Como una manera de hacer frente a los robos de cajeros automáticos por el método de saturación de gas, dos ingenieros de la ciudad de Valparaíso han desarrollado un innovador dispositivo que se instala en el interior del gabinete del cajero automático, y que de manera simple podría poner atajo a este tipo de acción delictual que desplazó al uso del oxicorte en este tipo de hechos.

El sistema funciona emitiendo una chispa continua cada 1 segundo que enciende el gas apenas se introduce en el gabinete, impidiendo que éste se acumule, explote y haga reventar el cajero y las instalaciones. Así se inhibe el robo y los daños colaterales de la explosión.

Entre sus ventajas, se encuentra que este dispositivo está siempre activo, (ya que depende de sensores), por lo que su tiempo de reacción es inmediato. Además cuenta con cuatro terminales que emiten chispas, lo que cubre todo el volumen interno, brindando gran cobertura ya que percibe gas inyectado por diversas zonas. Se alimenta de 220 volts y cuenta con una batería de respaldo en caso de corte de energía.

Desde su implementación a principios de este año, ya se han realizado varias pruebas simuladas, utilizando un tambor como gabinete e instalando el dispositivo en su interior, para luego inyectar gas por una abertura. Y los resultados han sido concluyentes: el dispositivo se enciende inmediatamente sin explotar.

Otra de las ventajas es que está construido con componentes certificados, lo que implica confiabilidad en su funcionamiento. Los dos ingenieros creadores de este dispositivo -uno electrónico y el otro comercial-, son oriundos de la quinta región, y han unido sus experiencias en sus empresas de servicios e innovación en el ámbito del control automático e informativo.

"Hoy podemos contar con una solución 100% terminada y operativa, y a un costo muy razonable", asegura Víctor Tapia, ingeniero comercial y uno de los creadores del dispositivo.