Silvio Caiozzi vuelve al cine de ficción con "la aventura más loca" de su carrera
CINE. La última vez que incursionó en el género fue con "Cachimba" (2004). Su nueva apuesta se titula "Y de pronto el amanecer" que se estrenará el 19 de octubre.
Silvio Caiozzi es uno de los directores fundamentales del cine chileno. En su currículum carga con títulos como "Julio comienza en julio" (1979), "La luna en el espejo" (1990) y "Cachimba" (2004). Precisamente es desde ésta última que el cineasta no incursionaba en la ficción.
Racha de 13 años que finalizará el próximo 19 de octubre cuando estrene "Y de pronto el amanecer". "Siempre me he tomado mi tiempo, porque la verdad es que yo tengo que estar muy enamorado de un tema, de personajes principalmente, de mundos para lanzarme a lo que realmente significa hacer una película que es un riesgo enorme y un trabajo gigantesco", comenta el realizador quien estuvo el viernes de visita en Viña del Mar (ver recuadro).
"Pero -continúa-, cuando uno se apasiona de repente los riesgos y todo eso desaparece. Eso es lo que me ha pasado y hago una aventura totalmente loca como es esta película".
Dos mundos
Aunque no es grandilocuente en su gestos, su voz delata que está entusiasmado con esta nueva obra que trata sobre un escritor que cuando niño y joven "era un muchacho lleno de vida, muy observador. Un artista, lanzado a la vida, capaz de pelear contra el mundo por la novia. Y por un gran susto, él se ve obligado a esconderse para salvar su vida en realidad y huye a Santiago para esconderse en el anonimato de Santiago", cuenta el director.
Sin embargo, "no sólo se esconde sino que abandona todo lo que él era. No se conecta nunca más con sus amigos, nunca más con su vida, nunca más con sus formas de ser y se transforma en el típico personaje acomodado, gris, casado con una mujer que lo ha ligado a distintos periodistas para que le den peguitas por ahí. Entonces toda la vida ha sido un ser que está acomodado, pero terriblemente frustrado", detalla.
El personaje, encarnado por Julio Jung, después de 50 años vuelve al lugar que lo vio nacer para escribir "unas historias de fin de mundo para una revista". Pero, "al llegar ahí y empezar a vislumbrar estas casas que están derrumbadas y recordar su pasado, él comienza a escribir estas anécdotas pasadas inspiradas en su propio pasado", cuenta.
Es así como la película comienza con este regreso y se narra en dos momentos: el presente y lo que se va imaginando. "Entonces tú vas viendo la película en hiperrealismo del presente con esta imagenería basada en su pasado. Lo que nosotros vemos como espectador es la imagenería del escritor, es un pasado fantasioso, no es un flashback".
-¿Implicó cambios de temperatura de color?
-Claro, hay un tratramiento fotográfico un poco distinto a lo que él se imagina. En postproducción usé un tipo de filtro que le da una pequeña diferencia, leve. Pero efectivamente la puesta en escena es más fantasiosa.
Un juego que, reconoce, fue "lo más difícil del mundo. Era nuestro desafío máximo y cuando terminamos el guión nos dimos cuenta que lo habíamos logrado". También se la han mostrado a pequeños grupos de personas y, según dice, "nadie de enreda, nadie se pierde porque el peligro era que la gente se perdiera... a ninguna persona le ha pasado eso".
Película compleja
Caiozzi repite cada cierto tiempo que "ésta es la aventura más loca que he hecho". ¿La razón? "Es la película más grande, con mayor cantidad de actores, filmada en Chiloé, con todo lo que significa estar allá. Estuvimos seis meses filmando", relata, agregando que "fue muy, muy dura la filmación. Sabíamos desde un comienzo que era una película compleja, pero me apasionaron tanto esas historias, esos mundos, esos personajes que me dio lo mismo". Y sigue: "Es una película enorme, enorme, maravillosa, porque retrata un mundo espectacular, con una cantidad de personajes muy fantásticos".
Todo partió cuando comenzó a leer y conoció al escritor Jaime Casas. "Yo me enamoré mucho de su obra, de sus personajes, de sus historias, de ese mundo", confiesa el cineasta, que asegura que a pesar de ello "no encontré una línea argumental central".
Ambos se pusieron a pensar en una y dieron con la idea de este escritor viejo que vuelve a sus orígenes. "Ésa es la línea central que va a unir todos estos mundos descritos muchos de ellos en sus obras, otros son inventados, pero la mayoría están descritos en sus diferentes obras".
Desde esta perspectiva, dice que es "una fórmula bien particular, no la había hecho antes", pues si bien había adaptado novelas en películas como "Coronación" (2000) y la ya mencionda "Cachimba", no había realizado una "referida a distintos personajes de distintas obras, de distintas novelas, de distintos cuentos".
Cuenta que desde un principio trabajó con Casas el guión y que fue pensando siempre para que se convirtiera en una película. "No es que sea una adaptación de algo. De hecho el guión es original, el nudo central, lo que sucede es totalmente original. Lo que está inspirado son algunos personajes y algunas situaciones de este mundo", explica.
