La ciudad y la basura
Todos tenemos un compromiso y responsabilidad con la generación de basura, partiendo por las prácticas de reciclaje domiciliario, pasando por planes de manejo emanados desde quien crea el producto, hasta la gestión de residuos.
El problema de los residuos sólidos es sensible para todos. En un mundo globalizado, donde ya sobrepasamos el 70% de la población mundial viviendo en ciudades, la generación y manejo de las basuras se torna acción prioritaria de municipios y áreas metropolitanas, con diversas experiencias que van instalando gradualmente la sustentabilidad, al evidenciar el impacto individual y colectivo en nuestro medio ambiente. Considerando la responsabilidad pública generada desde el co-habitar un mismo territorio, todos tenemos un compromiso y responsabilidad con la generación de basura, partiendo por las prácticas de reciclaje domiciliario, pasando por planes de manejo emanados desde quien crea el producto, hasta la gestión de residuos, que en Chile es parte de las atribuciones de la autoridad municipal.
En Valparaíso, hace más de un mes la seremi de Salud inició un sumario sanitario por "las malas condiciones de salubridad que registran varios sectores del centro de la ciudad puerto". Se señala que a partir del 2014 las condiciones sanitarias de varias arterias importantes de conectividad y comercio como calle Uruguay, Rawson o Bellavista son focos de riesgos por la acumulación de residuos sanitarios, a lo que se suma el comercio establecido y ambulante, los cuales arrojandesperdicios a las calles sin un control eficiente. Lo interesante del inicio de este proceso, es la posibilidad de acelerar la implementación de un nuevo plan de contingencia para manejar los residuos. La jerarquización de las problemáticas transversales de la ciudad es un imperativo para Valparaíso, para su escala comunal, pero también metropolitana y no cabe duda que el manejo de residuos es prioritario. La autoridad de salud habla de las áreas centrales donde el deterioro ha ido en aumento derivando en una serie de efectos negativos para la calidad de vida de habitantes, turistas y la población que viaja todos los días desde y hacia el centro de la conurbación. Son en estas áreas centrales donde las inadecuadas conductas arraigadas en la población respecto de la recolección de residuos se ven más evidenciadas. La falta de limpieza de los espacios públicos y la carencia de sensibilidad frente a la protección ambiental, se ha traducido en una disposición sistemática de basura en puntos no habilitados como calles y plazas.
Este conflicto, es más evidente, en el centro de la ciudad porque ocurre en los lugares más transitados del plan, sin embargo, se suma al problema de los sectores altos como Montedónico, Playa Ancha, Cuesta Colorada, Cabritería, Rocuant o Placilla, donde los cerros y quebradas, con sus fuertes pendientes y el difícil acceso a sus calles dificultan su recolección. Junto a ello las cuencas se han convertido en micro basurales recibiendo miles de desechos domiciliarios, acumulando toneladas de escombros, claro problema sanitario pero también un anunciado facilitador de nuevos incendios.
Necesitamos crear y fortalecer la conciencia del manejo de residuos sólidos por parte de la población y una fiscalización eficiente, infraestructura especializada, junto con la optimización de rutas de recolección en áreas de difícil acceso por parte del gobierno local, las que además dotarían de accesibilidad - la urbanización- a estas zonas deficitarias. Además, es necesario abordar el problema de manera global, como ocurre en diversas áreas metropolitanas del mundo, generando planes de gestión de residuos sólidos, planes de recuperación natural de las quebradas que han desaparecido bajo viviendas, basura y erosión. Cabe citar que desde 2004 se han realizado una enormidad de estudios, dos de ellos salieron desde universidades de la región y además un plan de control de micro basurales durante la existencia del PRDUV. Existe información y experiencia, lo importante es poder llevarlo a políticas efectivas por parte del gobierno local y regional, porque el problema es urgente y riesgoso no sólo para la población de la comuna, sino de toda el área metropolitana. Cabe recordar que en muchas ciudades del globo, el manejo de basuras, junto al transporte, la energía y los riesgos, está instalado en lo que podríamos llamar una Alcaldía Mayor, oportunidad que se nos presenta ante la próxima aparición de Gobernadores Regionales. Hoy el municipio impulsó un nuevo programa y la primera señal fue nombrar a un nuevo responsable del tema, que tiene una gran desafío en sus manos.
La visión de futuro puede y debe ser esperanzadora ya que a menos de un mes del sumario sanitario las calles de Valparaíso se ven más limpias, al haberse aplicado algunas acciones de limpieza por parte del Municipio. Queda mucho por hacer para recuperar la riqueza natural de la geografía de la ciudad puerto, que aparezcan nuevamente nuestros barrios y quebradas, nuestras plazas y áreas verdes, pero ya teniendo claro que cada uno de nosotros es parte del problema, a la vez que somos parte de la solución.
Marcela Soto y
Alexandra Garin *
* Integrantes Corporación Metropolítica