"Violeta estaría incómoda"
Mi simpatía, mi admiración incluso, no puede estar sino con Violeta Parra, pero henos aquí en otra de las polémicas que nos inventamos los porteños, quizás para descansar un tanto de las discusiones que tanto nos dividen acerca del presente y futuro de la ciudad. Por lo demás, nunca ha sido cierto aquello de que "avenida Pedro Montt como tú no hay otra igual" , porque hace ya rato esa vía se contagió con la decadencia general de la ciudad. Con perdón de uno que otro lugar estimable que permanece en ella, nuestra actual avenida Pedro Montt es una sucesión de farmacias y sangucherías de "completo más bebida a $ 1.000".
Nunca he entendido que los porteños usen Pedro Montt para pasear y no la bellísima y casi siempre desolada avenida Altamirano. Nadie va allí. Nadie pasea junto al elemento más propio de Valparaíso: el mar. ¿Queremos ver realmente el mar los porteños? En la avenida Altamirano no sólo puede verse el mar. Puede tocarse. Te salpica a cada paso que das.
Valparaíso merece y tiene el deber de discutir cosas más importantes que el cambio de nombre de una de sus avenidas. Nuestra muy admirada Violeta estaría posiblemente incómoda con esta nueva querella que divide a los porteños. Ella tenía una mirada triste y larga, bien alejada, creo, de este tipo de disputas.
Agustín
Squella
Premio Nacional de Humanidades