-¿El resultado?
-Maravilloso. Estoy fascinado con la película.
El mejor trabajo
Otra de las particularidades que tiene su nueva apuesta en la ficción es la gran cantidad de actores con los que trabaja. Además de Jung -con el que ya había trabajado en sus dos últimas películas-, el elenco está compuesto, entre otros, por Sergio Hernández, Anita Reeves, Pablo Schwarz, Magdalena Müller, Nelson Brodt, Aldo Parodi y Arnaldo Berríos (ver nota relacionada).
"Estamos hablando de un casting de mucha cantidad de actores de primer nivel", asegura el cineasta. Cuenta que a medida que iba escribiendo el guión junto a Casas, iba imaginando el actor que calzara mejor con el personaje. "Diría que en el 90% de los casos que imaginé funcionaron. Hay algunos actores que no podían por estar comprometido en otras cosas y yo dije 'pucha qué pena, pero bueno'. Al final de cuentas quedé feliz con el casting", manifiesta, asegurando que a ninguno los eligió por amistad o cercanía, o porque los conociese, sino por su capacidad.
En este sentido, dice sentir que "quizás sea una de las obras en que he participado donde se ha logrado un mayor nivel de actuación, en general". "El nivel actoral es brutal. Muchas veces, mucho más alto de lo que yo podía soñar, yo estoy muy sorprendido del nivel alcanzado", destaca. Y de inmediato entrega una teoría al respecto: "Creo que es porque este mundo tan particular y esos personajes tan maravillosos nos conquistó a todos. Entonces todos dieron lo máximo".
LA película camina
-¿Y está nervioso o ansioso por el estreno?
-Yo te diría que estoy como un papá chocho con el niñito que empezó a caminar -ríe-. Yo veo que el niñito camina, porque tiene vida propia y ya eso es la felicidad máxima. Cuando tú has logrado crear algo que sientes que te satisface y, sobre todo, que ves que tiene vida propia, que los personajes están vivos no son acartonados, que ves que todo ese mundo es muy particular... Las veces que hemos dado la película a pequeños grupos de gente, yo veo que es una obra que los atrapa, los va agarrando cada vez más, se van metiendo en ese mundo particular. Entonces, me tiene muy, muy contento.
-¿Qué significa para ud. regresar a la ficción?
-Siempre mi fascinación está en la ficción. Creo que lo que más me gusta de la ficción es el desafío que significa crear un mundo de mentira completo, pero una gran mentira, y lograr que eso se transforme, a veces, es una verdad más grande que una verdad misma. Ése es el gran desafío de la ficción, que de repente el espectador lo siente más cercano, más verdadero y eso es lo que yo creo que es más difícil y el desafío más atrayente que tiene la ficción para mí.
"Fue muy, muy dura la filmación. Sabíamos desde un comienzo que era una película compleja, pero me apasionaron tanto esas historias, esos mundos, esos personajes que me dio lo mismo"
Silvio Caiozzi, Sobre su nueva película "Y de pronto el amanecer""
Reunión con jóvenes talentos
El director Silvio Caiozzi participó en la novena versión de TECNÉ 2017, "Tecnologías que revolucionan los contenidos". El encuentro, que pretende acercar al público a los máximos exponentes de la cultura audiovisual de Chile y Latinoamérica, se realizó en Santiago, Concepción y el viernes pasado en el DuocUC sede Viña del Mar. "Hasta ahora ha sido una hermosa experiencia, me gusta mucho el diálogo con los alumnos. Veo un grupo de jóvenes bien preparados, bien entusiasmados. Eso es lo que más me gusta. Uno nota que no están en otra, como suele decirse, realmente están escuchando y están participando", dijo al respecto.
Realizador considera que actuación de Arnaldo Berríos fue "la mejor de su vida"
Dentro del gran elenco que reunió Silvio Caiozzi para su película se encuentra el actor porteño Aldo Berríos, quien falleció el 15 de enero del 2016. "Arnaldo yo creo que era un genial actor, y quedo con la sensación que esta actuación que hizo para esta película fue la mejor actuación de su vida", asegura el realizador.
El personaje que interpreta es la versión más vieja del rol de Pablo Schwarz, y se está muriendo. "Es un gay que trabaja en un prostíbulo de Chiloé, de mala muerte, pero él es lleno de poesía. Es el que baila, el que canta, el que organiza los shows", describe el cineasta.
Y añade: "Es un personaje muy lindo, porque esa cosa que pareciera superficial e ingenua, no tiene nada de superficial. Es un hombre tremendamente inteligente y capaz de vislumbrar el futuro de un niño -que sería el protagonista, Panchito, Julio Jung joven-. Este personaje lo cobija y lo enseña a imaginar. O sea, el hecho que él se transforme en artista viene de ahí".
"Es muy lindo -continúa- cuando vuelve y lo ve viejito. Y este viejo se da cuenta que este hombre ha perdido toda su vida, y lo interpela con una sabiduría espectacular".