Importante sería saber qué tipo de imagen es la que se tiene en otras latitudes sobre la Región, más allá de la eterna latencia que mantiene Valparaíso en el mundo y, cómo no, la avasalladora postal de nuestros vinos y viñas, hoy totalmente instalada en todo el orbe junto a figuras señeras como a Alexis Sánchez y Pablo Neruda.

¿Acaso nos hemos preguntado qué es lo que queremos priorizar, mostrar y destacar sobre la zona en otros países? ¿Qué idea tendrán en Londres, Nueva York, Bangkok, Tokio o Berlín sobre nuestra cultura, virtudes y productos? ¿Representará Valparaíso para ellos algo más que cerros, mar y uno que otro ascensor? ¿Tendrá algún sentido hablarles de la belleza del cerro Alegre si todavía no consiguen olvidar la patada voladora a la turista austriaca que hizo furor en YouTube? ¿Les importará algo lo de las discusiones y debates que genera el Terminal 2 o el Mall Barón? ¿Sabrán qué diablos es el dique? ¿Querrán que su crucero pare por acá? ¿Estarán conscientes de que el nuevo alcalde, surgido no de los partidos tradicionales, sino que desde los movimientos estudiantiles, ordenó congelar las construcciones en altura e intenta implementar un plan nocturno más seguro a partir de un contralor de la noche inspirado en la experiencia holandesa de Ámsterdam?

¿Y qué hay de la Región? ¿Qué conocerán de Viña del Mar, más allá del Festival Internacional de la Canción y sus playas? ¿Tendrán alguna noción del microclima de Olmué y de las maravillas de Limache, Quillota y sus alrededores? ¿Alguien sospechará que una zona como ésta, con la capital, el aeropuerto, centros de esquí y la cordillera a menos de dos horas de viaje, es por lejos lo más cercano al paraíso que existe en estos lares? Agreguémosle a ello que Isla de Pascua y el Archipiélago Juan Fernández forman parte de esta región, que el casco histórico de Valparaíso fue nombrado Patrimonio Cultural por la Unesco, que Casablanca es el nuevo epicentro de los mejores vinos a nivel mundial, que la profusión cultural, las bandas y las editoriales son de una efervescencia pocas veces vista. Que los startups y la industria creativa comienzan a generar un registro importantísimo, que el propio Neruda, Rubén Darío, Gonzalo Rojas y tantos otros sucumbieron ante sus escaleras sin fin.

Por eso y por mucho más, El Mercurio de Valparaíso pretende poner sobre la mesa la discusión de qué imagen creemos tener como región en todo Chile y en el extranjero, qué imagen queremos proyectar y qué imagen, finalmente, es la que debemos priorizar estratégicamente, no sólo a nivel turístico, sino como el polo de desarrollo, de inversiones y, con todo, la luz continental que este puerto alguna vez llegó a ser.

En los próximos días daremos a conocer esta nueva iniciativa y los socios que nos acompañarán en la aventura.

Cuando en 2008 la Presidenta Bachelet firmó el decreto con que promulgó la reforma previsional, tenía claro que estaba encabezando el cambio más importante a ese sistema desde la década de los 80, cuando fueron creadas las AFP. Por eso aseguró entonces con la iniciativa "ganaba Chile en su conjunto". En la ocasión, resaltó que con ésta se beneficiarían los cientos de miles de pensionados que recibirían una pensión más digna y los que comenzarían a disponer de una que antes no tenían, en lo que significaba una muestra de que había voluntad de valorar y reconocer el esfuerzo de sus vidas.

Era el inicio de una nueva etapa en el ámbito previsional, necesario y fundamental porque para que una democracia sea sólida, es indispensable que exista un conjunto de derechos sociales garantizados. Así se ponía en marcha un Sistema de Pensiones Solidarias que marcó un hito y se fundó sobre esa perspectiva de derechos sociales, llamada a entregar tranquilidad y mejor calidad de vida a los ciudadanos.

Pero como en todo ámbito, las expectativas tienden a subir y la realidad cambia. Lo que entonces era celebrado -y lo sigue siendo por el cambio drástico que significó- se empezó a hacer cada vez más insuficiente. Por eso, en su última cuenta pública, la Presidenta demostró que el tema también es prioritario para su segunda administración.

Ante el Congreso Pleno, subrayó que tal como en 2008 se dio una respuesta a miles de compatriotas, hoy se planea incorporar un sistema de ahorro colectivo que complemente el esfuerzo individual y anunció que en julio será enviado el proyecto de ley para reforzar el pilar contributivo. Al respecto, adelantó que habrá una nueva cotización de 5%, con cargo al empleador, que permitirá la creación de un Sistema de Ahorro Colectivo, donde el 3% irá a una cuenta personal del trabajador y el otro 2% irá a un Seguro de Ahorro Colectivo. Asimismo, precisó que se propondrá crear un organismo público, autónomo y con altas exigencias, que asegure la administración de los recursos. Una vez en funcionamiento, la reforma debiera permitir un aumento inmediato de 20% en las jubilaciones de los pensionados de AFP y, en la medida que el sistema madure, las pensiones de los actuales cotizantes aumentarían 50% en promedio.

Esto se suma al esfuerzo especial y adicional que se hizo reajustando de manera extraordinaria en un 10% la Pensión Básica Solidaria y el Aporte Previsional Solidario.

Corresponde resaltar lo anunciado por nuestra Presidenta y es esperable que las iniciativas encuentren respaldo en el Legislativo, que es donde serán discutidas. Lo cierto es que el Ejecutivo ha dado muestras de que está ocupado del tema previsional. Como IPS, eso nos enorgullece y llena de desafíos, que asumimos con compromiso y alegría. Perfeccionar el sistema previsional es ofrecer un futuro más auspicioso y qué duda cabe de que nadie debiera oponerse a aquello, porque tiene que ver con construir una sociedad más justa, con menos brechas y más amable.

Juan Carlos Tapia

Director regional IPS Valparaíso