Pamela Boltei

Han pasado más de dos años desde que la Presidenta Michelle Bachelet designó a Paula Forttes, trabajadora social especializada en gerontología, procesos colaborativos y dirección de servicios sociales y de salud, como directora sociocultural de la Presidencia, cargo que ocupaba hasta entonces su hijo Sebastián Dávalos, pero al cual renunció tras conocerse el denominado "Caso Caval".

Hoy, a poco tiempo de terminar esta gestión, Forttes hace un análisis de lo logrado y de lo que ha costado esta tarea encomendada en un periodo de crisis. Y lo hace el mismo día en que inaugura en Miraflores Alto "Sol Naciente", uno de los últimos jardines comprometidos por el Gobierno en torno a la meta de aumentar la cobertura en educación parvularia, en el marco de la Reforma a la Educación.

"El compromiso con la primera infancia se dio también en cuanto a cobertura y atención preescolar. Integra fue convocado a participar de esta meta de construcción de jardines y salas cuna y hemos concurrido con 25 mil cupos a la meta, que significa 400 jardines infantiles y salas cuna en el país", advierte Forttes.

- Hablando de la etapa preescolar, ¿cómo se puede ir avanzando a la gratuidad universal?

- Esta es una educación gratuita, y la tarea aquí ha sido ir creciendo apuntando hacia la universalidad porque todavía nos falta mucho, vamos a construir 70 mil nuevos cupos en esta administración que sumados a lo anterior llegarán a cerca de los 200 mil; pero todavía falta.

- ¿Qué nuevas metas tienen para este ámbito?

- En el mundo entero se habla de un concepto llamado el piso social, que no es un piso mínimo, es un piso garantizado de derechos que va cambiando de acuerdo al desarrollo. Uno dice 'hoy, con el avance que ha habido, ¿cuál es el nuevo piso social?'. Y yo creo que tiene que ver con la universalización de la educación parvularia, porque está demostrado que no sólo cumple un rol sobre el cuidado a las familias para que ambos miembros puedan trabajar, sino que está focalizado al desarrollo de los niños. Un niño que tiene estimulación temprana está en mejores condiciones que el otro.

- No todas las familias tienen esa opción, pese al desarrollo país...

- Efectivamente, un niño que nace en un matrimonio de padres que leen, que conversan, que tienen vida cultural tiene un acceso a un mundo que claramente le provoca una estimulación distinta que si naciera en una familia con menor capital cultural o los papás salen muy temprano a trabajar y llegan muy tarde, donde no hay acceso a libros, donde no hay acceso a conversaciones, discusiones.

- El último tiempo se ha visto en la agenda pública cómo muchos niños se convierten en adolescentes que delinquen y que terminan cayendo a un sistema tan cuestionado como el Sename.

- Claro, uno cuando mira eso ve el Sename. Pero cuando un niño llega al Sename es porque todo el sistema falló. Falló la familia, falló la educación preescolar, el consultorio. Por eso fortalecer esta etapa es tan importante.

- Otra de las fundaciones del departamento es Chile Cuida, que nació cuando llegó usted. ¿Qué tan difícil es cambiar la forma de tratar a la tercera edad?

- A no ser que nos muramos, lo certero es que vamos a ser viejos. Antes era muy raro llegar a ser muy mayor. Hoy representa un 17% y el 2020 van a ser un 20% de la población los mayores de 60. Hay gente que está superando los 100 años, vive 40 años en la adultez mayor, y hay una parte de la adultez mayor que busca hacer las cosas que no hicieron por estar sacando adelante a su familia, viajar, hacer arte, fotografía, etcétera, y en ese ámbito es tan importante el tema de las pensiones. Pero también hay otra etapa que es la declinación, después de los 80 el deterioro físico es muy notorio, empiezan a aparecer las demencias y específicamente el Alzheimer, que cubre el 70% de las demencias. Viene la sensación del ocaso y de la dependencia, y a medida que aumenta la esperanza de vida -hoy los chilenos hemos superado los 80 años de esperanza de vida y somos el país según la OPS más longevo de América Latina, superando a Uruguay y Cuba- hay más episodios de dependencia, lo que ocurre paralelamente mientras nosotras las mujeres, que históricamente hemos sido las cuidadoras, salimos a trabajar. Es decir, hay una mayor demanda de cuidado y una menor oferta, por lo tanto hay una crisis de cuidado. Ahí nace este programa que busca sentar las bases de un sistema para atender a las personas mayores mejorando su sistema de cuidado y ofreciendo un respiro a la cuidadora, con personas a las que se les capacita a través de Sence, se contratan y trabajan en los domicilios.

- ¿Ya está en regiones?

- A partir de este año entregamos al Ministerio de Desarrollo Social el programa piloteado para que se expanda al país a partir de 2018. El próximo año debieran venir muchas más comunas, aunque no es un proceso tan rápido. Confío en que en esta región, si no es el próximo año, será el que sigue.

