lo menos, sea asegurada en el largo plazo. Ahí creemos que tienen que trabajar en forma conjunta, a lo menos, el Minsal, MOP y Mideso. Es un trabajo integrado. No creemos en esto de que sea el MOP o el Minsal. El Estado es quien debe hacerse cargo. Pero esta comparación es odiosa, no tiene ningún sentido y no construye nada.

- Se ha dicho que una futura preocupación será cómo se logrará dotar a los hospitales de personal. ¿Cómo se ha estado trabajando?

- Toda vez que se realiza un nuevo proyecto se hace un estudio preinversional. Ese estudio tiene un módulo de recursos humanos, que a su vez se adecúa a la cartera de prestaciones que ese nuevo hospital va a producir. Eso genera una brecha de recursos humanos. No sólo de médicos, sino que también de enfermeras, técnicos y todo el equipo de salud. Por lo tanto, cuando se autoriza la creación de un nuevo hospital, también se está autorizando esa cantidad de cargos.

- La duda es si existen o no esos profesionales en el país...

- El que existan los cargos no necesariamente nos señala que existan las personas. Para eso hemos generado una serie de estrategias que permiten fortalecer la permanencia del recurso humano en el sistema público de salud. Para lo que son los especialistas, médicos y odontólogos, mil nuevos médicos en formación por año, cuya meta está cumplida en un 73%. Estamos mejorando las condiciones para que también especialistas extranjeros que demuestren su calidad y programa realizado fuera de Chile, puedan también acreditarse vía Conasem y no Eunacom. No se trata de sólo construir hospitales que luego no se puedan poner en marcha, sino que también pensar en la dotación, el nuevo equipamiento y todo lo que eso conlleva.

Luego que se diera a conocer que la segunda etapa del Hospital Gustavo Fricke no contaba con recursos para su ejecución, el director del Servicio de Salud Viña del Mar-Quillota (SSVQ), Jorge Ramos, aclaró que dicha fase se encuentra en proceso de revisión de su actual diseño, por lo que sólo una vez que concluya postularán a un financiamiento. "Lo que estamos haciendo ahora es la actualización del diseño. Los recursos nunca están anticipadamente, por tanto, cuando termine vamos a postularlo al presupuesto 2018", precisó el director del SSVQ.

"Se modificaron las bases de licitación, lo que permite que haya una mayor gestión y control desde los servicios de salud hacia las empresas oferentes""