Así nos quedemos más que solos
Postergar la elección de intendentes, responsabilizando de ello a la candidata DC, sólo acrecienta el descrédito oficialista.
El no tan sorpresivo anuncio de los presidentes del PS, PPD y PRSD de no apoyar la implementación para este año de la elección de intendentes (los nuevos gobernadores regionales), bajo el argumento espúreo de que la candidatura presidencial e intenciones de ir a primera vuelta de la DC Carolina Goic echa por tierra cualquier posibilidad de abanderados de consenso en cada una de las regiones, fue una dura bofetada a los afanes descentralizadores de buena parte del país, como también a las promesas y anhelos manifestados por la Presidenta Michelle Bachelet, precisamente en las páginas de este diario, en entrevista concedida a comienzos del presente año.
Aún cuando el argumento formal es más bien administrativo (el rechazo de la Comisión de Constitución del Senado a los cambios hechos en la Cámara Baja al proyecto de traspasa competencias), el factor subyacente es, a todas luces, una oscura negociación electoral, que más tiene que ver con aquella pulseada en torno a la lista única o listas separadas en la carrera parlamentaria, y el claro pánico a ceder los nuevos cargos regionales a la actual oposición o, lo que sería peor, a las nuevas fuerzas que han comenzado a asomarse en el horizonte político nacional.
Dura bofetada fue también al liderazgo político del candidato presidencial oficialista, Alejandro Guillier, quien ha tenido el tema de la descentralización como piedra basal de su carrera política desde el escaño de senador por Antofagasta. Incluso esta vez -de manera desafiante y contra toda lógica timorata- anunció que votará a favor del proyecto, "así me quede solo en el Senado".
Desde el Norte, donde se encontraba el presidente de la Fundación Chile Descentralizado... Desarrollado, Heinrich von Baer, la entidad emitió un duro comunicado acusando a los partidos en cuestión de secuestrar la reforma en pos de sus intereses. "Una reforma de esta importancia no puede estar subordinada a los cálculos electorales de individuos, partidos o coaliciones. Los dirigentes políticos de los partidos Radical, Socialista y Por la Democracia le hacen un flaco favor al país y a sus propios militantes y simpatizantes al intentar posponer la fecha de esta ansiada elección popular", informó.
El bajo nivel de sinceramiento respecto de lo que muchos parlamentarios en privado reconocen como un "mal proyecto" no se condice con su discurso público de empoderamiento a las regiones, las mismas que ellos representan, pero que suelen utilizar como laboratorio, campo de experimentos o escenario de pagos de favores para tinterillos de la política local que han terminado por descarrillar lo que pudo (y debió) ser un gobierno regional de excelencia en una zona tremendamente castigada como Valparaíso.