"Para uso de cannabis en adultos habría que tener un tipo de regulación de la tenencia, porte y consumo"
Con motivo de los 20 años del programa "Senda previene en las comunidades", el director nacional del Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda), Patricio Bustos, señaló, durante su paso por Quillota, que la impronta que le quiere dar a su gestión, que comenzó el 7 de febrero de este año, se enfocará "obviamente en la prevención". Pero, agregó, "cuando nos falla la prevención, también preocuparnos de la rehabilitación de las personas, en conjunto con el sector Salud; y lo tercero es la integración social de las personas que han consumido sustancias dañinas para la salud, específicamente alcohol y drogas".
"El énfasis tiene que ver con la participación de las instituciones en la comunidad, segundo la intersectorialidad y las relaciones con juntas de vecinos, colegios, industrias, etc., cuestión que también está presente en las actividades que estamos haciendo. Tercero, el trabajo interinstitucional que tenga que ver con la Subsecretaría de Prevención del Delito, Carabineros y la PDI, para que junto con ellos trabajemos coordinadamente".
- ¿Cómo se ve desde Senda la nueva percepción que hay sobre los daños que provocaría la marihuana, que se han relativizado e incluso se destacan sus beneficios?
-Nosotros somos absolutamente condenatorios de todo tipo de apertura a que se trafique, se promueva, se incentive, se difunda en niños, niñas y adolescentes. Ese es el primer elemento sobre el cual nosotros no nos movemos; creemos que todas las drogas son sustancias dañinas para la salud, pero nuestro énfasis especial está en la prevención en los niños, por eso tenemos materiales que parten desde la más tierna infancia, desde los 3 años, antes de que los niños se escolaricen en la educación formal. Lo segundo es que están en trámite en el Instituto de Salud Pública algunos elementos que podrían tener efectos beneficiosos desde el punto de vista de algunos elementos producto de la cannabis. Y tercero, en el caso de consumo en adultos, nosotros creemos que la mejor fórmula sería algún tipo de regulación de la tenencia, el porte y el consumo, y eso lo estamos planteando con una indicación de Gobierno, modificación de la ley 20.000.
- ¿Esa modificación implica sacar a la marihuana del grupo de las drogas duras?
- Significaría, en primer lugar, abrirse al tema del uso medicinal, pero también cambiar el carácter de droga dura, porque como decía un fiscal a cargo, hay que desmarihuanizar el tema de la droga en Chile. Existen muchas puertas de entradas, la principal, desde el punto de vista de la masividad, seguramente es el alcohol, que es una droga legal, por lo tanto, hay que pensar en esto no sólo en términos de clasificación, sino en términos de impacto social y de cuándo el uso de esta sustancia puede ser disruptivo desde el punto de vista de las relaciones familiares, sociales, escolarización, etc. Por otra parte, tenemos el gran problema del incremento en la circulación de drogas sintéticas, la más conocida es el éxtasis, pero hay decenas que están en circulación, y el abuso que se hace de drogas legales, especialmente sedantes, que se están vendiendo incluso en algunas ferias en Chile.
Discrepancias
- ¿Cómo monitorean desde Senda la discusión pública sobre la marihuana, con políticos como el expresidente Lagos que planteaba legalizarla, por ejemplo?
- Estamos seguros de que todos los mensajes de salud pública son contradictorios con muchas opiniones y obviamente que confunden a las personas. Por eso nosotros creemos tener el liderazgo técnico en una sociedad democrática en la cual puede haber muchas opiniones, pero nuestro primer mensaje es clarísimo: las drogas y el alcohol hacen mal a la salud. Segundo, si es que consume, ojalá que no lo haga en edad infantil o juvenil, y vamos a colocar todas las barreras para eso. Tercero, están las políticas de reducción de daños y un muy buen ejemplo de esto, y que ha dado buen resultado, es el tema del consumo del tabaco en Chile: se coloca restricción al consumo en lugares, se establece limitación de publicidad, se aumentan los precios, entonces una persona que no consume en la oficina después va a su casa y hay una cultura preventiva que se instala, que es nuestro objetivo, en la cual ya la pareja y el niño le dicen "anda a fumar al balcón o al patio", es decir se instala una cultura preventiva en la sociedad. Cuando eso falla hay que actuar con políticas de reducción de daños, y hay que tratar de que en las personas no se produzca un incremento del consumo que pueda llevar a un deterioro de la salud física, mental, de la vida intrafamiliar o incluso eventualmente abriendo la posibilidad de que bajo efectos de drogas y alcohol se cometan delitos.
