La desafección de la ciudadanía con la política se explica por la tendencia de algunos partidos a priorizar mecanismos o encuestas, en vez de convicciones y propuestas.
En este escenario, es destacable que aparezcan coincidencias desde mundos políticos distintos, en temas que afectan a la ciudadanía como el transporte público.
El ex Presidente Piñera presentó sus lineamientos para mejorar Transantiago basados en reforzar el Metro, los trenes y tranvías, dejando a los buses como alimentadores. Algo similar propuso el ex Presidente Lagos hace meses en un documento programático que detalla el trazado de 16 líneas de Metro y nuevas estaciones con servicios y espacios públicos.
Los beneficios de esta propuesta son enormes. La mitad de los capitalinos podrá vivir a cinco cuadras de una estación, se favorecerán modos alternativos como la caminata o la bicicleta y la ciudad será más equitativa e integrada.
Pero este esfuerzo no puede limitarse a Santiago. Esto entendió el ex Presidente Lagos desde el inicio y por ello formuló propuestas similares para 10 capitales regionales, recogiendo iniciativas de organismos públicos y entidades locales con las cuales conversó como universidades, colegios profesionales o agrupaciones ciudadanas.
En el caso del Gran Valparaíso se concluyó que era clave extender el Merval con tres nuevas líneas que suman 12,5 kilómetros y 9 estaciones, que permitan la combinación de distintos modos de transporte. En Viña del Mar se propuso una línea subterránea bajo la avenida Libertad, que luego seguiría hasta Reñaca Alto, ordenando el tráfico en el área de centros comerciales del distrito 15 Norte.
En la ciudad de Valparaíso se tomó la buena idea del Colegio de Arquitectos de desviar el trazado del metro por Pedro Montt de forma subterránea, para liberar al borde costero de la barrera ferroviaria, abriéndolo como un gran espacio público, como ocurrió en su gobierno cuando se transformó en paseo el antiguo y abandonado muelle Barón.
También se propuso extender el Merval hasta Calera y Quillota y se tomó la idea de la corporación "Metropolítica" para renovar la Avenida Argentina, creando un gran boulevard arbolado y un barrio cívico para el Congreso, de la calidad urbana que presentan los otros poderes del Estado en Santiago. Por último, se propusieron teleféricos del tipo "Metro-Cable" para acceder a los cerros La Cruz y Playa Ancha sector Montedónico, ambos afectados por incendios recurrentes.
Pensamos que debemos insistir en estas ideas si queremos abordar en serio los enormes desafíos que presenta el área metropolitana del Gran Valparaíso en materia de movilidad, desarrollo humano y recuperación patrimonial.
Por esta razón, Ricardo Lagos lanzó el centro "Piensa Chile", junto a sus voceros programáticos y más de 80 colaboradores en todo el país. Ellos darán continuidad al trabajo de contenidos, al margen de las campañas, pero haciendo aportes que puedan enriquecer dicho debate como ha ocurrido con el transporte urbano.
Pensar en propuestas no es un asunto de elites o tecnócratas, como algunos lo quieren presentar. Es un complemento fundamental para revalorizar la política en su sentido más profundo: servir de puente para canalizar los sueños y aspiraciones de las personas. Para mejorar su calidad de vida y para que todos podamos vivir en ciudades más bellas, amables y equitativas.
Ivan Poduje
Equipo Ciudad, Piensa Chile