- ¿Cómo ve la materialización de reformas que ha mencionado, como al sistema de pensiones, o la de gratuidad universal, si es que cambia el gobierno?

- Garantizar el derecho a la educación no es solo la gratuidad porque sí. Tiene que ver con que tú, yo, el hijo del máximo empresario y el de cualquier obrero puedan entrar al escenario formativo sintiendo que es un derecho, que no se relaciona como un cliente sino que como ciudadano, en una sociedad que acordó que eso era un piso mínimo social. Me pueden decir 'los recursos no alcanzan para todos y hay que saber distribuirlos'... pues bien, yo también creo que hay que darles racionalidad, pero cuando uno ve las ganancias de las Isapres este último trimestre, ¿no es obsceno que no podamos avanzar en materia social? ¿no habrá que mirar la redistribución? Entonces tenemos que avanzar en esto, pero también en las pensiones porque claramente la promesa que se hizo con el modelo de AFP no se cumplió y lo que finalmente impone un trabajador a lo largo de toda su vida no permite llegar a una pensión similar a lo que fue su ingreso. Y, además, hay que darle un componente solidario. La gente va a ir a votar por el proyecto que más le convenza y eso es reimportante porque la gente debe mirar los programas y no sólo las personas, y debe mirar cuál es el país que quiere y cómo lo quiere y si la persona que representa su voto tiene que ver con los valores e intereses de cada uno. Claramente no es lo mismo que gobierne uno a que gobierne otro. El tema de las pensiones ha sido sensible para todas las candidaturas.

- Con proyectos bien diferentes.

- Muy diferentes. Unos más a largo plazo, otros más a corto plazo. Unos abordan el componente solidario, otros no.

- Llegó a esta dirección tras la crisis por la salida del hijo de la Presidenta, Sebastián Dávalos. ¿Se ha superado ese clima?

- Al Gobierno le tocó... primero, había un plan de gobierno muy ambicioso y yo adscribo hasta el último día a ese programa. Le tocó enfrentar un sinfín de situaciones que no eran propias del mismo gobierno, sino que eran transversales y ya está más o menos claro que se ha producido un escenario de interpelación ciudadana sobre situaciones que han caído, en algunos casos, en lo delictual, y en otros, que se contradicen con lo moral y los buenos principios.

- Justamente lo que pasó con el denominado "Caso Caval".

- Sebastián Dávalos ocupaba este cargo, pero la situación del hijo de la Presidenta tiene que ver con un tema del cual está siendo acusada y está en tribunales su señora. Él no tuvo ningún problema como director sociocultural de la Presidencia y, de hecho, se retira para no complicar la institución. Yo recibí una dirección sociocultural que estaba funcionando bien, por lo tanto siendo que el tema tuvo una connotación mucho más comunicacional que lo concreto sobre la situación sociocultural. Las fundaciones siguieron funcionando.

- Hoy, al estar en el último tramo de la carrera, ¿cómo ve su llegada marcada por este caso? Ha sido difícil en estos meses cambiar la dura percepción que se tiene de la clase política y del Gobierno. En la última encuesta Adimark de este mes, la Presidenta Bachelet alcanzó la cifra más alta desde que se destapó el "caso Caval", un 32%.

- Creo que los gobiernos que quieren hacer cambios estructurales van a estar siempre mucho más condicionados a presiones de grupos de interés. La sobredimensión de ciertos casos desde el punto de vista comunicacional puede encontrar explicación en eso. Ahora, sobre lo que ha sido mi desempeño desde el inicio hasta ahora, tengo la sensación que las tareas y objetivos están siendo cumplidas.

- Usted es cercana a la presidenta. De hecho, su departamento está muy cerca de la oficina presidencial. ¿Cómo la ve hoy?

- Yo trabajo con la Presidenta, la estimo y admiro muchísimo, me siento muy orgullosa de trabajar con una mujer con ese nivel de fortaleza y compromiso. No es lo habitual poder trabajar con un jefe que no sólo le reconoce autoridad, sino que lo admira profundamente en su fortaleza y convicción.

- ¿Por qué hace hincapié en la fortaleza?

- Ha sido un periodo difícil. Además ella entró a temas que nadie más le había entrado antes, al tema tributario, al tema constitucional, a asegurar la universalidad en la educación. Y siempre hubo resistencia, pero aquí hubo convicción de lo que quiere y para quien se gobierna. Algo que resume muy bien a la Presidenta es que el centro de la política pública tienen que ser las personas.

"La situación del hijo de la Presidenta tiene que ver con un tema del cual está siendo acusada su señora. Él no tuvo problemas como director sociocultural de la Presidencia. Se retira para no complicar la institución""

"Los gobiernos que quieren hacer cambios van a estar más condicionados a presiones de grupos de interés. La sobredimensión comunicacional de ciertos casos puede encontrar explicación en eso""