Políticas públicas
- ¿Esta discusión pública en torno a la marihuana influye a la hora de diseñar programas y políticas públicas?
- Nosotros nos juntamos con todos, hemos tenido reuniones con las sociedades científicas de Neurología, de Pediatría, para escuchar las opiniones de ellos, que nosotros compartimos, respecto al daño que esto puede producir en niños, niñas y adolescentes, pero también nos reunimos con aquellas agrupaciones que tratan de abrir espacios al uso medicinal de alguna parte de alguna sustancia, y también, por supuesto, coordinándonos con todos los parlamentarios de todos los colores políticos y de todas las regiones de Chile, que han ido a conversar con nosotros para ver cómo se construye una política pública que garantice algunas cosas como la salud de la población, y en caso que a pesar de nuestros mensajes la gente consuma, tengan posibilidades de rehabilitación y también de integración social cuando salgan del problema.
- ¿Cuándo se ingresaría al Congreso esa indicación a la ley 20.000?
- No sabemos, es algo que estamos coordinando con el Ministerio de Salud, con el Ministerio del Interior y por supuesto, conversando también con los parlamentarios de distintos colores políticos.
- ¿Hay una meta de ingresarla durante este Gobierno, al menos?
- Está el propósito de considerar la posibilidad. No es una decisión tomada, pero sí se está construyendo un sustento técnico para el cual aportamos nosotros desde el punto de vista de Senda, pero también considerando las instancias políticas de decisión.
Ley emilia
- ¿Cómo evalúa el funcionamiento y los resultados que ha tenido la ley Emilia?
- Muy positivo, nosotros tenemos que desde que se implementa primero el tema de tolerancia cero al alcohol con las medidas de detección de alcotest y alcoholemia, y un año más tarde la ley Emilia, cuando se implementan estas nomas, tenemos que, antes de esas medidas, los alcotest en Chile que pasaban a alcoholemia daban positivo en más de 20%. Esto se redujo al 3%, por lo tanto, hay mediciones concretas, pero además hay toda una cultura preventiva que se ha instalado, y hay indicios que entre jóvenes hay mayor disciplina, existe menos el discurso ese de que "con trago manejo mejor", que está instalado en adultos y adultos mayores, mientras que entre los jóvenes se organizan de tal forma que cuando salen a fiestas y celebraciones, uno de ellos no consuma y sea el designado para manejar, así que se ha instalado una cultura preventiva y hay que considerar que no es solamente el tema de conducir bajo los efectos del alcohol, sino que gran parte de los accidentes de tránsito se producen por peatones.
- Pero si bien se han reducido los accidentes menores debido a la ley Emilia, las muertes no bajan.
- Claro, porque a veces basta un accidente masivo para que esto se complique, por eso es tan importante que estas acciones preventivas tengan difusión como para que los peatones y conductores que son detenidos para fiscalizarlos lo vean como un elemento positivo, cuestión que afortunadamente se da en la gran mayoría de los casos. Pero lo principal no es el control en la carretera ni por Senda, sino dentro de las familias, para que se evite el consumo de alcohol cuando las personas van a conducir.
"Nuestro énfasis especial está en la prevención en los niños, por eso tenemos materiales que parten desde la más tierna infancia, desde los 3 años, antes que los niños se escolaricen en la educación formal"."
"Estamos seguros de que todos los mensajes de salud pública son contradictorios con muchas opiniones y obviamente que confunden a las personas". "Nuestro primer mensaje es clarísimo: las drogas y el alcohol hacen mal a la salud. Segundo, si es que consume, ojalá que no lo haga en edad infantil o juvenil, y vamos a colocar todas las barreras para eso" ."