"No considero justo el trato que le han dado los wanderinos a David Pizarro"
Agustín Squella se define como "un wanderino más", y aclara que sólo desde esa condición expresa sus opiniones. "Ignoro buena parte de lo que ocurre dentro del club", afirma el académico de la Universidad de Valparaíso, sin embargo, se inflama apenas empieza a analizar el presente caturro.
El tema que hoy divide al Puerto es la figura de David Pizarro, y el abogado no teme tomar partido: "nos lo farreamos".
Para el Premio Nacional de Humanidades 2009, el "Fantasista" es "lo más parecido a Maradona que ha producido el fútbol chileno".
"La comparación con Maradona es dentro de una cancha, se entiende, porque la conducta de uno y otro fuera de ella es muy distinta. ¿De dónde le viene a Pizarro su apodo si no es de su tremenda calidad futbolística y de su enteramente inusual capacidad para crear dentro de una cancha? César Luis Menotti tiene una buena definición para el fútbol: saber crear y aprovechar espacios. Pues bien: Pizarro ha sido genial en eso", se explaya Squella.
-¿Cómo vivió la llegada de David Pizarro a Wanderers en 2015?
- Con mucha ilusión. Hasta me imaginé que luego de ese regreso, y una vez terminada su carrera, él podría interesarse por asumir funciones directivas, aunque eso es muy difícil en la sociedad anónima cerrada que controla el club. ¿Por qué cerrada?, me pregunto hasta hoy. ¿Por qué no abierta? ¿Por qué los accionistas tienen que ser apenas un puñado de personas?
- Usted consideraba que este jugador era distinto al resto de los futbolistas nacionales.
- Muy superior a la media del futbolista chileno, además de franco y directo cuando tenía que opinar sobre la situación de nuestro fútbol y la muy lamentable dirigencia que lo llevó a la corrupción que todos conocemos. A mí me gustan los futbolistas que juegan bien -eso es lo primero-, que sean buenos para la pelota, como suele decirse, pero me gustan aún más aquellos que, cumpliendo con esa condición, son capaces de opinar sin pelos en la lengua sobre el oficio que practican y los intereses que hay en juego, algo que en Chile es mal visto, desde luego, porque inmediatamente lo motejan de jugador conflictivo.
-¿Cuál es su juicio respecto a su paso por el Decano, en lo personal y en lo futbolístico?
- Convengamos en que sus continuas lesiones le impidieron jugar con regularidad y eso nos defraudó a muchos. ¿Cómo evaluar el desempeño futbolístico de un jugador que las más de las veces ni siquiera pudo estar en la banca?
-¿Cree que tenía razón en sus múltiples disputas con la dirigencia del club?
-Habría que analizarlas una a una, pero Pizarro es el tipo de futbolista que no se limita a ponerse los botines y recibir órdenes de un entrenador o a escuchar dócilmente las palabras de un dirigente. Bien sabemos que en Chile los talentos callados, sumisos, políticamente correctos, la tienen mucho más fácil que aquellos que dicen lo que realmente piensan.
-¿De qué manera evalúa la partida de Pizarro? Fue un momento de mucho conflicto para el club.
- La lamenté mucho, desde luego, pero no quedaba más alternativa que respetarla. Wanderers, especialmente sus controladores y dirigentes, deberían meditar no sólo acerca de lo que fue la partida de David Pizarro, sino que también la de no pocos buenos y hasta excelentes jugadores que, si bien no oriundos del club, llegan a éste y no aguantan aquí más de un año o dos. ¿Qué pasa en nuestra institución que no es capaz de tener y retener talento futbolístico?
-¿Cómo se sintió cuando lo vio celebrando el título de la "U", con sus hijos vestidos de azul en la cancha?
-Me dolió, por supuesto, pero se trataba de su club en ese momento. El fútbol, como hoy casi todo, se ha transformado en una industria, en una actividad que mueve muchísimo dinero, con predominio de éste por sobre otros aspectos o facetas. La industria del fútbol -como también la de la salud, la previsión, la educación- es solo un síntoma más de ese capitalismo financiero global que tantos avivan hasta que alguna de sus pasadas los perjudica.
-¿Cree que efectivamente se fue "apuñalado" de Valparaíso, como lo manifestó en una entrevista?
-Lo que sí creo es que él fue sincero cuando así lo declaró y, por tanto, me imagino que tuvo fundamento para expresarse de esa manera.
-¿Considera justo el trato que le han dado los wanderinos a Pizarro tras dejar el Puerto?
-No. No lo considero justo. Wanderers anda mal hace ya rato, deportiva y financieramente, y nada mejor para algunos hinchas que expresar su malestar y frustración focalizándola en una sola persona.
- Esta semana un dirigente de la Corporación Santiago Wanderers -sin consultarle a la organización que representa- sacó su foto de la galería de ídolos en la sede. ¿Le parece adecuado?
- Para nada. Está bien que uno que otro hincha nos comportemos de manera poco racional, sobre todo en el estadio, pero un dirigente tiene la vara más alta en cuanto a lo que se debe o no hacer. Por lo demás, sacar la fotografía de Pizarro es uno de esos típicos arrebatos a los que los porteños somos tan aficionados, peleándonos unos con otros en vez de sentarnos a conversar sobre nuestras diferencias. Decimos amar Valparaíso, pero cada cual está enamorado de su particular visión de la ciudad. Decimos también amar a Wanderers y lo que pasa es que todos creemos tener la razón acerca de lo que debe o no hacerse con el club. Si es que queda club.
-¿Piensa que Wanderers y los porteños se "farrearon" a David Pizarro?
- Soy solo un hincha de Wanderers y, como tal, ignoro buena parte de lo que ocurre dentro del club, pero tuve desde el comienzo la sensación de que sí, de que nos lo farreamos, de que no se hizo lo conveniente para dejar a Pizarro donde él quería: el Puerto.
-El pintor Gonzalo Ilabaca, wanderino, aseguró que "sacando a Pizarro de sus vitrinas pierde Wanderers, no Pizarro". ¿Está de acuerdo?
- Gonzalo tiene toda la razón. Desairando a Pizarro, Wanderers no va a conseguir jugar mejor para evitar el descenso a Primera B, que a eso es para lo que llevamos jugando ya durante años: sólo para no descender. ¿Puede haber una meta más mediocre que esa?
- ¿El "Fantasista" está a la altura de otros ídolos caturros? ¿A quién ubica usted en esta suerte de panteón verde?.
- Está perfectamente a la altura de jugadores presentes o que ya partieron, como Jesús Picó, Armando Tobar, Raúl Sánchez, Juanito Olivares, Elías Figueroa, y tantos más.
- Pensando en la trascendencia, ¿qué tan importante es la opinión de los hinchas?
- La opinión de los hinchas es tan volátil como la de los electores: una día aquí y otro día allá. Vea usted como en América Latina, y ahora también con Macron en Francia, no se termina de elegir a un Presidente de la República, a veces por amplia mayoría, y ya a las pocas semanas los mismos que votaron por él pasan a la vereda de enfrente y empiezan a hacerlo objeto de una gran silbatina.
"Viendo jugar a Pizarro me gustaba decir que era lo más parecido a Maradona que había producido el fútbol chileno, dentro de una cancha, se entiende, porque la conducta de uno y otro fuera de ella es muy distinta""
"La industria del fútbol -como también la de la salud, la previsión, la educación- es solo un síntoma más de ese capitalismo financiero global que tantos avivan hasta que alguna de sus pasadas los perjudica""