El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó ayer que el temporal que afectó el fin de semana pasado a la zona norte del país causó daños en algunos de los cuestionarios del Censo 2017 de cuatro comunas de la Región de Atacama.

El organismo detalló que este inconveniente se registró en Copiapó, Tierra Amarilla, Diego de Almagro y Chañaral. Indicó que el daño dificulta la lectura óptica de algunos de los formularios para su posterior transformación en una base de datos.

"Cabe destacar que posterior a la jornada censal del 19 de abril y previo a esta situación de catástrofe, los equipos de trabajo coordinados por el INE habían digitado los datos contenidos en las Hojas Resumen C2 y C3 de las comunas mencionadas y, por tanto, el instituto cuenta con información agregada de cada una de las viviendas censadas el pasado 19 de abril", indicó el INE a través de un comunicado.

El instituto precisó que la población de esas cuatro comunas equivale al 60% de las viviendas totales de la Región de Atacama, por lo que no descartó realizar un nuevo levantamiento de la información. Esta decisión se informará "oportunamente" cuando la situación producto de los aluviones se normalice, dijo.

De todas formas, remarcó que "esta situación no altera mayormente la planificación post censal, ya que los resultados preliminares, con el total de población y viviendas a nivel país, se mantienen para agosto de este año, tal como estaba originalmente programado. Asimismo, cada una de las etapas post censales consideradas seguirá su curso normal".La entidad explicó que este material se dañó "en el marco de la etapa post censal conocida como 'reversa', que consiste en el ordenamiento de los documentos para luego ser trasladados a Santiago, donde serán digitalizados por una firma especializada".

Estos cuestionarios se encontraban en una bodega industrial que se inundó con agua y barro producto de las fuertes lluvias.

Tras regresar de su gira por Asia, la Presidenta Michelle Bachelet se reunió ayer con sus ministros para analizar la situación en el norte tras las fuertes lluvias, instancia en la que destacó la "rapidez" con que se ha actuado para enfrentar la emergencia.

Por más de nueve horas fue interrogado ayer el ex comandante en jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, en la Brigada de Derechos Humanos de la PDI, por el caso de Nicolás Barrantes, que denunció torturas. Según la acusación, Barrantes habría sido víctima de torturas por parte de Cheyre en 1973, cuando tenía 17 años. Su hermano Marcos es una de las 15 víctimas de la Caravana de la Muerte, en La Serena. El ministro Vicente Hormazábal, de la Corte de Apelaciones de La Serena y quien encabezó la diligencia de ayer, señaló que el oficial en retiro se declaró inocente de las imputaciones. El abogado querellante, Cristián Cruz, dijo que "la víctima reconoce a Cheyre en su interrogatorio y es concordante con el rol de jefe de inteligencia que tenía en ese momento".