Da la pelea: El Club de Boxeo San Roque busca nuevos campeones para Valparaíso
DEPORTES. Lejos de las luces, la popularidad y el dinero de las grandes jornadas de antaño, en la parte alta del Puerto existe un semillero inagotable que trabaja en las dependencias del colegio Jorge Alessandri.
Lejos de Las Vegas, y mientras los apostadores y quienes viven del entretenimiento aún siguen hablando y disfrutando de las millonarias ganancias que entregó el triunfo de Floyd Mayweather sobre Conor McGregor en lo que buscó denominarse como la "Pelea del Siglo", un grupo de hombres, niñas y niños porteños pretende en las dependencias y patios del colegio Jorge Alessandri, en la parte alta del Puerto, rescatar la esencia de una actividad ligada por décadas a Valparaíso.
Son los protagonistas y quienes dan vida al Club de Boxeo San Roque, una institución que se apronta a cumplir cuatro años y que está marcada por el esfuerzo y las ganas de vencer a un destino que en ocasiones se vuelve adverso y que está muy lejos de las luces y los millones que se manejan a nivel internacional.
Marco Pontío, presidente del club de boxeo porteño, aclara de inmediato las distancias con lo vivido hace poco más de una semana en la ciudad más grande del estado de Nevada, en Estados Unidos, explicando que "lo que nosotros practicamos es la disciplina olímpica, que pertenece a la Asociación Internacional de Boxeo Amateur (AIBA)", añadiendo que "el profesionalismo es totalmente aparte y a él se llega cuando uno ve a un chico de buen nivel".
De todas formas, el dirigente reconoce que la transmisión de los combates internacionales "ayuda bastante", más allá que se den en una realidad muy distinta.
"Vienen más chicos a golpearte la puerta del club e interesados en saber lo que hacemos", asume, aunque, en todo momento, reitera que el brillo de aquellas jornadas poco y nada tienen que ver con la versión local y nacional de la disciplina.
Durante la conversación, el tono de las opiniones de Pontío mezclan un evidente orgullo por lo logrado, pero también un cansancio por la escasa ayuda por parte de las autoridades para una actividad que "nació en el Puerto.... su historia tiene un punto de inicio en Valparaíso".
"Acá, ninguna autoridad quiere ayudar al boxeo... imagínate que en Santiago es Carlos Caszely quien está respaldando la carrera de Miguel 'Aguja' González (campeón Latinoamericano Súper Mosca)", se lamenta, aunque de inmediato agrega que más allá de la nula apuesta por la disciplina su idea es insistir y conformar una asociación local, y para ello se encuentra en conversaciones con otros dirigentes de ciudades como Viña del Mar y Limache.
Sin fines de lucro
El Club de Boxeo San Roque pertenece a la federación nacional de la disciplina y Marco Pontío advierte que se trata de "una institución sin fines de lucro".
"Yo no le cobro a los chicos que vienen a entrenar", explica el dirigente local, asegurando que "lo que nosotros queremos es sacar campeones y representar a Valparaíso con púgiles en cualquier parte de Chile o del mundo".
Sin embargo, y durante la conversación, el dirigente también confiesa algo más. "Yo quiero que los chicos que hoy se encuentran trabajando en el club tengan la oportunidad que otros no han tenido", sostiene, recordando que su hijo Luciano alcanzó a pelear en treinta combates "antes de tener que retirarse porque a mí, en ese instante, me faltaron los recursos y nadie nos ayudó".
Más allá de las dificultades, al dirigente se le nota entusiasmado: "En el verano también hacemos un taller de boxeo. Acá hay un grupo de chicos en medio de una situación de alto riesgo y que nos necesitan para canalizar la energía que tienen. Los cambios son realmente notables".
Las ganas de Pontío son evidentes, más aún cuando uno de sus mayores orgullos es que sea justamente su hijo Luciano, actual profesor de Educación Física del colegio Jorge Alessandri, quien lo acompañe como entrenador en lo que es el día a día del club San Roque.
Armar y desarmar
Otro de los orgullos que Marco Pontío atesora es el ring que pudo comprar tras pedir un préstamo bancario. "Esto es como el fútbol y para practicarlo hay que tener una cancha", sostiene.
"Lo hice con mi papá y es espectacular, con todas las medidas reglamentarias", explica, aunque sin dejar de lamentar que ante la ausencia de un espacio propio (o arrendado) para el club, actualmente el ring se encuentra guardado en el gimnasio del estadio O'Higgins". "Hay que armarlo y desarmarlo porque no tengo un lugar específico para tenerlo... he buscado lugares, pero los arriendos son muy caros", confiesa.
Y otra vez el dinero marca el desarrollo de la disciplina a nivel local. "Para poder hacer una velada, por ejemplo en el Fortín Prat, hay que pagar un arriendo de 600 mil pesos, siendo que ese recinto lo hicieron para el boxeo, tiene los túneles y las salidas... ahora, es entendible que la asociación de básquetbol cobre algo porque también necesita financiarse, pero hasta el año pasado recibíamos una ayuda municipal, la que hoy ya no existe", señala con resignación.
"Presenté un proyecto para una jornada en septiembre, con un presupuesto de un millón de pesos, pero hoy la municipalidad es puro fútbol y la verdad es que yo tampoco voy a andar rogando", insiste, aunque reconoce que "más allá de las dificultades yo no voy a dejar a los chicos botados. Lo cierto es que a veces cansa... el otro día estuve con Leandro Torres (seremi de Deportes), pero los acuerdos o las reuniones quedan ahí y el apoyo sigue siendo nulo".
Es así como el club de Boxeo San Roque no se cansa de dar pelea a la adversidad con el desafío de hallar nuevos campeones para Chile.
"Yo no le cobro a los chicos que vienen a entrenar... lo que nosotros queremos es sacar campeones y representar a Valparaíso con púgiles en cualquier parte de Chile o del mundo".
Marco Pontío, Presidente del Club, de Boxeo San Roque"
el año en que se fundó la Federación Chilena de Boxeo. 1915
Claudio Barrientos y Carlos Lucas obtuvieron medalla de bronce en los JJ.OO. de Melbourne. 1956